29/7/09

Lunes, 26 Enero del 2009 - Edición 674

HIDROBOLETÍN FENTAP

¡NO A LA PRIVATIZACIÓN DE LAS EMPRESAS PÚBLICAS Y AL DESPIDO DE LOS TRABAJADORES!

El mundo con el agua al cuello

NEOTEO.COM – 24/01/09.- Y nunca peor dicho. Según advierten los ecologistas nos quedamos sin agua. El mundo se encuentra en peligro de llegar a lo que ya llaman “el pico del agua”, situación catastrófica donde los países entrarían en guerra por el dominio del escaso elemento. Se prevé que para el 2025 nos estemos arrancando la cabeza para poder beber un sorbo de agua o disponer de algunos litros para las funciones más básicas. Si no ponemos remedio, estamos abocados a una era de tormentos bélicos y sufrimientos hídricos.

No aprendemos. A veces uno se pregunta si en el fondo tenemos merecido todo lo que nos pasa. Arrasamos los bosques del planeta, acabamos con infinidad de especies, ensuciamos la tierra, contaminamos los mares, enturbiamos los cielos. Desatamos guerras químicas, biológicas y nucleares. Reventamos pueblos enteros, pulverizamos ciudades, asesinamos hombres, violamos mujeres y masacramos niños. Y ahora, nos damos cuenta de que también vamos a acabar con el agua, ese recurso que nos parecía infinito e imposible de expoliar. Pues bien, según advierte un informe anual del Pacific Institut de California, el mundo está llegando a unos niveles de saturación de población y una falta de capacidad de ordenar el agua de modo sostenible, que pronto vamos a llegar a lo que han dado en llamar “el pico del agua”. Este término se ha empezado a utilizar recordando el “pico del petróleo”, situación que nos avisa de que mucho antes de que se termine definitivamente el recurso, la humanidad entrará en una peligrosísima fase de agonía donde lucharan todos con todos por agarrar esos últimos litros de combustible que serán carísimos. Y claro, se convierte en una espiral de violencia, en la que todos los países quieren hacerse dueños del escaso bien y aparte de subir meteoricamente de precio por la brutalidad de la demanda, la confrontación por la fuerza está más que garantizada. Este panorama ya ha sido predicho por muchos especialistas y no tardará en hacerse realidad. Dicen que apenas 30 años.

Un simple zumo necesita 850 litros de agua para producirseCon el agua va a suceder lo mismo. No es que se vaya a acabar de golpe (en los mares existen billones de litros), pero el precio de transformar esa agua en apta para el consumo humano se disparará hasta límites insostenibles, haciendo que sólo los más adinerados puedan acceder a ella. Según afirma Peter Gleick, el director del Pacific Institut de California, la agricultura, la industria y otras demandas, se llevan la mitad del agua dulce del mundo. Sin ir más lejos, un vaso de zumo se naranja “cuesta” producirlo 850 litros, un microchip necesita 16.000 litros para eliminar sus residuos y una hamburguesa gasta 2.400 litros según el tipo de carne y de donde provenga.

Dan Smith, el Secretario General del British-based peacebuilding organisation International Alert dijo: “El agua es una condición básica para la vida. Su disponibilidad y calidad es fundamental para todas las sociedades, especialmente en relación con la agricultura y la salud. Hay lugares - África occidental, el Ganges en la India y el río Brahmaputra en Nepal hoy y en el Perú dentro de los diez años – en donde los cambios importantes en los ríos generan un riesgo de conflicto violento. La buena gestión del agua es parte de la paz".

