Miércoles, 8 de marzo de 2023 – Año XVI – Edición 4171 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
Perú ha perdido más de 3 millones de
hectáreas de bosques y la mitad de sus glaciares en 37 años
El Perú
es el segundo país en América Latina en contar con una herramienta digital
llamada Mapbiomas Perú que mide a nivel país la pérdida de cobertura vegetal y
retroceso glaciar
Los resultados del estudio advierten que al 2021 solo quedan alrededor de 108 mil hectáreas de superficie glaciar, la mitad que hace tres décadas y la nieve sigue en retroceso.
¿Cuánto bosque amazónico ha perdido
Perú? ¿Cuál es el estado de sus bosques secos o de sus glaciares? Si bien estas respuestas son
difíciles de contestar, un grupo de científicos ha monitoreado y analizado los
cambios en el territorio peruano a lo largo de los últimos 37 años. El proyecto
se llama Mapbiomas Perú y ha podido establecer, por ejemplo, que entre 1985 y
el 2021 se perdieron más 3 millones de hectáreas de bosque a nivel nacional: 2
millones 6 mil 400 hectáreas en la Amazonía y más de 1 millón en la zona andina.
A eso se suma el retroceso dramático de los glaciares y los impactos visibles
en los distintos biomas del país.
“Ha sido un trabajo de cuatro años en que se ha logrado
construir una herramienta que puede ser útil tanto para el Estado peruano como
para investigadores y ciudadanos. El código es abierto y de libre acceso. En
los próximos años la herramienta permitirá conocer de forma más precisa la
situación de otros biomas de menor tamaño como por ejemplo las lomas costeras”,
afirma Renzo Piana Arenas, director del Instituto del Bien Común (IBC),
organización que encabezó el proyecto y que contó con el apoyo de socios clave
como la Red MapBiomas Network y la Red Amazónica de Información Socioambiental
Georreferenciada (RAISG). Cabe precisar que el Perú es el segundo país que
tendrá acceso a esta herramienta, el primero fue Brasil y se proyecta continuar
con Bolivia y Ecuador.
El primer paso para los investigadores fue definir los
biomas a estudiar, entendiendo esta categoría como la agrupación de sistemas
ecológicos que comparten los mismos criterios climáticos (temperatura,
precipitación) y geográficos (topografía, altitud, entre otros). Luego
establecieron cuáles serían incluidos en esta primera colección: la Amazonía,
los Andes, el bosque seco y el desierto costero.
A partir de ello, se procesó la información y para ello se
usó la plataforma de Google Earth Engine con la que se trabajó un mapeo
completo del territorio. “Se trata de una serie de algoritmos que se trabajan
en la misma nube de Google, estos nos han permitido procesar gran cantidad de
datos y mapas desde 1985 hasta el 2021. Cada año se obtiene un resultado
distinto y con eso se puede ver no solo la cobertura vegetal sino conocer las
transiciones (cómo ha ido cambiando el territorio)”, dice Sandra Ríos,
investigadora del IBC y coordinadora de MapBiomas Perú. Ahora con la web que
se ha construido, añade la experta, se pueden ver los mapas georreferenciados y
hacer distintos cortes para analizar los territorios indígenas, áreas
protegidas y otras áreas que se consideren relevantes.
Los primeros resultados sobre la pérdida de bosques y el
retroceso glaciar son el inicio de múltiples análisis que se pueden trabajar a
partir de la herramienta online, explicó Nicole Moreno, especialista y
encargada de la investigación del Bioma andino del Proyecto Mapbiomas Perú.
Los bosques perdidos
«Lo particular de los resultados de estos mapas es que
muestra que cada bioma es particular y tiene sus características. En el caso
del desierto costero, la infraestructura es lo constituye la mayor amenaza; en
el Bosque seco ecuatorial sería agricultura y la infraestructura y, en el caso
de la Amazonía la gran amenaza es la minería. Finalmente veremos que en Andes
sería lo agropecuario lo que termina amenazando los bofedales y pastizales»,
afirma Sandra Ríos de IBC.
