Viernes, 4 de marzo de 2022 – Año XV – Edición 3919 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
La FENTAP informa:
PERÚ - Un éxito, Jornada Nacional de
Lucha de los trabajadores del sector saneamiento. Memorial de la FENTAP. Fotos de la movilización
PERÚ - Arequipa: Caylloma acuerda paro
indefinido desde el 11 de marzo por Majes Siguas II. La medida es porque no
obtuvieron una respuesta al oficio remitido a la gobernadora de Arequipa,
Kimmerlee Gutiérrez, donde exigen el 30% de las tierras del proyecto Majes II
PERÚ - Sequías, dengue y pérdida de
glaciares: principales impactos del calentamiento global en Perú. Nuevo informe
del IPCC da cuenta de las consecuencias irreversibles que sufriría el mundo de
sobrepasar 1.5 grados de calentamiento global. Perú será uno de los países más
afectados, por lo que debe fortalecer los mecanismos de adaptación y mitigación
impulsados por pueblos indígenas y comunidades locales
CHILE - Una laguna desaparecida y la
lucha por el derecho al agua en Chile. Una gran laguna del centro de Chile se
secó y el cambio climático parecía la principal causa, pero los investigadores
encontraron otra: la privatización sistemática del agua. ¿Podría una nueva
Constitución cambiar eso?
Un éxito, Jornada Nacional de Lucha
de los trabajadores del sector saneamiento
Memorial de la FENTAP. Fotos de la movilización
Miles de trabajadores se movilizaron en la ciudad de Lima y
en diversas ciudades del interior del país, como parte del paro nacional
convocado por nuestra Federación Nacional de
Trabajadores del Agua Potable y Alcantarillado del Perú – FENTAP.
Hombres y mujeres del sector saneamiento, protestaron contra
el proyecto de Ley N° 176/2021-CR, que promueve la privatización de los
servicios de agua potable y alcantarillado.
El proyecto, denominado “agua en bloque”, modifica el
Decreto Legislativo N° 1280, “Ley Marco de la Gestión y Prestación de los
Servicios de Saneamiento”, y pretende que el Estado compre agua y contrate el
servicio de tratamiento de aguas residuales al sector privado, extendiendo
además los plazos de vigencia de los contratos a favor de los proveedores de 20
a 25 años en tratamiento de agua dulce y salada. Asimismo, incrementa de 6 a 25
años los servicios de tratamiento de aguas residuales.
Los trabajadores consideran que el proyecto no tendría
ningún sustento técnico, ya que las normas sobre cláusulas contractuales recién
se verán en la reglamentación.
También solicitan la eliminación de todas las leyes
privatistas, la
renuncia inmediata del Ministro de Vivienda Sr Geiner Alvarado, la
reestructuración del OTASS y que pare la intervención a las Empresas de
Saneamiento – EPS.
Apoyo de organizaciones nacionales y
locales
La CGTP participó en la movilización respaldando la lucha
de los trabajadores del agua potable y alcantarillado, exhortando al congreso
rechazar el cuestionado proyecto de ley.
El Frente de Defensa de las Empresas Estratégicas y Los
Servicios Públicos se hizo presente con una numeración delegación quienes en
toda la marcha agitaron consignas contra la privatización de los servicios
públicos.
El Sindicato de trabajadores de SEDAPAL - SITRASEL, junto a
delegaciones de Piura, Lambayeque, Barranca, Pucallpa, Tacna, Iquitos, Sullana,
Ilo, Chincha, Cañete, entre otras delegaciones numerosas de Huaycán, Horacio
Zevallos, Valle Amauta, Puente Piedra, Villa María del Triunfo, Villa El
Salvador, San Bartolo y Canta Gallo, se unieron a nuestras demandas.
En el interior del país, también se realizaron importantes movilizaciones, nuestros sindicatos regionales se concentraron en Lima para alzar su voz frente a las demandas laborales.
HIDROREGIONES PERÚ
Arequipa: Caylloma acuerda paro indefinido desde el 11 de marzo por Majes Siguas II
Tras una reunión en el distrito de Chivay, representantes
de los frentes de defensa y juntas de usuarios de la provincia de Caylloma
acordaron acatar un paro indefinido desde el 11 de marzo. El presidente del
Frente de Defensa de los Intereses y Desarrollo de la Provincia de Caylloma,
Juan Galdos, sostuvo que la medida es porque no obtuvieron una respuesta al
oficio remitido a la gobernadora de Arequipa, Kimmerlee Gutiérrez, el último 28
de febrero.