El falta de agua está presente en muchísimas guerras David Zhang, un geógrafo de la Universidad de Hong Kong, publicó un estudio en la revista de la Academia Nacional de Ciencias (EEUU) donde analizó 8.000 guerras ocurridas durante más de 500 años de nuestra historia y así concluyó que la escasez de agua ha desempeñado un papel como catalizador muchísimo más importante de lo que antes suponía. Es decir, que lo que ha motivado las guerras quizá no haya sido el agua de un modo directo pero si ha constituido un factor determinante para disparar las hostilidades y meter a las sociedades en un conflicto violento que de otro modo quizá no habría sucedido o lo habría hecho mucho más tarde y de modo menos virulento. "Estamos en alerta, porque esto nos indica que la escasez de recursos es la principal causa de la guerra", dijo. "Los seres humanos definitivamente tienen los conflictos por culpa de eso".

La India o China son países en estado crítico que podrían precipitar una gran guerra Gleick afirma que aunque parece sencillo despilfarrar el agua como recurso sostenible y volver a reutilizar sin preocuparse de ella porque el ciclo nos parece indefinido, la realidad se convierte en algo mas sombrío cuando nos damos cuenta de que no es la cantidad de agua lo que generará las tensiones sino llegar a ese pico del agua donde los beneficios de la obtención del recurso serán superados por el trastorno ecológico y la dificultad cada vez mayor de conseguir agua de calidad. Dice que una parte muy importante del problema es la enorme ineficacia con que son tratadas las aguas por parte de la industria y la agricultura. Tanto es así que la ONU declara ya que en el año 2025 dos de cada tres personas podrían estar viviendo en condiciones de estrés hídrico. La muerte por deshidratación es una de las más horribles y agónicas que existen, pues morir de sed provoca un dolor de cabeza cien veces superior al de la peor resaca que recordemos porque debido a la falta de agua, el cuerpo se nutre del líquido cefalorraquídeo del cerebro, y por tanto, lo seca. Además, tras dos días sin beber, dejamos de orinar y los riñones se hinchan como un globo, lo que causa un dolor similar a una puñalada; los ojos se secan y endurecen como si fueran de cristal. La agonía dura de tres a siete días.

Si queremos vivir en paz tendremos que tratar mejor a la fuente de la vida un informe del World´s Water avisa de la alarmante situación de China, que con su salvaje crecimiento y poco eficaz tratamiento del problema, está generando un peligro enorme para el planeta, amenazando incluso con la estabilidad mundial. Los occidentales creen que los conflictos al otro lado del planeta no les afectan pero nada más lejos de la realidad. Cuando la gran China comience a encontrarse con el agua al cuello ya veremos lo que ocurre con la paz y la concordia universal. En definitiva, que ya tenemos dos “picos” dispuestos a clavarse profundamente en nuestras sienes para dentro de unos 30 años: El del petróleo y el del agua. No somos conscientes del peligro que supone llegar a esta situación de escasez y de la inminencia y gravedad de las guerras que se nos avecinan. Se espera que la ciencia resuelva todo esto, con energías renovables y optimización de los procesos productivos tanto industriales como agrícolas pero ¿y nosotros no tenemos nada que decir? ¿Lo único que podemos hacer es seguir bebiendo zumo de naranja y echarle gasolina al deportivo?

ECONOMÍA

La prioridad del agua - Pedro Pablo Kuczynski

CORREO – 25/01/09.- Una conferencia realizada el miércoles pasado en Miraflores destacó la vital importancia del agua. El agua es esencial para una población saludable y una economía próspera. El ingeniero Alberto Benavides, fundador de la Compañía Minera Buenaventura, destacó la enorme cantidad de agua que nuestros ríos de la Costa arrojan al mar, sin haber sido usada. Esta agua desperdiciada podría ser utilizada para recargar los acuíferos de la Costa, muchos de los cuales están bajando de nivel, y elevando los costos de la agricultura.

El ingeniero Guillermo León, presidente de Sedapal, presentó los planes de la empresa para cubrir al 100% la necesidad de la población capitalina de agua potable y alcantarillado. Y el meteorólogo Abraham Levy destacó los peligros de la creciente sequía en nuestros Andes y la retirada alarmante de nevados y glaciares, ambos fenómenos causados en parte por la pérdida de bosques amazónicos en Bolivia y el oeste de Brasil para dedicar esas tierras al cultivo de la soya.