En el bioma Amazónico la pérdida de superficie vegetal
alcanzó la cifra de 2.2 millones de hectáreas en 37 años, según los resultados
presentados. Nicole Moreno, especialista de Mapbiomas Perú y una de las
responsables del proyecto, señala que, durante los últimos años, sobre todo en
medio de la pandemia por el COVID-19, la deforestación se disparó debido a la
tala, la minería y el crecimiento agropecuario.
En el tiempo analizado, además, hay un dato que llamó la atención
de los investigadores y es el aumento de la minería en la Amazonía. Esta creció
en más del 8 mil %, siendo Madre de Dios una de las regiones donde ha ocurrido
este incremento. En cuanto al crecimiento de la frontera agrícola, las cifras
muestran un aumento del 73,29%, lo que implica un aumento de las actividades de
cultivo en zonas donde había bosques o especies nativas.
Los hallazgos de la investigación apuntan también a una
pérdida del 4.3 % de bosques andinos en estos 37 años analizados y 6,7% de
bofedales o zonas pantanosas. “Es problemático lo que sucede en la zona andina,
porque no se recupera la superficie vegetal. No se hace necesariamente
reforestación sino forestación, es decir que se siembran árboles como
eucaliptos que no son nativos y que además pueden convertirse en especies
invasoras”, explica Moreno sobre la pérdida de vegetación en el bioma Andes,
que además no se suele recuperar, sino que se destina a otros usos como
agricultura.
«Muchos otros estudios como el nuestro, hechos por el
Estado o por sociedad civil, muestran esta tendencia a la pérdida. Lo curioso
con los resultados de Mapbiomas es que muestra que la pérdida no solo se da en
bosques sino en otros biomas como el Ande, donde tenemos matorrales o
pastizales que también se están viendo afectados, pero que no siempre son
mencionados en los estudios”, comenta Ríos del IBC.
El problema de la minería, por otro lado, no es un problema
exclusivo de la Amazonía. Moreno afirma que han rastreado su crecimiento sobre
todo en La Libertad y Puno. En esta última región destaca la ciudad de La
Rinconada, en el distrito Ananea, que se ha convertido en un serio problema
ambiental para este ecosistema andino y sus habitantes. En los 37 años
analizados por Mapbiomas Perú, la minería en la zona andina aumentó en más 3500
%.
En el caso del bioma del desierto costero, lo que preocupa a los especialistas es que la infraestructura -como viviendas, fábricas, carreteras- creció en un 133%, lo que representa una amenaza para los hábitats locales como las lomas costeras, comentó Moreno. Y, finalmente, está el bioma del bosque seco ecuatorial que ha perdido 298 mil hectáreas de zona boscosa, en parte por el crecimiento de la agricultura hasta en más del 40 %.
“Esta cobertura (bosque seco tropical) ha cambiado drásticamente
y lo que más nos preocupa es que la estamos perdiendo de forma irreversible»,
dijo Renzo Piana, director ejecutivo del IBC, en la nota de prensa que reúne
los principales hallazgos de la investigación. «Las pérdidas han sido enormes, prácticamente
irreversibles y sin perspectivas de que esta tendencia se revierta. Los datos
encienden las alarmas y dan un sentido de urgencia a la necesidad de una acción
decisiva y contundente para estas coberturas naturales del Perú”.
Los expertos también llaman la atención a mirar de cerca el
crecimiento de la infraestructura y minería, la primera pasó de 3 mil a más de
119 mil hectáreas y la segunda pasó de 99 mil a cerca de 257 mil hectáreas en
las décadas analizadas.
El drama de los glaciares
Cada vez que ocurren incendios forestales en la Amazonía,
no solo se afecta a las especies de árboles, plantas y animales que se viven en
la zona, sino que resultan dañados los glaciares porque todo está
interconectado, explica el especialista Efraín Turpo Cayo del proyecto
Mapbiomas Perú.
“Cuando ocurre alguna quema de la Amazonía, las corrientes
de aire transportan el carbono negro, este llega a los glaciares y ocurren
precipitaciones, lo que contribuye a derretir la nieve. Las ciudades también
emiten carbono negro que llega a la cordillera, todo esto absorbe más calor y
se derrite la nieve. Naturalmente, el glaciar pierde área por aumento de
temperatura que es un problema a nivel global, pero con los factores antes
mencionados, hay una aceleración mayor del derretimiento del hielo”, afirma Turpo,
quien ha venido investigando los glaciares y su comportamiento.