En el documento exigen el 30% de las tierras del proyecto
Majes Siguas II, la reparación del canal madre desde Tuti hasta Pitay y el
reconocimiento de un canon hídrico. Galdos sostuvo que la provincia es zona de
influencia del proyecto agroindustrial y no están recibiendo ninguna
compensación. “No hemos recibido ningún tipo de respuesta del Gobierno
regional, ni tampoco hay interés de atender los reclamos. Un paro es la única
forma de hacernos escuchar”, explicó el dirigente a La República.
Resaltó que están en contra de la suscripción de la adenda
13 y que los US$ 104 millones que se invertirán “deben ser para los
cayllominos”. Hay que recordar que ese monto que incrementa el costo total del
proyecto se pagará con la venta de las 38.500 hectáreas a irrigar. Sobre las
tierras de Majes, sostuvo que ese 30% debe ofrecerse en módulos de 5 hectáreas
para que los cayllominos puedan comprarlas. De otra forma, alegó, no podrán
adquirir módulos de 200 hectáreas que superen los US$ 3 millones. “Vaya usted a
El Pedregal, hay agricultores que ya están exportando. Es posible que nosotros
podamos, pero en terrenos de 5 hectáreas”, señaló.
Sobre el canon hídrico y en vista de que se cobrará por el
agua que irrigue las Pampas de Majes, explicó que piden un pago en el marco de
ley de retribución de servicios ecosistémicos. Además, refirió que el canal
tiene rajaduras y debe repararse de manera inmediata.
Sobre estos pedidos, el gerente de la Autoridad Autónoma de
Majes (Autodema), Arturo Arroyo, señaló que evaluarán cada uno. Subrayó,
además, que el proyecto tiene el objetivo de hacer agroindustria. https://larepublica.pe/
Sequías, dengue y pérdida de glaciares: principales impactos del calentamiento global en Perú
El nuevo informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) demuestra una vez más la urgente necesidad de acciones drásticas para enfrentar la crisis climática. El documento, difundido esta semana, es la segunda parte del Sexto Informe de dicho grupo de expertos, enfocado en los impactos, la adaptación y la vulnerabilidad.
En total, son 270 autores de 67 países, más 675 autores adicionales, quienes dan cuenta de 34 000 estudios y artículos científicos. Una de las novedades de este informe es su fuerte énfasis en los aportes de las ciencias sociales, y describe en gran detalle los impactos que ya se registran, los riesgos altamente probables en el futuro, y las medidas de mitigación y adaptación necesarias.
El informe muestra que los países de Centro y Sudamérica están siendo altamente impactados por el cambio climático. Además, esta situación es amplificada “por la desigualdad, la pobreza, el crecimiento demográfico y la alta densidad de población, el cambio en el uso de la tierra, particularmente la deforestación, con la consiguiente pérdida de biodiversidad, la degradación del suelo, y la alta dependencia de las economías nacionales y locales de los recursos naturales para la producción de productos básicos”.
Las desigualdades económicas y
sociales se ven exacerbadas por el cambio climático. Un claro ejemplo de ello
es el acceso al agua potable. La capacidad de adaptación está limitada por
falta de infraestructura, financiamiento, y problemas de gobernanza.
El informe cuenta con 3 675
páginas y se destaca por un nivel de detalle nunca antes visto sobre los
impactos diferenciados en diferentes regiones y ecosistemas, en zonas rurales y
urbanas.
En general, se prevé un
empeoramiento de los efectos sobre los medios de vida rurales y la seguridad
alimentaria, en particular para los pequeños y medianos agricultores y los
pueblos indígenas de las zonas montañosas, incluida la reducción general de la
producción agrícola y la disponibilidad de agua.
En el Perú, se estima que el
incremento de eventos de lluvias extremas significa, en un escenario de 1.5
grados de calentamiento, un aumento de 400% en el número de personas afectadas.
En las zonas costeras, la
pesquería se verá afectada por cambios en la temperatura del agua y la acidificación.
Para la Amazonía, se constata que la vulnerabilidad por sequías ya ha aumentado
fuertemente y que las regiones del sur-este se han convertido en una fuente de
emisión de carbono, en vez de retenerlo, a causa de la quema y transformación
para la agricultura industrial y ganadería.
El calentamiento global ha
causado desde los años 1980 una pérdida de los glaciares en los Andes de entre
30 y 50% de su extensión. Para el fin de este siglo, se estima que en el Perú
se perderá el 50% de los glaciares remanentes, en el mejor caso, es decir en un
escenario de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. En el
escenario de emisiones altas, solamente un 3–5% de glaciares en las cumbres más
altas podrán sobrevivir.
A su vez, la mayor frecuencia de
fenómenos como El Niño y La Niña vendrá de la mano con un aumento de
enfermedades infecciosas, como el dengue, chikungunya, zika, y otras.
El informe ofrece también una evaluación detallada de los impactos, riesgos y adaptación al cambio climático en las ciudades, donde vive más de la mitad de la población mundial. Esto incluye un corto estudio de caso sobre los esfuerzos de mejorar la gobernanza del agua en Lima, después de los huaycos en 2017.
Los saberes ancestrales de los pueblos indígenas y comunidades locales pueden dar importantes aprendizajes para la mitigación y adaptación al cambio climático. Un ejemplo es la siembra de agua en diversas comunidades andinas, que permite recargar las fuentes naturales de agua y almacenarlas para una mejor gestión, incrementando la productividad de los suelos y acumulando volúmenes de agua para las épocas de poca precipitación, indica el informe.
Al respecto, el informe señala
que se ha de tener cuidado con la “maladaptación”, que sucede cuando las
medidas de adaptación no han sido planteadas con pertinencia cultural ni
territorial, y que por ende generan destrucción de la naturaleza, aumento de emisiones
de gas de efecto invernadero y vulneración de derechos. Por ello, el informe es
enfático al recomendar que los mecanismos sean construidos desde un enfoque
participativo, de equidad y de justicia, para que el conocimiento de todas las
personas involucradas sea aprovechado de la mejor manera.
No obstante, el informe constata
que si el calentamiento global supera los 1.5 grados, la capacidad de
adaptación se vería altamente afectada y en muchas regiones será insuficiente
para resistir la combinación de problemas como la falta de agua, pérdida de
cosechas, olas de calor, fuegos forestales y otros. Por ello, es de extrema
importancia que los países se comprometan a implementar políticas efectivas
frente al cambio climático, en especial aquellos del norte global, que son los
principales motores del calentamiento global. https://cooperaccion.org.pe/
HIDROMUNDO
Una laguna desaparecida y la lucha por el derecho al agua en Chile
Según una antigua leyenda, en el
fondo de la laguna de Aculeo, ubicada en el centro de Chile, se encuentra un
gran tesoro de oro inca. Durante algunas noches, según los lugareños, incluso
se podía ver el oro brillando en las cristalinas aguas de la laguna, que está
rodeada de exuberantes colinas y dominada por la cordillera de los Andes.
Pero la laguna, que en su día
fue una de las mayores masas de agua naturales de Chile, ahora está
completamente seca y sin ningún rastro de vida. Resultó que nunca hubo oro
allí, pero la laguna tenía un valor incalculable para la región.
"Durante todo el día se
podía oír el canto de los pájaros porque la flora y la fauna de la laguna eran
espectaculares. El agua era tan clara, que se podían ver los peces nadando bajo
ella”, recuerda Viola González Vera. Vive en Aculeo desde hace 30 años, a 70
kilómetros al suroeste de la capital, Santiago.
El hecho de la laguna está ahora
reseco y agrietado, como consecuencia de las frecuentes sequías. Los
embarcaderos deteriorados recuerdan a los lugareños lo que en el pasado fue
este lugar.
Chile ha sufrido una sequía
extrema durante la última década, con hasta un 30 por ciento menos de
precipitaciones en las regiones centrales. Durante años se culpó al cambio
climático de la desaparición de Aculeo.
Sin embargo, la laguna
sobrevivió durante más de 3.000 años, a pesar de la falta de lluvia. A
principios de 2022, investigadores de hidrología y gestión de recursos hídricos
confirmaron que el panorama era más complejo. El principal culpable resultó ser
la sobreexplotación humana.
Con la laguna, desaparecen
importantes medios de vida
El estudio, revisado por
expertos y publicado en la revista Sustainability en enero de 2022, afirma que,
si bien las precipitaciones por debajo de la media de la última década habían
influido, hay "pruebas indiscutibles” de que el agua desapareció como
resultado de la intervención humana. Las causas son la desviación de los ríos y
el bombeo de aguas subterráneas de los acuíferos.
Según el informe, incluso
después de cuatro sequías con precipitaciones escasas y persistentes en el
siglo XX, la laguna nunca estuvo a punto de secarse.
"Pero en la década de 1990,
la agroindustria comenzó a desviar esos ríos después de que el Estado asignara
el 100 por cien de los derechos de uso de las aguas de un río tras otro”,
explica Pablo García-Chevesich, profesor chileno de la Escuela de Minas de
Colorado y de la Universidad de Arizona, y coautor del artículo.
En 2010, el río Pintue, un
importante afluente, se desvió por completo. Las explotaciones agrícolas a gran
escala que cosechan cerezas y aguacates también establecieron profundos pozos y
bombeaban el agua directamente de la laguna.
Como resultado, "ya no
importaba cuánto lloviera. Por primera vez la laguna no pudo soportar una
sequía”, explica García-Chevesich, que también es miembro del Programa
Hidrológico Intergubernamental de la UNESCO.
Cuando la laguna se secó y
desapareció la naturaleza circundante, también lo hicieron los turistas.
Asimismo, los pequeños campesinos de los alrededores vieron cómo disminuían sus
cosechas y morían sus animales.
Con el paso de los años, algunos
miembros de la comunidad perdieron el acceso al agua potable; a medida que
nuevas casas de veraneo, con sus cuidados céspedes y piscinas, consumían
cantidades considerables de agua. Aunque esto no fue nada comparado con la
explotación provocada por los productores de aguacates y cerezas, según los
lugareños.
"He visto a gente llorando
en la calle porque no tenía agua para lavarse los dientes”, relata González Vera,
que depende de un tanque de agua que tiene en su patio trasero, a pocos metros
de donde estaba la laguna. El depósito se llena con el agua que un camión
transporta hasta el pueblo.
García-Chevesich culpa al Estado
de la pérdida de la laguna y del consiguiente impacto sobre los vecinos.
"Es la asignación incontrolada del derecho al agua sin evaluar el impacto
social o ecológico que podría tener”.
Es una historia que se repite en
todo el país.
Cuando el agua es una mercancía
y no un derecho humano
La Constitución chilena,
redactada durante la dictadura militar de Augusto Pinochet, protege la
propiedad privada del agua, convirtiéndola en un bien económico. Asimismo, el
Código de Aguas de 1981 permite al gobierno conceder derechos permanentes y
transferibles sobre las aguas a propietarios privados de forma gratuita.
Esto dio lugar a un mercado del
agua y dificultó que el Estado gobernara el suministro hídrico en Chile. En
Aculeo, por ejemplo, no se realizaron auditorías para gestionar los niveles de
consumo antes de que el Estado entregara los derechos de uso de las aguas.
"El problema del agua en
Chile es muy profundo. Se entiende como un recurso más a explotar”, afirma
Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace Chile.
Más de un millón de personas en
todo el país carecen de acceso a agua potable, mientras que algunas partes de
Chile se enfrentan a sequías más frecuentes y prolongadas debido al cambio
climático. Asimismo, el agua ha sido sobreexplotada por particulares e
industrias durante décadas. Es el caso de la minería del litio y del cobre, que
representan un sector económico relevante. Por otro lado, casi el 80 por ciento
del agua dulce se destina a la agricultura, sobre todo, al aguacate. Se
requieren 70 litros de agua para cultivar una pieza de fruta.
La situación llegó a ser tan
grave en Petorca, una ciudad de la región chilena de Valparaíso productora de
aguacates, que el gobierno declaró una "emergencia hídrica”, transportando
agua en camiones y asignando a cada residente tan solo 50 litros al día.
Pero los chilenos están
desafiando el statu quo.
Una nueva visión verde para el
futuro
Actualmente, 155 delegados
elegidos de entre la sociedad civil (la mayoría candidatos independientes y de
izquierda) están reescribiendo la Constitución chilena de la época de la
dictadura. Esta fue una de las principales demandas de las sangrientas
protestas nacionales contra la profunda desigualdad social, que tuvieron lugar
en 2019.
Es una oportunidad para que el
país cree una nueva visión de futuro, una visión en la que el medioambiente sea
la máxima prioridad. 81 de los miembros de la Convención Constitucional han
apoyado una campaña de Greenpeace para proteger el derecho del agua y los
ecosistemas en la nueva carta.
"Vamos a poner fin al acaparamiento
de agua y a restringir el apropiamiento de tierras para dejar de construir
estos paisajes de valles secos”, dice Carolina Vilches Fuenzalida, miembro de
la convención y activista medioambiental.
Vilches Fuenzalida y otros
delegados afirman que una de sus prioridades es crear un estatuto que cambie la
naturaleza jurídica del agua y garantice el derecho al agua y al saneamiento a
todos los chilenos. Las propuestas se debatirán y votarán durante los próximos
meses. Cada proyecto necesitará una mayoría de dos tercios para entrar en el
documento final, antes de ir a un referéndum público a finales de año. https://www.elmostrador.cl/
“Defender el Agua es Defender la Vida”