Jueves, 20 de julio de 2023 – Año XVII – Edición 4262 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
Sunass: salen a la luz cuestionados
nombramientos en medio de polémica por cambio de normativa
Se reportaron 16 observaciones en contra de nueva propuesta
La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento
(Sunass), encargada de fiscalizar, normar, sancionar y solucionar controversias
en el servicio de agua a escala nacional, ha llamado la atención por sus
recientes nombramientos.
Según un informe de ‘Contracorriente’, el presidente del
directorio, Mauro Gutiérrez Martínez, habría sido propuesto por Salatiel
Marrufo, y en los últimos 6 meses habría convocado a seguidores del
expresidente Martín Vizcarra para conformar una terna.
Ahora, los que forman parte del Consejo Directivo de Sunass buscan imponer una nueva norma de supervisión del consumo de agua, que ha sido observada por la Defensoría del Pueblo, y se teme que perjudique económicamente a los usuarios del servicio.
La normativa en cuestión ha recibido 16 observaciones
desde enero por parte de la Defensoría del Pueblo, la Confiep e, incluso, la
comisión de Defensa del Consumidor del Congreso.
Esto ha despertado preocupación entre los usuarios de
agua potable, pues actualmente, se requiere la supervisión de todos los
medidores cada 5 años para detectar posibles desperfectos que podrían llevar a
una sobrevaloración de las tarifas.
Sin embargo, la propuesta plantea cambios en la
supervisión, proponiendo que solo se realice una muestra aleatoria de medidores
y, según los resultados, se cambien todos los medidores cada 3 años. El
reportaje hace énfasis en que solo dos empresas tienen el monopolio de la venta
de medidores en el país.
A pesar de las objeciones y preocupaciones, el
presidente del directorio de la Sunass mantiene su propuesta, amparado en que
su cargo es por 5 años y es prácticamente inamovible.
El Consejo Directivo de la Sunass, ahora con gente
vinculada al propio titular de la institución, es el encargado de aprobar las
normas, y en un acta obtenida en exclusiva por Willax TV, se ha revelado el
voto en contra de Ana María Fox, fundadora del organismo en mención, quien no
está de acuerdo con el cambio normativo.
En tanto, en la capital, Sedapal, ha verificado solo
un 12 % de los medidores, argumentando que están a la espera de la resolución
de la nueva normativa propuesta por la Sunass. Esta situación es preocupante
considerando que más de 3.6 millones de peruanos no tienen acceso al agua
potable.
Nombramientos
Con relación a los nombramientos en la Sunass, se
destaca el caso de Mauro Gutiérrez Martínez, un economista con 6 años de
experiencia en gestión pública, y es el actual presidente del directorio.
Entre los exfuncionarios del gobierno de Martín
Vizcarra que se encuentran en el organismo regulador del agua figuran:
Nadia Villegas Gálvez: ocupa el cargo de asesora
principal de la presidencia de la Sunass. Previamente, se desempeñó como
directora general del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) en el
año 2018.
Lucia Ruiz Ostioc: exministra de Ambiente en el
gobierno de Martín Vizcarra, que forma parte del Consejo Directivo Regulador de
la Sunass. A través de su cuenta de Twitter, ha mostrado entusiasmo y ha
retuiteado contenido relacionado con marchas y luchas a favor del presidente
Pedro Castillo.
Patricia Carreño: abogada que previamente trabajó como
funcionaria en el Ministerio de Economía durante el gobierno de Vizcarra.
Posteriormente, fue contratada por Mauro Gutiérrez para integrar su equipo de
asesores en la Sunass. Cabe resaltar que su paso por la Sunass le abrió las
puertas para obtener un puesto como viceministra en el Ministerio de
Transportes y Comunicaciones (MTC). https://www.expreso.com.pe/
HIDROREGIONES PERÚ
Caída de plataforma de petróleo en el mar de Piura provoca desastre ambiental
Este lunes en la zona de Peña Negra Mar, en el distrito de
El Alto, provincia de Talara se produjo la caída de la plataforma OO en el Lote
Z-2B, operado por la empresa Savia Perú. La estructura tenía 46 años de
antigüedad y se encontraba en estado de abandono desde junio del año pasado.
Los pescadores artesanales de Cabo Blanco venían
advirtiendo sobre el estado de la plataforma hace varios meses, ya que se temía
que podía poner en riesgo su trabajo por posibles impactos ambientales. Ante
ello, la comunidad pesquera solicitó de manera inmediata la presencia del
Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
El organismo adscrito al Ministerio del Ambiente
(Minam) dio inicio a las acciones de supervisión correspondientes cuando la
emergencia ambiental ya había ocurrido. Sobre ello, el OEFA ha informado que
está realizando las labores correspondientes para determinar la causa de esta,
así como la responsabilidad de los hechos y el impacto ambiental generado.
Antecedentes de daños ambientales
De acuerdo con el Diario El Regional de Piura, la
decisión de retirar la Plataforma OO, instalada en abril de 1975 para realizar
las operaciones de perforación y producción de pozos de petróleo y gas en el
zócalo continental, se tomó debido a las difíciles condiciones oceanográficas
actuales y a su antigüedad.
Estas condiciones dificultaban significativamente las
labores de reparación y mantenimiento de la estructura, la cual era soportada
por un castillo metálico de cuatro patas, sumergido bajo el agua.
En junio del año pasado, mediante la Resolución
Directoral N° 079-2022-MINEM/DGAAH, el Ministerio de Energía y Minas (Minem),
se aprobó el Plan de Abandono de la Plataforma VV, pero sin incluir a la
plataforma OO. Como se recuerda, en diez
años, el OEFA ha atendido al menos 40 emergencias ambientales de la empresa
Savia Perú.
El más reciente sucedió en abril del año pasado cuando
se hundió en el océano la plataforma VV, ubicada a 7 km de la costa del
distrito de Lobitos. Sin embargo, los pescadores artesanales de la zona
continúan reportando derrames constantes. https://lalupa.pe/
Defensoría del Pueblo advierte que agua del sector San Luis, distrito de Amarilis en Huánuco, no es apta para el consumo humano
La Defensoría del Pueblo en
Huánuco advirtió en el informe (Informe n.°
042-2023-GRH-GRDS/DIRESA-DG/DESA/DSBHAZ) de la Dirección Regional de Salud
(Diresa) de Huánuco que el recurso hídrico en el sector San Luis, en el
distrito de Amarilis, no cumple con los parámetros microbiológicos al exceder
los límites máximos permisibles establecidos en el Reglamento de Calidad del
Agua para Consumo Humano aprobado por Decreto Supremo n.° 031-2010-SA.
El análisis de las muestras
tomadas en diferentes puntos de la red de distribución, si bien arrojaron como
resultado el cumplimiento del parámetro de cloro residual, se determinó la
presencia de nematodos y organismos de vida libre, lo cual hace que el agua no
sea apta para consumo humano. Asimismo, dicho informe señala que la Empresa de
Agua Potable y Alcantarillado (Emapa) de San Luis, no cuenta con los registros
de la fuente ni de los sistemas de abastecimiento de agua a la población.
Ante este grave riesgo
sanitario, la oficina de la Defensoría del Pueblo en Huánuco instó a Emapa San
Luis a mejorar los procesos de tratamiento del agua que se distribuye a la
población, realizando el control antes correspondiente, así como cumplir con el
registro de la fuente de agua para consumo humano y de los sistemas de
abastecimiento a su cargo. De la misma manera se recomendó a la Sunass a
verificar que el prestador del servicio cumpla con los procesos de tratamiento
y control del agua potable.
“El consumo de agua no tratada puede causar infecciones estomacales y otras enfermedades, convirtiéndose en un riesgo sanitario para las personas”, precisó la jefa de la Oficina Defensorial de Huánuco, Lizbeth Yllanes.
Finalmente, la representante de
la institución indicó que realizará el seguimiento al cumplimiento de sus
recomendaciones, a fin de salvaguardar el derecho humano al agua y la salud de
la población. https://www.defensoria.gob.pe/
Estrés hídrico, el problema de cada día en el sur agroexportador de Perú
Vivir sin agua en una zona
desértica es el día a día de Ortensia Tserem, una mujer indígena del pueblo
wampis, con su hábitat en la selva amazónica del noreste de Perú, que llegó
hace tres años a la periferia de la ciudad costera de Ica con el sueño de
mejorar la situación económica de la familia.
Sin embargo, las penurias para
abastecerse del recurso hídrico castigan su vida. Cada semana debe comprar agua
a los camiones cisterna, lo que la obliga a gastar en el líquido unos 56
dólares mensuales, algo excesivo para los ingresos familiares.
“Tengo una niña de tres añitos y
un bebe de un año, lo más difícil es asegurar agua para su aseo y limpieza,
para que no se enfermen”, declaró a IPS mientras mostraba los bidones de
plástico donde almacena el líquido dentro de su precaria vivienda en el
asentamiento Intercultural Nuevo Perú a las afueras de Ica, capital del
departamento del mismo nombre.
Al igual que la suya, las 150
familias asentadas en esta zona desértica del departamento de Ica, al sur del
de Lima, carecen del servicio de agua, desagüe y luz.
Su asentamiento informal es
parte de la zona conocida como Barrio Chino, situada en el kilómetro 163 de la
Panamericana Sur, una gran arteria que atraviesa el país. Está poblada por
mujeres y hombres venidos de localidades de regiones peruanas de Los Andes y la
Amazonia, con la esperanza de ser parte de la bonanza agroexportadora de la que
se jacta Ica.
“Desde inicios del 2000 en Ica
estamos sintiendo que se agudiza la escasez de agua…, por efecto de la
perforación de pozos cuando luego de la reforma agraria vuelven los grandes
latifundios por el tema de la agroexportación”: Gustavo Echegaray.
Esa activad, que aporta 4 % del
producto interno bruto (PIB) peruano, es una de las que ha exacerbado el
problema de la escasez de agua en Ica, el sexto departamento de menor tamaño de
los 24 del país y que tenía en 2022 poco más de millón de habitantes, según el
estatal Instituto Nacional de Estadística e Informática.
“Desde inicios del 2000 en Ica
estamos sintiendo que se agudiza la escasez de agua debido a la disminución de
la napa freática por efecto de la perforación de pozos, cuando luego de la
reforma agraria vuelven los grandes latifundios por el tema de la
agroexportación”, señaló a IPS el ingeniero Gustavo Echegaray, reputado experto
en el tema de recursos hídricos.
La napa
freática, recordó, es el agua subterránea y se considera la reserva para el
futuro, por lo que su manejo y uso sostenible es un imperativo.
Residente en la
ciudad iqueña de Santiago, vive también el racionamiento cotidiano de agua.
Reciben una hora diaria de suministro, que aprovechan para diferentes tareas y
para llenar tanques domésticos para poder abastecerse.
Esa complicada
cotidianidad en las urbes, se torna mucho más crítica en sus periferias.
El lejano
derecho al agua
Para Tserem, de
27 años, el derecho al agua garantizado en normas internacionales y en la
Constitución de Perú, es solo papel. “Mire cómo nos afecta vivir sin agua, en
la salud, en la alimentación, en tener un ambiente sano, en nuestra propia
tranquilidad”, explicó mientras recorría con IPS su vivienda de madera.
El sanitario es
un silo (letrina), situado al fondo del patio de la vivienda, y la ducha diaria
una experiencia ajena para ella y su familia.
Su pareja es un
jornalero de una de las grandes fincas dedicadas a cultivos para la
exportación, cuyo trabajo oscila según los requerimientos de mano de obra.
“Actualmente estamos en temporada baja, no hay cosecha todavía, está trabajando
en la poda de mandarina, pero solo unas horas al día”, contó con voz queda.
Menos horas de
trabajo implican la reducción de sus ingresos y por tanto el dolor de cabeza de
ver cómo se junta el dinero necesario para la compra del agua.
“Lo peor es no
tener agua, al sol te acostumbras, a los vientos… pero sin agua ni desagüe es
muy difícil. No nos vamos porque no tenemos otro lugar, solo esperamos que las
autoridades cumplan lo que nos prometieron de candidatos, de poder tener agua
potable”: Alicia Fernández.
Ella también se
emplea en periodos de cosecha y en otros momentos donde crece la demanda en los
grandes fundos cercanos, y el resto del tiempo se dedica a cuidar a sus hijos y
a las tareas domésticas.
Para María
Huincho, de 39 años, también migrante, en su caso del andino departamento de
Huancavelica, colindante con la zona alta de Ica, la situación es similar.
Llegó con su pareja y sus tres pequeños hijos con la ilusión de trabajar en
alguna de las fincas productoras de arándanos, uvas, mandarinas, alcachofas o
espárragos, entre otros.
“Ya tengo tres años aquí y lo más difícil es estar sin agua, yo me baño una vez a la semana, no se puede más”, comentó a IPS. Es vecina de Tserem y se apoyan en las labores cotidianas. “Aquí nunca se puede estar sin hacer nada”, dijo sonriendo mientras miraba a su alrededor, una gran pampa de arena donde se levantan las casitas de madera.
Ica es conocida
mundialmente por sus Líneas de Nazca, expresión de la cultura preincaica del
mismo nombre, que desarrolló la tecnología hidráulica con una amplia red de
acueductos, que cuando se conoció asombró al mundo.
Hoy, el estrés
hídrico es una realidad en gran parte del departamento, uno de los más
afectados por la creciente escasez hídrica en este país sudamericano de 33
millones de habitantes.
Desbalance
hídrico
Según las
Naciones Unidas toda persona requiere de 20 a 50 litros diarios de agua limpia
y segura para cubrir sus necesidades para una vida saludable. Perú, pese a
contar con una gran diversidad de fuentes hidrográficas, no garantiza el
derecho al agua a su población.
El Centro
Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan) ha proyectado que para 2030, 58 %
de la población peruana vivirá en zonas afectadas por la escasez del agua. La
sobreexplotación es una de las razones.
El ingeniero
Echegaray recuerda a IPS desde su ciudad que al finalizar la década de 2000 la
frontera agrícola en Ica era menor y que con el gobierno autoritario de Alberto
Fujimori (1990-2000), quien cambió el modelo económico a un régimen de libre
mercado, se adjudicaron tierras que eran eriales para la inversión de empresas.
“La frontera
agrícola ha crecido mucho en el lado de lo que era desierto, en la pampa de
Villacurí, que está antes del ingreso a (la ciudad de) Ica y también en el
valle bajo. Por la tecnología de riego que se empieza a aplicar logran
habilitar una gran cantidad de tierras eriazas con la perforación de nuevos
pozos, lo que se hizo sin control hasta el año 2009”, refirió el especialista.
La consecuencia
se evidenció, detalló Echegaray, en la disminución del agua para los cultivos
de la pequeña agricultura y para abastecer el consumo humano.
“La población de
(departamento de) Ica ha crecido y a la vez la cantidad de agua ha disminuido.
Se ha generado un problema serio en la parte baja de la provincia (también
llamada Ica) y en general en la mayoría de los distritos donde el agua es
racionada, hay zonas donde las familias acceden al recurso una o dos horas por
semana o cada 15 días”, dijo.
Agregó que por
la sobreexplotación de los pozos la napa freática está más frágil y que se está
produciendo un desbalance hídrico, es decir que la cantidad de agua que se
infiltra en los acuíferos es menor a la que se extrae mediante los pozos.
Sin agua la vida
es muy dura
En marzo del
2009 se aprobó la Ley 29338 sobre los recursos hídricos, que regula las zonas
de protección y las de veda.
Esa última se
refiere a la “prohibición de ejecutar obras de aprovechamiento hídrico; el
otorgamiento de nuevos permisos, autorizaciones, licencias de uso de agua y
vertimientos”. La estatal Autoridad Nacional del Agua (Ana) ya la aplicó para
los acuíferos de Ica, Villacurí y Lanchas, los tres en el departamento iqueño.
Sin embargo,
pese a la veda, siguen apareciendo informaciones de la propia Ana sobre pozos
nuevos en esos acuíferos. “No todos son detectados”, se lamentó Echegaray
Rosa Huayumbe,
de 47 años, nació en la ciudad amazónica de Iquitos y su amiga Alicia
Fernández, de 30, en la iqueña Pisco. Llegaron al barrio de Dos de Mayo en el
municipio iqueño de Subtanjalla hace ocho años, y en todo ese tiempo nunca han
contado con agua potable en su domicilio.
Es una zona en pobreza,
desértica, donde la arena cubre las calles sin asfaltar y las pequeñas
viviendas, la mayoría de madera.
Están en una
zona empinada y deben desenrollar metros de manguera para que el camión
cisterna pueda suministrarles el agua hasta sus hogares. Ellas compran el
equivalente a tres dólares cada día, y con esa cantidad se arreglan para las
necesidades básicas.
“Trabajamos en
los fundos, ahorita solo hay labor para hombres, que es la poda. Tenemos más
tiempo para estar con los hijos pero sin dinero y es un problema para comprar
el agua”, comentó Huayumbe a IPS.
“Lo peor es no
tener agua, al sol te acostumbras, a los vientos… pero sin agua ni desagüe es
muy difícil. No nos vamos porque no tenemos otro lugar, solo esperamos que las
autoridades cumplan lo que nos prometieron de candidatos, de poder tener agua
potable”, agregó Fernández, durante una pausa en la empinada calle que las
regresa a sus casas.
Echegaray
advierte que, si no se corrige la situación actual, Ica colapsará y se quedará
sin agua. Plantea la realización de estudios que determinen el desbalance
hídrico, que se estima entre 38 y 90 millones de metros cúbicos anuales.
“Demasiada diferencia”, anotó.
También propone
poner en funcionamiento algunas presas naturales e incrementar las experiencias
de siembra y cosecha de agua, obras que recuperan técnicas ancestrales para
infiltrar los acuíferos. https://ipsnoticias.net/
“Defender el Agua es Defender la Vida”