Todos sabemos que el agua es vital. La mayor parte del agua en la Costa y Sierra se utiliza para riego, con muchas ineficiencias, como se ha comprobado en muchos estudios. Pero lo que nos preocupa es el agua de uso residencial. En el Perú, sólo dos tercios de la población tienen agua en su casa, y sólo la mitad cuenta con desagüe. Las cifras oficiales dicen otra cosa -incluyen los caños comunitarios como agua residencial, y las cloacas abiertas como alcantarillas residenciales-. Pero la realidad es otra: un tercio de la población no tiene agua en su casa, una parte importante del agua no es tratada (y por consiguiente no es potable), sólo el 22% de los desagües son procesados mientras que el resto se vierte junto con la basura a los ríos y al mar.

Hay varias razones de peso para corregir estas deficiencias con urgencia. Ya el programa Agua para Todos lo está intentando, pero el gobierno en su Plan Anticrisis solamente le ha dado al programa 2% de los gastos de inversión adicionales. ¿Cuáles son esas razones?

1. Dignidad. La vida sin agua es un calvario para los pobladores: ir a buscar el agua y subirla a la casa en la punta de un cerro, cargando un balde pesado, esperar el camión y pagarle S/.10 por metro cúbico cuando el agua municipal cuesta de S/.1 a s/.2, sufrir la indignidad de no poder bañarse cuando uno quiere.

2. Salud. La carencia de agua potable es una de las principales causas de mortalidad infantil en el Perú. Estamos en 22 niños que mueren en su primer año de vida -principalmente por diarrea y cólera-. Estábamos en 34 por mil nacidos vivos en el año 2000, pero deberíamos tratar de llegar a no más de 10 en cinco años. El agua limpia es la principal vía para lograr este objetivo. Y no olvidemos que las cloacas abiertas y las aguas estancadas son la fuente principal del dengue y del paludismo.

3. Economía. Para llegar a una cobertura del 95% en 10 años se debería invertir entre US$6 a US$8 mil millones. El proceso de inversión probablemente genere un millón de puestos de trabajo (la obra misma más todos los proveedores). No podemos ni contar la cantidad de actividades y pequeñas industrias que se crearían con un suministro confiable de agua.

En AguaLimpia, la pequeña ONG que fundé hace dos años con la ayuda del Banco Interamericano, del Scotiabank, entre otros, tratamos de ayudar a pequeñas municipalidades para que organicen y puedan financiar sus sistemas de agua y alcantarillado. Actualmente trabajamos en 22 comunidades de la Sierra, con unos 28 mil habitantes. Esperamos tener muchos imitadores.

HIDROMUNDO

URUGUAY

Por la papelera, el río Uruguay es hoy el sitio más monitoreado del mundo. Al menos siete organismos estatales y no gubernamentales evalúan si sufre un daño ambiental

CLARIN.COM – 25/01/09.- Casi seis años desde el primer análisis. Siete organismos de control. Estudios sobre el agua, aire, radiogeoquímicos y de fito y zooplancton. Más de 40 informes redactados. Muchas son las características del plan de vigilancia ambiental sobre el Río Uruguay. La conclusión es siempre la misma. Por ahora, "Botnia no contamina".

Clarín diálogo con los organismos que vigilan a la pastera para ver pasado, presente y futuro de los controles.

La Dirección Nacional de Medio Ambiente uruguaya (DINAMA) comenzó el monitoreo en 2003. Cuando la planta se puso en funcionamiento, la DINAMA pasó a presidir la "Comisión de Seguimiento de la planta de celulosa, puerto y zona franca de Botnia", integrada por organismos oficiales, la empresa y ONGs. Esta comisión ya ha tenido trece reuniones, en las que han concluido que la planta no impacta de manera negativa, aseguró su titular, Alicia Torres.

El Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU) elabora, desde abril de 2005, análisis microbiológicos a partir de muestras tomadas en cinco puntos del Río. Estudian los niveles en agua y aire de materiales como Fósforo, Nitrógeno y Amonio. Miguel Brechner, Presidente de la institución, confirmó que "en ninguno de los 37 reportes hechos se han encontrado signos de contaminación".

La consultora canadiense Ecometrix, por pedido del Banco Mundial, ha elaborado ya dos informes, dentro de un plan de cuatro, y ha descartado cualquier posibilidad de contaminación. El primero, de 2006, sirvió para destrabar la ayuda financiera para la construcción de la planta. Bruce Rodgers, uno de los especialistas de la firma, adelantó a Clarín que "Ecometrix ya está trabajando en el tercer informe", aunque precisó que los resultados no estarán hasta dentro de unos meses.

Green Cross, la ONG dirigida por el ex presidente ruso Mijail Gorbachov, también monitorea a la pastera. Sus primeros dos informes, de 2008, descartaron cualquier contaminación. Esta semana, la directora de la filial argentina, Marisa Arienza, adelantó a Clarín que el tercero seguirá las conclusiones de los otros dos y que los niveles de agentes contaminantes son mucho menores a los permitidos.

El titular del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), Enrique Martínez, también aseguró a Clarín que hicieron estudios de la calidad de las aguas del río Uruguay que por ahora no arrojaron pruebas de contaminación y que seguirán monitoreando.

La Secretaría de Ambiente encargó tres informes, los únicos que serán tenidos en cuenta como parte de la estrategia argentina ante La Haya, coordinados también por Cancillería. Uno de ellos a la Universidad de Buenos Aires, que había comenzado su monitoreo en 2006, a pedido de la intendencia de Gualeguaychú. Jorge Aliaga, director del equipo de 30 investigadores, aseguró en exclusiva a Clarín: "Si hubiésemos detectado que el funcionamiento de la planta era nocivo para la gente, hubiésemos avisado de inmediato y tomado alguna medida". Igualmente, aclaró que "los resultados finales van a estar de acá a seis o doce meses".

Otro de los informes fue encargado a la Universidad de La Plata, y se realiza en el Laboratorio de Espectrometría de Masas de Alta Resolución. Los equipos técnicos, dirigidos por Juan Carlos Colombo, se juntaron esta semana con autoridades gubernamentales y "explicaron cómo se está trabajando" según confiaron fuentes de la cartera ambiental. El tercer estudio fue encargado a la Universidad de Luján.

Botnia también realiza un monitoreo constante, que certifica los resultados de los otros estudios e incluye tecnología de avanzada ECF Light. El último análisis de la empresa, de diciembre de 2008, dio niveles de contaminación aun menores a los que se observaron, por ejemplo, en Suecia y Finlandia.

PARAGUAY

Cambio climático y el impacto en el agua y la alimentación en Paraguay

ABC.COM.PY – 25/01/09.- La sequía, el extremo calor, el exceso de lluvia en reducido tiempo están causando un impacto negativo a los cultivos agrícolas, la ganadería y a los recursos hídricos. Se atribuyen a efectos del cambio climático. Desde hace un par de años se vienen pronosticando estos problemas, pero evidentemente no hubo trabajo de mitigación ni siquiera de adaptación de parte del Gobierno.

La escasez de agua impacta en habitantes de Central así como de Villarrica. El cambio climático empieza a dejar huellas.

Nuestro país está sintiendo progresivamente el impacto de los efectos del cambio climático. Se registran jornadas extremadamente calurosas, incluso en horas nocturnas, sin precedentes en las últimas décadas.

A la vez, ocurren precipitaciones periódicas con este agravante: de una sola vez, y en pocos minutos, llueve más de lo que se tiene registrado como promedio para el mes.

Los primeros impactos se evidencian en la producción agrícola. Cultivos de soja, algodón, maíz, sandía, melón y hasta la mandioca se van perdiendo. No tienen el agua suficiente para su crecimiento y, por ende, los frutos no son aptos para la venta ni para el consumo, en el caso de las sandías, melón y otros productos fructícolas.