Según los datos obtenidos, en 37 años se ha perdido el 49,9
% de los glaciares y ha sido durante la última década que se ha acelerado el
retroceso glaciar. Con la herramienta construida por Mapbiomas Perú, se puede
ver que en el sur del país es donde el riesgo de deglaciación es más alto,
especialmente en regiones como Puno y Arequipa. Para el experto en glaciares,
de ser así la tendencia, en 30 años más sólo quedaría el 10 % de los glaciares
que tenemos actualmente. “La tendencia del retroceso de la nieve es alta y casi
no se recupera la pérdida, lo que queda es ir adaptándose a esta nueva realidad
y generar políticas públicas que nos preparen para este nuevo escenario”,
sostiene.
El problema del retroceso de los glaciares ha sido
estudiado arduamente. El investigador Efraín Turpo formó parte de una
investigación que se publicó el 2022 en la revista Remote Sens con el nombre de
“Mapping Three Decades of Changes in the Tropical Andean Glaciers Using Landsat
Data Processed in the Earth Engine” (“Mapeando tres décadas de cambios en los
glaciares de los Andes tropicales mediante datos Landsat procesados en Earth
Engine”). Allí se mostró que los riesgos están asociados a la escasez de agua y
la pérdida de calidad de la misma. Se dio cuenta de que en zonas donde
retrocede el glaciar, se queda expuesta la roca que llevaba millones de años
bajo hielo y que contiene metales, los cuales finalmente se oxidan y terminan
por acidificar el agua. Así, los ríos cercanos transportan sedimentos de
metales que hacen el agua tóxica para consumo de personas y animales, explica
Turpo a Mongabay Latam.
Otro de los riesgos asociados al deshielo son las
inundaciones, los aludes y los huaycos. Efraín Turpo explica que con el
retroceso glaciar aparecen lagunas y cuerpos de agua que muchas veces están
ubicados cerca de pueblos y ciudades, lo que significa un riesgo porque podrían
terminar sepultando con lodo y agua estos asentamientos. En 1985 la superficie
glaciar se extendía a lo largo de 216 mil hectáreas, en contraste en el 2021
que solo quedan alrededor de 108 mil hectáreas.
Toda la información que alerta sobre la pérdida glaciar
como de vegetación debería contribuir a la generación de políticas públicas
para promover la conservación de los distintos biomas, dice Renzo Piana de IBC.
“Dentro del mandato que tiene el Ministerio del Ambiente -indica Piana- está el
de frenar la deforestación, proteger hábitats críticos, monitorear los biomas.
Usando la información que hemos generado, el Estado ya tiene las herramientas
para cumplir sus compromisos ambientales”. https://es.mongabay.com/
HIDROREGIONES PERÚ
Gore Arequipa espera que Cobra retome obras de proyecto Majes II
El gerente de Autodema, Ulises Aguilar, refirió que la
concesionaria de Majes Siguas II, Cobra, ha manifestado su intención de
continuar con las obras del proyecto de irrigación. Sostuvo que la semana
pasada se reunieron con representantes de la empresa española.
Actualmente, Cobra y el Gobierno Regional de Arequipa
(concedente del proyecto), están en un trato directo para resolver
controversias, para no llegar a un arbitraje. Ambas partes aducen incumplimientos.
Según la firma extranjera, eso le causó un perjuicio de 180 millones de
dólares.
Hasta el 12 de abril, el Gobierno Regional de Arequipa
tendrá que cumplir sus compromisos en el proyecto. Aguilar remarcó que podrán
honrar lo referido a la entrega de terrenos en las zonas alta de Caylloma. Sin
embargo, no sucederá lo mismo con predios en el valle de Siguas (acceso a
bocatoma de Lluta). Ese será uno de los puntos que tendrán que negociar con
Cobra.
Aguilar considera que, sobre el último ítem, no debería
haber objeciones de parte de Cobra, pues las obras inmediatas que deben
realizarse no están en la zona del valle, sino en la parte alta.
El funcionario informó que, en la reunión de la semana
pasada con Cobra, está manifestó su intención. Empero, en los últimos días
también el gobernador regional de Arequipa Rohel Sánchez, crítico a la
concesionaria por tener un doble discurso y poca voluntad de reanudar las obras
del proyecto.
Campaña agrícola
De otro lado, Aguilar informó que las lluvias de la temporada
fueron irregulares, al punto que la represa de Condoroma (que irriga el
proyecto Majes I) solo tiene almacenada agua al 50%. El gerente de Autodema
sostuvo que dicha cantidad es insuficiente para garantizar la campaña del 2023.
Declaró que en caso no mejore el volumen hasta el final de
la temporada (que se estima en la quincena de abril), se tendrá que reprogramar
las cuotas de agua, con lo que se regarían menos áreas de terreno en Majes I.
Esto implicaría una menor producción.
El último reporte de Autodema señala que el embalse de
Condoroma tiene volumen de agua de 128 hectómetros cúbicos (hm3), de una
capacidad total de 259 hm3. https://larepublica.pe/
Desabastecimiento de agua potable se viene dando en varios sectores del distrito de Morales
Desde hace una semana
aproximadamente, varios sectores del distrito de Morales se encuentran
desabastecidos de agua potable y los vecinos afectados hasta el momento
desconocen la causa y no saben cuándo se estaría normalizando el servicio, ayer
por la mañana un camión cisterna repartió agua por el jirón Ayacucho, lo que
hace suponer a los usuarios afectados que el problema no se solucionará de
manera inmediata.
El malestar de los vecinos de
los jirones Ayacucho y San Martín es que cuando llaman a la central telefónica
de EMAPA San Martín que están en los recibos, pero nadie responde y otro
problema que señalan es que cuando reparan tuberías averiadas dejan los
materiales expuestos que van desapareciendo poco a poco y ahora esperan que se
normalice el servicio de agua potable.
“No sé qué está pasando, casi
todos mis vecinos nos percatamos en el último recibo, que la tarifa se
incrementó, pero tampoco nos dan explicaciones. Algunos trabajadores nos dicen
que en las redes sociales están los comunicados, pero no todos tenemos acceso a
ello” manifestó Ludger Dávila Ruiz, uno de los vecinos afectados.
Todos los días los vecinos que
están desabastecidos esperan en sus veredas al camión cisterna con sus envases
para abastecerse ya que las aguas del Cumbaza están contaminadas. https://diariovoces.com.pe/
LIMA PERÚ
Miembros de Comisión de Vivienda mostraron preocupación por falta de agua y saneamiento en el país
El déficit en la provisión de
agua potable y obras de saneamiento, así como la falta de títulos de predios
para obtener dichos servicios en todo el país, fueron algunas de las
preocupaciones planteadas por diversos integrantes de la Comisión de Vivienda y
Construcción, a la ministra del sector, Hania Pérez de Cuéllar Lubienska.
Fue durante la octava sesión
ordinaria de este grupo de trabajo, que dirige la congresista María Acuña
Peralta (APP) a la que fue invitada Pérez de Cuéllar, para que informe sobre la
reactivación de la construcción y de los proyectos de saneamiento de agua y
desagüe, y de los proyectos de inversión que se tienen para el presente año.
La funcionaria de Estado estuvo
acompañada por su viceministro de Construcción y Saneamiento, Hugo Ortega
Polar; el viceministro de Vivienda y Urbanismo, Hernán Navarro Franco y
miembros de su alta dirección.
La titular de la comisión, María
Acuña Peralta, sintetizó estas preocupaciones, expuestas y recibidas por todos
los congresistas durante sus visitas a las diversas regiones que representan, y
propuso a la ministra de Vivienda, trabajar de manera conjunta en el
ordenamiento del país.
Acuña Peralta saludó la decisión
de la alta funcionaria de buscar mayor presupuesto, ya que con ello pueden
beneficiarse una mayor cantidad de pobladores. Destacó el objetivo de priorizar
el trabajo técnico y el destrabe de las obras paralizadas.
Por su parte, la congresista
Francis Paredes Castro (BMCN) expuso la realidad sanitaria del departamento de
Ucayali, que representa, en donde la Empresa Municipal de Agua Potable y
Alcantarillado de Coronel Portillo -Emapacoc SA- no ha implementado medidas de
seguridad y los pobladores estarían consumiendo agua de dudosa calidad.
El parlamentario Guido Bellido Ugarte (PB) propuso “aterrizar” sobre los problemas principales que tiene el país y uno de esos problemas es el déficit de vivienda, agua y saneamiento; y la necesidad de garantizar títulos de propiedad en todas las regiones.
Las parlamentarias Nilza Chacón
Trujillo (FP) Cheryl Trigozo Reátegui (APP) Víctor Flores Ruiz (FP) Carlos Alva
Rojas (NoA) Heidy Juárez Calle (PP) Luis Cordero Jon Tay (FP) y Martha Moyano
Delgado (FP) expusieron la problemática de las regiones Áncash, San Martín, La
Libertad, Piura, Lima Provincias y Lima (Villa el Salvador) respectivamente.
La ministra de Vivienda,
Construcción y Saneamiento, confesó al auditorio que podemos estar sin
carreteras y sin internet, pero no podemos vivir sin agua, y sin una vivienda
que nos proteja de las inclemencias del frío.
Dijo que su misión es brindar
servicios a la población, sobre todo, a aquella olvidada que hoy sufre sin
tener acceso al agua potable.
La primera cifra que ofreció es
que por lo menos 3 millones 100 mil peruanos, casi el diez por ciento de la
población, no tiene ese servicio; 7.5 millones de peruanos, el 23.5%, no tiene
acceso a saneamiento.
La brecha entre el 2023 y el
2026 para asegurar el acceso de estos servicios a todos los peruanos es de 41
mil millones de soles, lo que significa una inversión promedio de 9 mil
millones por año. “Estamos lejos de ese presupuesto”, señaló.
En vivienda, la brecha es de un
millón y medio de personas, los mismos que no tienen acceso a vivienda, o
esperan que su vivienda sea mejorada.
“No todo es presupuesto, hay un
tema de voluntad política y un tema de coordinación interinstitucional, que es
necesaria para (lograr) que estos escasos recursos volverlos más eficientes”,
indicó.
Con el presupuesto actual,
diseñado por la gestión gubernamental anterior, se va a tratar de hacer lo
mejor posible para ir cerrando esas brechas, continuó.
Se plantea el trabajo con tres
valores esenciales: el rigor técnico, porque se ha constatado que muchísimas de
las obras paralizadas se deben a que los expedientes técnicos no fueron
correctamente formulados; sensibilidad social e integridad.
Para el 2023, manifestó, se han
destinado 5 945 millones de soles para inversiones de vivienda y saneamiento a
nivel nacional; 1845 millones está cargo del sector Vivienda, y existen 684
proyectos a nivel nacional.
De 231 proyectos paralizados,
expresó, se han destrabado 39 obras: 19 reiniciaron ejecución física y 20 han
avanzado en su proceso de reactivación. Entre los principales motivos por los cuales
se paralizaron está la deficiencia del expediente técnico (27%); incumplimiento
contractual (57%); deficiencia administrativa (14%); y conflictos sociales
(2%).
Sobre saneamiento, informó que
de acuerdo con el Plan 2022-2026 se requieren más de 41 mil millones de soles
para lograr el 96.8% de servicio de agua potable, y 83.2% en alcantarillado y
disposición sanitaria.
El objetivo al 2032, indicó, es el acceso universal al agua y al 2040, alcanzar el servicio universal en agua y saneamiento. Para ello se están actualizando en el presente años los Planes Regionales de Saneamiento de Huancavelica, Huánuco y Lima provincias.
En materia de vivienda la
funcionaria brindó detalles sobre los diversos programas y hacia el final de su
presentación, expuso la necesidad de reestructurar el Servicio de Agua Potable
y Alcantarillado de Lima – Sedapal y el Organismo de Formalización de la
Propiedad Informal –Cofopri. https://comunicaciones.congreso.gob.pe/
“Defender el Agua es Defender la Vida”