Miércoles, 17 de agosto de 2022 – Año XV – Edición 4032 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
‘Los chiclayanos’ repartieron obras
por S/82,7 millones
El
exasesor del Ministerio de Vivienda Salatiel Marrufo Alcántara; el alcalde de
Anguía, Nenil Medina Guerrero; y los empresarios y amigos del jefe del Estado
Segundo Sánchez Sánchez y Jenín Cabrera Fernández participaron en la definición
de los proyectos que fueron financiados por decreto del presidente Castillo
Cuando ejercía como jefe del Gabinete de Asesores del
Ministerio de Vivienda y Construcción, durante la gestión de su íntimo amigo y
entonces titular del despacho Geiner Alvarado López, el abogado Salatiel
Marrufo Alcántara consiguió que el presidente Pedro Castillo financiara
mediante el Decreto de Urgencia 102-2021 cuatro proyectos de obras públicas en
Cumba, un distrito de la provincia de Utcubamba, región Amazonas.
Cumba es el amado pueblo de Marrufo que lo vio nacer el 20
de julio de 1979.
Son cuatro proyectos de agua potable y saneamiento por 5
millones 338 mil 826 soles, los que fueron adjudicados con sorpresiva celeridad
el 19, 23 y 29 de noviembre del 2021.
De acuerdo con una investigación del dominical ‘Cuarto
poder’, el viernes 30 de agosto del 2021, Salatiel Marrufo, junto con la
viceministra Elizabeth Añaños Vega, y la jefa de Presupuesto del Ministerio de
Vivienda, Jacqueline Castañeda del Castillo, por disposición del presidente
Castillo, se dirigieron a una reunión con un “gabinete de asesores en la sombra”
que los esperaba en la cuadra dos de la calle Palo Blanco, en Surquillo.
La agenda era discutir la aprobación de los distritos que
serían seleccionados para recibir financiamiento de obras públicas mediante el
Decreto de Urgencia 102-2021.
Para Añaños y Castañeda fue toda una sorpresa, pero no para
Salatiel Marrufo.
Estaban el empresario Jenín Cabrera Fernández, compañero de
Salatiel Marrufo en la Universidad Nacional Pedro Ruíz Gallo, de Chiclayo,
quien a su vez también es condiscípulo del exministro de Vivienda, Geiner
Alvarado. También estuvo presente el alcalde de Anguía, Nenil Medina Guerrero,
para quien Marrufo trabajó como asesor legal.
Y completaba el grupo el empresario Segundo Sánchez
Sánchez, dueño de la famosa casa de Sarratea donde el jefe del Estado mantuvo
reuniones clandestinas.
Dos colaboradores eficaces de los Fiscales contra la
Corrupción del Poder han señalado que Salatiel Marrufo, Nenil Medina, Jenín
Cabrera y Alejandro Sánchez eran conocidos en Palacio de Gobierno como ‘Los
Chiclayanos’.
No porque eran nacidos en la ciudad del norte, sino porque
la mayoría se conoció en la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo y fueron
parte del Frente Amplio Estudiantil Democrático (FAED), que lideraba Salatiel
Marrufo (quien cuenta con estudio de abogados en Chiclayo).
Y todos tienen un amigo en común: el presidente Pedro
Castillo.
Paquete de proyectos
En la reunión que sostuvieron Marrufo, Medina, Sánchez y
Cabrera, se discutió el financiamiento de un paquete de obras públicas, que
luego se aprobó mediante el Decreto de Urgencia 102-2021, publicado el 29 de
octubre del 2021. Salieron los cuatro proyectos que Salatiel Marrufo recomendó
por 5 millones 338 mil 826 millones de soles.
También se dio visto bueno a los cinco proyectos que
planteó el alcalde de Anguía, Nenil Medina, por 9 millones 234 mil 081 soles.
Como informó La República, uno de estos proyectos le fue adjudicado a una
empresa de fachada de Hugo Espino Lucana, amigo y empleador de la cuñada del
presidente, Yenifer Paredes Navarro.
Fuentes relacionadas con la investigación de los Fiscales
contra la Corrupción del Poder sospechan que ‘Los Chiclayanos’ podrían haber
influido no solo en la inclusión de proyectos de su interés en el paquete
aprobado por el Decreto de Urgencia 102-2021. También podrían haber interferido
en la adjudicación de la ejecución de las obras públicas.
Esto es lo que sucedió con el alcalde Nenil Medina, quien
adjudicó dos obras públicas a sus conocidos: un proyecto de agua potable y
saneamiento por 3 millones de soles que recayó en la constructora de Hugo
Espino Lucana, y la construcción de un camino comunal por 19,5 millones (que
tuvo otro financiamiento presidencial), que entregó sin licitación al Grupo
Constructor Parasol, de Rocío Pintado Cruz.
El mismo patrón
Como se ha informado, el Equipo Especial que coordina el
coronel PNP Harvey Colchado Huamaní, cuando capturó al alcalde de Anguía, Nenil
Medina, este se desplazaba en un vehículo conducido por su amigo el empresario
Daniel Príncipe Collazos. Esta persona es amigo y vecino de la dueña del Grupo
Parasol, Rocío Pintado, a quien el alcalde Medina le concedió el proyecto de
19,5 millones de soles.
Esta repartición de obras públicas a las amistades parece
repetirse en el caso de la Municipalidad Distrital de Cumba, el pueblo de
Salatiel Marrufo.
Un proyecto de 2 millones 776 mil 699 soles le fue
entregado al consorcio compuesto por las empresas Consultores y Constructores
Ribab y Konfab. Sin embargo, Konfab nunca contrató con el Estado. Es la misma
figura que en el caso del alcalde de Anguía, Nenil Medina, que concedió una
obra de 3 millones de soles a la empresa de fachada de su amigo Hugo Espino,
Destcon Ingenieros & Arquitectos, que no tenía ninguna experiencia en obras
públicas.
Dos contratos más, uno de 1 millón 277 mil 931 soles, y
otro de 555 mil 219 soles, el municipio de Cumba los adjudicó a las empresas
Marrufo Ingeniería y Construcción y Rois Obras Civiles, ambas representadas por
Henry Marrufo Delgado. Coincidentemente, el contratista tiene el mismo apellido
de Salatiel Marrufo Alcántara, uno de los integrantes de ‘Los Chiclayanos’,
quien abogó por los proyectos del distrito de Cumba, su pueblo.
Merece especial mención que alcalde distrital de Cumba,
Elvis Ramos Guevara, visitó a su paisano, el jefe de Asesores del Ministerio de
Vivienda, Salatiel Marrufo, hasta en tres ocasiones: el 17 de febrero, el 5 de
mayo y el 14 de junio de este año. Esta información confirma la relación de
amistad entre ambos funcionarios.
La investigación todavía no ha terminado. ¿Qué proyectos
promovieron Segundo Sánchez y Jenín Cabrera? Ellos también estuvieron en la
reunión de ‘Los Chiclayanos’.
¿Qué se le encontró a Nenil?
Durante la detención del alcalde de Anguía, Nenil Medina
Guerrero, la policía intervino dos teléfonos celulares que contienen
información valiosa sobre las contrataciones bajo sospecha.
A sabiendas que estaba bajo vigilancia, Medina denunció el
supuesto robo de sus teléfonos, creyendo que así se perdería la información que
contienen ambos aparatos.
Fuentes relacionadas con el caso informaron que en los
celulares se ha encontrado material relevante sobre el caso que se investiga,
como correos electrónicos, chats por WhatsApp, fotografías, audios y
fotografías, que han permitido identificar a los personajes más cercanos al
burgomaestre del municipio de Anguía. https://larepublica.pe/
Codo del Pozuzo: la nueva área de conservación regional que
protegerá fuentes hídricas del Perú
La región Huánuco, en Perú, celebra una nueva Área de
Conservación Regional: Codo del Pozuzo, un sitio clave para la protección de
ríos y 10 453 hectáreas de ecosistemas de yungas y bosques húmedos montanos,
así como la vasta biodiversidad que en ellos habita.
Este espacio ubicado en la provincia Puerto Inca, en la
selva central del país, busca proteger las cabeceras de cuenca de los ríos
Sungaroyacu y Chorropampa, que abastecen de agua a más de 6000 personas de Codo
del Pozuzo y los nueve caseríos adyacentes: Río Blanco, 20 de enero, Delicias,
Andahuaylas, Río Codo, La Huanca, Alto Mashoca, Alto Cenepa y Alto Sungaro.
Esta es la segunda ACR creada en la región Huánuco, después
del Bosque Montano de Carpish. La iniciativa para protegerla surgió en 2007 con
la intención de crear un área municipal. Sin embargo, fue hasta 2015 que el
Gobierno Regional de Huánuco inició el proceso oficial que se concretó seis
años después, en el 2021, y se presentó en agosto de 2022 con el apoyo de
organizaciones internacionales y la población local.
“Es un área nueva que requiere bastante trabajo, pero ya se
están dando los primeros pasos para hacer efectiva y sostenible su gestión y,
en definitiva, es un área importante que va a abastecer de muchos servicios
directos e indirectos a la población”, dice Stefany Salcedo, especialista en
Áreas de Conservación y parte del programa ProPachitea del Instituto del Bien
Común (IBC), una de las organizaciones impulsoras del área.
La gran biodiversidad
La ACR está conformada por dos ecorregiones de suma
importancia ecológica para el país. La de yungas peruanas que ocupa casi por
completo el área, con un 98.8 %, y los bosques húmedos del Ucayali, con el 1.2
% restante.
Codo del Pozuzo presenta una alta diversidad florística.
Esto se debe a la variada topografía que da vida a distintos microhábitats,
donde predomina el bosque que se desarrolla en las montañas altas de la
cordillera sub andina. Sus especies arbóreas más importantes incluyen al
ishpingo (Amburana cearensis), lupuna blanca (Ceiba pentandra), cachimbo caspi
(Cariniana decandra), ojé (Ficus insípida), tulpay (Clarisia racemosa) y al
roble colorado (Nothofagus glauca).
En cuanto a la fauna más representativa, se encuentran
especies como el mono aullador (Alouatta seniculus), el mico nocturno de cabeza
negra (Aotus nigriceps) y la maquisapa (Ateles chamek); el águila arpía (Harpia
harpyja), el sajino (Pecari tajacu), el gallito de las rocas (Rupicola
peruviana), el oso de anteojos (Tremarctos ornatus) y el oso hormiguero gigante
(Myrmecophaga tridactyla); el trigrillo (Leopardus pardalis), el puma (Puma
concolor), el otorongo o jaguar (Panthera onca), el sachaperro (Speothos
venaticus) y la nutria de agua (Lontra longicaudis).
Así, dentro de las características más importantes de la
ACR, se destaca también su cercanía con las áreas prioritarias para la
conservación Monzón, Carpish y Cabeceras del Pozuzo, con lo que se contribuye a
la conformación de un corredor biológico para conectar paisajes, ecosistemas y
hábitats.
“A nivel biológico, se encuentran especies grandes como el
mono aullador, el quirquincho peludo y el venado colorado, el oso de anteojos e
incluso algunos felinos más grandes como el jaguar o el puma, que son especies
que necesitan de un rango de distribución grande en temas de hábitat, entonces,
con la creación del área se contribuye a la protección y conservación de estas
especies”, dice Salcedo.
Las amenazas
Según los estudios realizados para la creación de la ACR,
en la región existe un incremento de las actividades agrícolas, ganaderas y de
extracción forestal que están vulnerando el hábitat de 20 especies mamíferos.
El estudio de costo beneficio determina que la mayoría de
estos animales se encuentra en categoría de Preocupación Menor (55 %), seguido
por los mamíferos de la categoría Vulnerable (25 %), Casi Amenazado (10 %) y el
porcentaje restante distribuido entre En Peligro y con Datos Insuficientes,
según clasificación de la lista roja de la UICN.
“Al no implementar ninguna restricción para expandir las
áreas agrícolas, ganaderas, caza y silvicultura, se incrementarán hasta
colonizar y extraer todos los recursos del área propuesta, dejando los próximos
150 años sin especies de mamíferos y sin bosque”, apunta el documento.
Otra preocupación es la proliferación de los cultivos
ilegales de hoja de coca. “Eso sí está avanzando bastante y es ahora que
empieza el tema de gestión: ver qué alternativas se pueden considerar”, apunta
Salcedo.
La conservación como tarea de todos
Durante el proceso y en lo venidero, se ha involucrado la
participación de la población local y ahora son parte del Comité de Gestión de
la ACR, creado a inicios de agosto, donde se hizo una sumatoria de actores que
incluye la colaboración, por ejemplo, de las escuelas locales que buscan ser
parte de las actividades y de los beneficiarios que apuestan por una
conservación integral.
“Algo que el alcalde decía es que la conservación es tarea
de todos”, narra Salcedo. “Y un día antes del lanzamiento oficial, hubo una
reunión para conformar el Comité de Gestión y fue bonito escuchar que, cuando
el Gobierno Regional preguntó si había alguna institución o persona que no haya
sido nombrada y quiera ser parte, se pararon los directores de dos escuelas
rurales diciendo: ‘Nosotros también queremos ser parte’. Se sintió esta frase
que dijeron y recalcaron: ‘la conservación es tarea de todos’”.
Para el futuro de la ACR Codo del Pozuzo, IBC y Andes
Amazon Fund se comprometieron a apoyar el financiamiento del área por los
próximos tres años, incluyendo el pago del personal —entre la persona que se
encargará de la jefatura y dos guardaparques— y se espera que, para cuando
concluya este periodo de financiamiento, el Gobierno Regional haya concluido
los trámites para que se logren los presupuestos y reglamentos para su sostenimiento.
En lo inmediato, el arranque de operaciones del área está previsto que ocurra
dentro de un mes y medio, una vez que cuente con el personal asignado.
Codo del Pozuzo cuenta con diversos escenarios que pueden
ser aprovechados para las actividades turísticas de aventura: escalada en roca,
caminatas, campamentos, fotografía y avistamiento de aves. Estas actividades,
de acuerdo con los especialistas, pueden considerarse como un potencial
económico para la población cercana al área.
La importancia de la cooperación
internacional
Margarita Medina, representante de Andes Amazon Fund en
Perú, organización que ha financiado la iniciativa durante los últimos años,
explica que, precisamente, el interés también radica en que las áreas de conservación
sean vistas como potenciales para el desarrollo y no como zonas de restricción
para las comunidades.
“También se trabaja un poco con el apoyo para actividades
productivas, obviamente, porque si uno le restringe a un poblador, siempre va a
ver al área protegida como el malo y no como un foco o polo de desarrollo”,
dice Medina.
Por ello, además de donar equipamiento para las funciones
de control y vigilancia, la organización trabajará en la capacitación y
acompañamiento del personal, para incentivar las iniciativas de vigilancia
comunal, a través de comités de vigilancia, juntas vecinales o rondas
campesinas que apoyen al jefe del área y guardaparques a cuidar la ACR, así
como en la educación ambiental.
Además, Medina resalta que la nueva ACR llega para
acompañar a la Reserva Kakataibo —establecida en 2021 y con la que colinda— en
la protección del territorio destinado a los pueblos indígenas en situación de
aislamiento y contacto inicial (PIACI), para que puedan vivir sin amenazas.
“Para nosotros, lo principal es que Codo del Pozuzo sea el
baset para que haya otro estatus de protección que ayude a esta reserva y que
forme parte del corredor, para que esta población en aislamiento pueda tener un
hábitat no amenazado donde se sienta segura de los espacios de cultivos de coca
que los están amenazando, la tala ilegal y la expansión de la frontera
agrícola”, explica la especialista.
William Rodríguez, gerente regional de Recursos Naturales y
Gestión Ambiental del Gobierno Regional Huánuco, detalla que Codo del Pozuzo
tiene la particularidad de ubicarse en una altitud entre 1400 y 2900 metros
sobre el nivel del mar, donde nacen dos cuencas: Sungaroyacu y Chorropampa, lo
que la vuelve un área de mucha importancia para la conservación de las fuentes
hídricas.
“Además, para la población de Codo del Pozuzo, para los
ganaderos y quienes viven ríos abajo, es importante conservar estos bosques y
toda la biodiversidad en esta área de conservación, porque en ellos podemos
encontrar diversas especies vulnerables. Aquí están las yungas en una zona
estratégica que va proveer de servicios ecosistémicos para todo lo que
significa Codo del Pozuzo, y las provincias de Puerto Inca y Oxapampa”.
De esta forma, apunta Rodríguez, se deben revertir la
indiferencia y el desconocimiento con los que se aporta indirectamente al
cambio climático, y apostar por mirar y apoyar las soluciones.
“Tenemos esa realidad, pero contamos con la apertura para
poder recibir apoyo, que vengan los especialistas, las universidades, para
poder continuar fortaleciendo nuestro sistema regional de conservación y que
estas áreas de conservación sean modelo, que finalmente el Corredor Biológico
funcione y que podamos mostrar a nuestros hijos y nietos que nosotros hemos
contribuido con un granito de arena en este proceso”, concluye Rodríguez. https://blogs.elespectador.com/
Puno: Crucero navega lago Titicaca
para evaluar cantidad de biomasa de recursos pesqueros
Un crucero binacional
Perú-Bolivia para evaluar la biomasa del lago Titicaca ha iniciado la Autoridad
Binacional del Lago Titicaca (ALT) con la finalidad de determinar la cantidad
de biomasa de las diversas especies que conforman los recursos pesqueros y que
sirva de base para el manejo del ordenamiento de las pesquerías en ambos
países.
Este trabajo se realiza de forma
participativa con Imarpe, PEBLT, la Unidad Operativa Boliviana (UOB), el IPD
PACU, el Instituto de Ecología de la Universidad Mayor de San Andrés y con el
apoyo del IRD de Francia. Forma parte de las actividades del Eje “Medio
Ambiente y Recursos Hídricos Transfronterizos” del Plan de Acción de Cobija
2018”.
El estudio científico tiene como
objetivo estimar la biomasa y distribución de los principales recursos
pesqueros del lago Titicaca, determinar aspectos pesqueros y biológicos de las
especies ícticas capturadas con artes de pesca, así como evaluar las
condiciones fisicoquímicas de la columna de agua.
El trabajo se realizará mediante
el uso de un equipo hidroacústico para la evaluación de la biomasa, y con
sondas multiparamétricas para evaluar la calidad del agua, ello de acuerdo con
un plan de trabajo establecido, que consiste en la navegación por transectos en
todo el Titicaca.
Además, se realizará trabajos de
pesca de comprobación calando redes de cortina en zonas litorales y pelágicas.
Así mismo, se tomarán muestras discretas de agua a diferentes profundidades en
76 estaciones hidrográficas, entre otras actividades especializadas.
La información que se obtendrá
permitirá a la ALT promover el desarrollo de estrategias binacionales que
conserven los recursos pesqueros del lago, el cuidado de la calidad del agua y
el fortalecimiento de la actividad pesquera. “Generamos alternativas para
conservar, proteger y promover el uso sostenible de los recursos pesquero del
lago Titicaca en beneficio de las poblaciones peruanas y bolivianas”, acotó
Juan Ocola Salazar, presidente ejecutivo de la ALT.
El área por evaluarse será toda
la superficie del lago (parte peruana y boliviana), para lo cual, se usará la
embarcación BIC Imarpe VIII y del Proyecto Especial Binacional Lago Titicaca
(PEBLT). Se realizará además el registro de parámetros fisicoquímicos in situ,
toma de muestras de agua y de plancton. https://andina.pe/
Los 10 principales desafíos
climáticos en América Latina y el Caribe
Huracanes que llegan antes de
tiempo, lluvias por debajo o por encima de lo normal, deslizamientos que
arrastran poblaciones, sequías que condenan la cosecha del año e imponen la sed
y los apagones. América Latina y su variabilidad climática, a la que se suman
los eventos extremos cocinados bajo los efectos del calentamiento global, son
un desafío al que la región parece ir en la cola. “Se habla de un futuro de
extremos, pero ya está sucediendo”, alerta el climatólogo peruano José Antonio
Marengo, director del Centro de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales de
Brasil, autor principal del estudio Estado del Clima en América Latina y el
Caribe de la Organización Meteorológica Mundial. La OMM presentó recientemente
su segunda revisión del clima en este lado del planeta, en un esfuerzo por
brindar una mirada regionalizada de los cambios que se están experimentando en
distintas geografías. Esta bitácora meteorológica de 2021, analizada por
Marengo y otros tres especialistas, permite enlistar los diez principales
desafíos climáticos que enfrenta la región.
1. La Niña, El Niño y los
extremos
“Cada vez llueve menos en general, pero cuando
hay eventos de precipitación son extremos”, señala la meteoróloga chilena
Bárbara Tapia, también autora del estudio de la OMM. Y continúa: “Que llueva
200 milímetros en un día es algo que no aguanta cualquier ciudad”. Algo que
bien conocen ciudadanos de Santiago de Chile, Ciudad de México, Sao Paulo o
Caracas.
Durante 2021, las
precipitaciones en la región fueron inferiores a lo normal en muchas zonas de
la región, con anomalías de entre el 20% y el 60% por debajo de lo normal en
algunas regiones de Chile, y de entre el 30% y el 50% por debajo de lo normal
en el suroeste de los Andes peruanos, señala el estudio de la OMM. En el centro
de México, Costa Rica, Panamá, el oeste de Colombia, la Amazonía central, la
Guayana Francesa, Suriname y Guyana, en cambio, llovió por encima de lo normal.
Entre finales de 2021 y comienzos de 2022 también se registraron inundaciones y
deslizamientos de tierra con pérdidas de viviendas, fallecidos y desplazados en
los estados brasileños de Bahía y Minas Gerais.
Lo que los fenómenos de El Niño
y La Niña le hacen a una región, a otra le produce el efecto contrario. Hay
evidencias sobre la influencia que podría tener el cambio climático en estos
dos fenómenos de la franja tropical del Pacífico, que son los grandes
reguladores del clima en esa región, pero todavía es una discusión en marcha.
Para Rodney Martínez, representante de la OMM para Norte, Centroamérica y el
Caribe, ambos son un ejemplo de la variabilidad climática tropical que ya es
muy fuerte y dominante, un fenómeno que, a su juicio, hay mirar desde la
adaptabilidad. “La comunidad científica cada vez tiene más posibilidad de
predecir estos fenómenos de lenta evolución con tres o cuatro meses de
anticipación, lo que es una gran oportunidad para capitalizar el exceso de
agua, por ejemplo, y orientar la producción agrícola, o prepararse para una
sequía. Hay que verlos desde esa perspectiva y usar toda la información que es
muy abundante”.
2. Un año más cálido que otro
El aumento de la temperatura es
una tendencia, aun cuando en 2021 fue menor por la influencia del fenómeno La
Niña que trajo más lluvias en la región. La tasa media de aumento de la temperatura
fue de alrededor de 0,2°C por década entre 1991 y 2021, en comparación con el
0,1°C por década registrado entre 1961 y 1990, el intervalo de tiempo que
regularmente se utiliza para hacer estas comparaciones. Pero si se usa la
referencia un promedio más reciente, el registrado entre 1981 y 2010, el
incremento es mayor: 0,5°C en México, 0,35°C en Centroamérica y 0,36°C en
América del Sur, detalla el informe de la OMM.
En varios lugares de Argentina
se registraron durante 2021 condiciones de ola de calor entre seis y ocho días
seguidos. Unos 2 millones de hectáreas ardieron en la región del Pantanal de
Brasil, la segunda cifra más alta desde 2012. “El estudio no lo cuenta porque
se concentra en América Latina, pero en 2021 Canadá y Estados Unidos se
registraron temperaturas sobre los 40º grados en parques que estaban destinados
a la práctica de esquí”, apunta Martínez.
El calentamiento de las aguas
también alimentó una temporada de huracanes intensa en 2021, que tuvo el tercer
mayor número de tormentas con nombre registrado (21), incluyendo siete
huracanes.
3. La fragilidad del Caribe
El aumento de las temperaturas
en los mares y océanos es diferenciado. “En el Mar Caribe el calentamiento
sostenido está afectando ecosistemas marinos, uno de ellos son los arrecifes de
coral que son parte de un ecosistema más complejo relacionado las pesquerías,
en particular las artesanales y de supervivencia”, dice Martínez, oceanógrafo.
El Pacífico suroriental, en cambio, no responde con la misma velocidad a las
señales del cambio climático que los otros océanos, siendo esta una de las
interrogantes científicas que todavía no se cierran.
En 2021, un fenómeno tuvo un
impacto devastador para las pequeñas naciones del Caribe e implica un desafío
climático. Se trata del sargazo, un alga parda que tiene su origen en el mar de
los Sargazos del océano Atlántico y deriva a las costas comprometiendo la
actividad turística. “El sargazo es una manifestación del calentamiento de los
mares y de una alteración en la disposición de los nutrientes para esas algas
por la contaminación que favorece su crecimiento”, explica la bióloga
venezolana Bibiana Sucre, consejera de la Unión Internacional para la
Conservación de la Naturaleza.
Además de una llegada masiva de
sargazo, el Caribe sufrió eventos extremos, huracanes, la pandemia por el
covid-19 y sus coletazos. “Entre 2020 y 2023 se calculan entre 53.000 a 75.000
millones de dólares de pérdidas por todos estos factores en el Caribe”, apunta
Martínez.
4. La Amazonia y el punto de no retorno
La deforestación en la selva
amazónica brasileña se duplicó en comparación con la media de 2009-2018,
alcanzando su nivel más alto desde 2009. Se perdió una superficie de bosque de
12.000 kilómetros cuadrados, un 22% más que en 2020. Más allá de estos datos,
sobre este ecosistema pesa un análisis muy delicado que es el del punto de no
retorno. “Científicos que han trabajado con los bosques de la Amazonia, que no
es solo un reservorio de carbono y un productor de oxígeno del planeta, sino
también un regulador del agua de la región, han señalado que, si se pasa del 20
o 25% de deforestación, este ecosistema empezará un proceso de sabanización”,
señala Sucre, también directora de Provita, una organización que es parte de la
Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (Raisg).
Este año puede ser crucial para
este ecosistema. Actualmente, 40% de la Amazonia cuenta con figuras de
protección ambiental, lo que es insuficiente para evitar llegar al punto de no
retorno. Hay iniciativas para elevar ese porcentaje a 80%, sobre las que se
está presionando para lograr los compromisos políticos necesarios dentro del
nuevo Marco Global de Biodiversidad de las Naciones Unidas, en el que se está
debatiendo la protección de 30% del planeta para 2030 que para la Amazonia no
bastaría. “Hay que entender esto como un espiral: si deforestamos se generan
más gases de efecto invernadero, aumenta la temperatura, sube el nivel del mar
y se derriten los glaciales”, dice Sucre.
5. Las megasequías del sur
La sequía impacta a la región en
el estómago con la afectación de las cosechas y las limitaciones para el
transporte de los cultivos por los bajos caudales de ríos. También en el acceso
a bienes básicos como la electricidad generada a través de fuentes hídricas, uno
de los recursos más usados en la región.
La actual “megasequía” en la
región central de Chile es considerada por los expertos como la más larga —ya
cumple 13 años— y grave en mil años, refiere el informe. “Ha habido que
adaptarse a los cambios por falta de agua en la región central para la
actividad agrícola. La producción de vino ahora se hace cada vez más al sur del
país”, comenta Tapia. La desalinización del agua empieza a ser considerada en
el norte Chile para suplir el recurso en las faenas mineras. Para las
comunidades rurales de la zona central del país, la escasez y el abastecimiento
con camiones comienza a ser parte de la normalidad.
También se ha registrado la peor
sequía desde 1944 en la cuenca del Paraná-Plata, entre Brasil y Argentina, que
durante 2021 ocasionó una reducción de la producción la soja y el maíz, que
afectó a los mercados mundiales. En América del Sur en general, las condiciones
de sequía provocaron una reducción de 2,6% en la cosecha de cereales en
comparación con la temporada anterior. “El río Paraná, del que depende
Argentina para exportar el 80% de sus productos agrícolas, se vio afectado por
el bajo caudal de agua debido a la sequía”, refiere la OMM.
6. Menos agua dulce con el
deshielo
Los glaciares de los Andes
tropicales han perdido más del 30% de su superficie desde la década de 1980.
Algunos glaciares de Perú, han perdido más de la mitad. Para muchas ciudades el
retroceso de los glaciales por el deshielo representa la pérdida de una
importante fuente de agua dulce que actualmente se destina a uso doméstico,
riego y generación de energía hidroeléctrica, advierte el estudio.
7. Cuando la siembra empieza
tarde
La lluvia llegó tarde en 2021 y
la siembra se retrasó en Chile, Brasil, Uruguay y Paraguay. El informe refiere
que esta particularidad climática redujo la cosecha de cereales de 2021 en
América del Sur en 2,6% respecto al año anterior. En el Caribe, las cosechas de
arroz en algunas zonas de Cuba se vieron afectadas por el déficit de
precipitaciones. Haití, donde ya 4,5 millones de personas viven en inseguridad
alimentaria, la disminución de la lluvia en las zonas centrales afectó el
crecimiento de los cultivos. A estos se suman 7,7 millones de personas en
Guatemala, El Salvador y Nicaragua que también experimentaron altos niveles de
inseguridad alimentaria en 2021.
8. Datos compartidos
Para compilar los datos para el
informe Estado del Clima en América Latina y el Caribe, los científicos
tuvieron que hacer “arqueología” en distintas fuentes, pese a que contaron con
una importante participación de instituciones regionales, nacionales y agencias
de la ONU. “Cada vez tenemos más posibilidades de predecir nuestro clima
tropical, pero la ciencia tiene un reto que es el intercambio de datos”,
advierte Rodney Martínez. “Todavía tenemos datos en instituciones de la región
que no están disponibles para los grupos globales de investigación y los
modelos. Necesitamos un intercambio más fluido”, afirma.
9. La adaptación en medio de la
desigualdad
Más de un tercio de los
latinoamericanos son pobres, lo que equivale a unos 209 millones de personas.
Ellos también están más expuestos a los efectos del cambio climático. “Los
eventos extremos se encuentran con más pobreza en sectores informales y un alto
crecimiento demográfico. Esa vulnerabilidad combinada con un clima cambiante es
la ecuación perfecta para tener más efectos, lo que retrasa el desarrollo,
profundiza la inequidad, y hace más difícil cumplir la meta reducir la pobreza
extrema”, sostiene Martínez.
Los autores del informe
advierten que en general no ha ocurrido una adaptación climática, o más bien es
reactiva. “Si la adaptación se hubiera alcanzado, no hubiera tantos muertos
cada vez que llueve”, dice Marengo. Sucre destaca que, pese a que los efectos
del cambio climático son evidentes, es un asunto que luce aún más distante
frente a los desafíos económicos que han dejado la pandemia y conflictos
globales como la guerra en Ucrania.
El informe de la OMM también
refiere otro desafío asociado a las poblaciones. Los Andes, el noreste de Brasil
y los países del norte de América Central son las regiones más sensibles a las
migraciones y desplazamientos relacionados con el clima, un fenómeno que ha
aumentado en los últimos ocho años.
10. Del monitoreo a la alerta
“Al contrario de los países desarrollados
que están invirtiendo en sus servicios meteorológicos, en la región, en la era
del cambio climático, cuando vemos que estos eventos están impactando el
desarrollo, se está reduciendo el presupuesto de inversión y operación de
estaciones y radares para tener los datos para el monitoreo y predicción, sin
analizar el impacto que esto tendrá para la seguridad de la población”, apunta
Martínez.
De acuerdo con la evaluación
hecha por la OMM, América del Sur es la región con más deficiencias en sistemas
de alerta temprana de peligros múltiples, una herramienta esencial para una
adaptación eficaz al cambio climático.
Se pronostica si mañana va a
llover, pero en muchos países no se emiten de manera regular alertas de
desastres; es decir, cuando ese dato meteorológico se cruza con las
vulnerabilidades de cada localidad y el comportamiento de otros fenómenos.
Marengo también alude a algunas debilidades institucionales muy propias de
América Latina que son un reto por delante. “Cada vez que cambia un alcalde, cambian
a todos los funcionarios de Defensa Civil que entrenaste y tienes que volver a
empezar de cero”, dice el experto. “También tenemos políticos que no creen en
el cambio climático”. https://elpais.com/