Para los cultivos es necesario que las lluvias sean espaciadas y no de una sola vez y en cantidad.

Expertos técnicos de la Unidad de Gestión de Riesgo del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), a cargo del Ing. Edgar Mayeregger, realizan periódicos recorridos por el campo y recogen informaciones nada alentadoras sobre la situación de los cultivos. Resaltan en sus informes el estrés que sufren las plantas como consecuencia de la falta de agua.

Agua, una necesidad

El impacto del cambio climático afecta también a los recursos hídricos. Se hace difícil la navegación en el río Paraguay, lo que afecta el traslado de alimentos, productos industriales y bienes de un lugar a otro, principalmente de Asunción hacia el norte del país.

Pero no solo a la navegación impacta la bajante de las aguas y la sequía por el exceso de calor. También grandes sectores de la población del departamento Central, como ejemplo, no cuenta con suficiente agua, entre la tarde y la noche. Los habitantes deben extremar recursos para juntar en recipientes para casos en que no sale una sola gota de agua de la canilla.

En Villarrica, la Navidad y el Año Nuevo fueron un infierno para habitantes de diferentes barrios, como el histórico Ybaroty. Es que en ciertos horarios no hubo agua, especialmente a la noche, cuando todos deseaban ducharse y cambiarse de ropas para el brindis familiar. Esta ciudad que comparte el agua con Coronel Oviedo, a través de la planta de la Essap en el río Tebicuarymí. El problema sigue hasta ahora en la capital guaireña.

Estos ejemplos siguen en varios puntos del país, como consecuencia de la falta de estudio sobre el impacto que cada vez irá en aumento, en esta temporada, y de la falta de adopciones de medidas mitigatorias.

¿Qué hace el Gobierno?

Más calor, menos alimentos y menos agua son el panorama que empieza a impactar en nuestro país. Pero ¿qué hace el Gobierno para enfrentar estos problemas de carácter social, político y económico? No se conoce ninguna medida sobre acciones de mitigación ni de adaptación. Estas tareas se encomiendan en esferas de las Naciones Unidas y a través de organismos multilaterales, con participación del sector público y privado.

En la Secretaría del Ambiente (Seam) debería generarse las ideas para estos procesos de mitigación y de adaptación, pero para ello se requiere de la capacidad técnica de los que están en dicha institución. Esa capacidad técnica no se evidencia, y estos problemas de carácter nacional no están teniendo una respuesta adecuada. La ineficiencia demostrada por la Seam repercute en millonarias pérdidas para los agricultores y, por añadidura, impactará en los recursos del Estado, que deberá subsidiar o encontrar algún mecanismo de salvataje económico para ayudar a los damnificados por el impacto del cambio climático.

Existen planes y modelos de aplicaciones de otros países para enfrentar estos efectos en la agricultura, ganadería y el agua, que de seguro tendrán los de la Seam, pero no son aplicados ni mínimamente debatidos a nivel nacional.

Uno de los contribuyentes al impacto del suelo es la deforestación, que persiste ante el impune contrabando de rollos y carbón. Este impacto es un problema que atañe a la Seam, pero su titular, el ministro José Luis Casaccia, en carta remitida a este diario, dijo que no es de su competencia.

Si el propio ministro Casaccia desconoce la ley de creación de la Seam, y si desconoce roles y responsabilidades de la institución establecidos en la misma ley, entonces poco o nada se puede esperar para enfrentar algo más complejo como son los impactos por efectos del cambio climático.

Panorama negro

Conforme con los expertos, este problema de alteración en el clima de nuestro país y de la región ocurrirá todos los años, con el agravante de que cada vez será peor, porque irá en aumento paulatino. Y algo hay que hacer.

“Defender el Agua es Defender la Vida

www.fentap.org.pe

No hay comentarios: