Lunes, 7 de febrero de 2022 – Año XV – Edición 3900 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
La FENTAP informa:
PERÚ – Puno. San Román: autoridades se olvidaron de la remediación
ambiental en el ex botadero de basura de Chilla
PERÚ - Puno: Barrio Los Andes no cuenta con agua potable a pesar de
contar con habilitación urbana
PERÚ - Chiclayo: Sunass constató deficiente servicio de agua
potable en pueblo joven 14 de enero. Los afectados exigieron a Epsel que la facturación
mensual sea conforme a las horas del servicio que reciben
MÉXICO - Multiplica proyectos hídricos sin atender a sus impactos
San Román: autoridades se olvidaron de la remediación ambiental en el ex botadero de basura de Chilla
El presidente del Frente de Defensa contra la Contaminación
del sector Chilla, en la ciudad de Juliaca, Claudio García Choqueluque, señaló
que las autoridades se olvidaron de los proyectos de remediación ambiental en
el ex-botadero de basura, a pesar que el Ministerio del Ambiente destinó un
presupuesto de más de 30 millones de soles.
El dirigente sostuvo que, en el año 2016, la municipalidad
de San Román firmó un convenio con el Ministerio del Ambiente, para el cierre y
recuperación de las áreas degradadas en el ex-botadero de basura, para este
propósito se asignó 11 millones de soles, han pasado más de cinco años y las
autoridades se olvidaron de la remediación ambiental a pesar de contar con un
presupuesto.
“Existe un proyecto que se planteó en el año 2016, donde
uno de los componentes es el cierre y la recuperación del sector, y
lamentablemente la actual gestión del alcalde David Sucacahua, no hizo nada al
respecto de la remediación, los únicos responsables son las autoridades”,
sostuvo el dirigente.
El otro problema, además de la contaminación que aqueja a los pobladores del sector de Chilla, es que algunos barrios y urbanizaciones no cuentan con los servicios básicos de agua y desagüe y continúan consumiendo el agua contaminada del subsuelo. Cabe precisar que muy cerca al ex-botadero de basura, se encuentran las lagunas de oxidación. https://www.pachamamaradio.org/
HIDROREGIONES PERÚ
Chiclayo: Sunass constató deficiente servicio de agua potable en pueblo joven 14 de enero
La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento
(Sunass) constató el deficiente estado de los servicios de agua potable y
alcantarillado en el pueblo joven 14 de enero (provincia de Chiclayo), el cual
afecta a decenas de familias que exigen una solución integral a este problema.
Un equipo de Sunass escuchó los reclamos de la población
referidos a este problema que se origina a raíz del servicio que brinda la Entidad
Prestadora de Servicios de Saneamiento (Epsel). En este contexto, los afectados
pidieron a la EPS solucione la problemática, que incluye una facturación
mensual conforme a las horas de agua que reciben.
Además, exigieron un abastecimiento alternativo ante la
falta del servicio de agua potable.
En ese sentido, dicha empresa se comprometió con emitir un
informe técnico que sustentará si la facturación corresponde al servicio que
reciben los usuarios, pues, de lo contrario, realizará los reajustes correspondientes.
Asimismo, Epsel aseguró que dotará del recurso hídrico a la población a través de camiones cisterna hasta encontrar una solución definitiva. https://larepublica.pe/
Puno: Barrio Los Andes no cuenta con agua potable a pesar de contar con habilitación urbana
La Urbanización Los Andes
Cancharani (Puno) en dónde cobran la tarifa eléctrica de tipo residencial; pero
que no cuenta con ningún tipo de servicio público de agua potable y/o desagüe,
a pesar de las gestiones que los mismos vecinos vienen realizando hace casi 30
años.
A la zona tampoco llega el
camión cisterna de agua potable, las 150 familias que habitan la urbanización,
se abastecen del líquido vital a través de pozos caseros hechos de manera
precaria, solo en las viviendas que cuentan con el espacio respectivo, y un
único pozo al que tienen acceso todos los vecinos.
Pese a cumplirse los criterios
legales de habilitación urbana para el acceso a estos servicios, existe cierta
apatía de parte de algunas instituciones tal como lo señala una de las vecinas
de esta urbanización: “La celeridad para la instalación de estos servicios,
según EMSA Puno y la Municipalidad Provincial de Puno está condicionada a la
disponibilidad de terrenos para la instalación de las tuberías de agua y
desagüe en la zona, esa disponibilidad es la que la mayoría de vecinos
tenemos”, afirma la abogada Angela Quispe quien es hija de uno de los
residentes del barrio.
“El agua es un derecho con el
que contamos todos los peruanos, el agua que actualmente consumimos en el
barrio no tiene ningún tipo de tratamiento, por lo que no sabemos cuándo y
cuánto puede afectarnos a la salud. Además, cada año vienen a vivir al barrio
entre 2 a 5 familias y eso incrementa la necesidad que tenemos” acota
finalmente Quispe.
Contemplado en proyecto que no
inicia
Por otra parte, según el listado
de habilitaciones área de influencia Puno del expediente técnico del proyecto
“Ampliación y Mejoramiento de los Servicios de Agua Potable y Recolección de
Aguas Residuales de la Ciudad de Puno, Distrito de Puno, Provincia de Puno,
Región Puno”, esta urbanización cuenta con el Plano de Planeamiento Integral y
con Resolución de Gerencia 33- 2018 – MPP-GDU. https://www.losandes.com.pe/
HIDROMUNDO
México multiplica proyectos hídricos sin atender a sus impactos
El gobierno mexicano privilegia
la construcción y modernización de megaproyectos hídricos, sin considerar
impactos y su viabilidad a largo plazo, según coinciden diferentes expertos y
activistas.
Embalses, canales y plantas
integran el menú de esa infraestructura gris que busca garantizar el
abastecimiento del líquido en zonas que enfrentan escasez, pero sin abordar el
trasfondo de problemas como desperdicio, fugas, contaminación y el impacto de
la crisis climática, como sequías.
Uno de los proyectos
emblemáticos es Agua Saludable para la Laguna (ASL), destinado a atender a
cinco municipios del norteño estado de Coahuila y cuatro de la vecina región de
Durango, lo que beneficiará a 1,6 millones de personas.
Para Gerardo Jiménez, integrante
del no gubernamental Encuentro Ciudadano Lagunero –una confluencia de 12
organizaciones–, la iniciativa, lanzada en 2020, desatiende las causas
estructurales de la crisis hídrica, la polución del agua y la sobreexplotación
de las fuentes.
“Se enfoca en los efectos, el
desabastecimiento y la contaminación. Está diseñado para un periodo de 25 años
y basado en una fuente vulnerable. Hay extracción y tráfico ilegal de agua. No
provee alternativas de solución”, señaló a IPS desde la ciudad de Torreón.
En la zona, ocho acuíferos
proveen del recurso hídrico y de ellos, cinco presentan sobreexplotación. El
Principal-Región Lagunera es el más importante, al abastecer a cuatro ciudades.
Ese depósito se vuelve
cíclicamente deficitario, pues su extracción anual rebasa a la recarga. Además,
el fluido rebosa de arsénico, por encima de los límites establecidos por la
regulación mexicana y el estándar de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
ASL incluye la construcción de
una planta potabilizadora, con capacidad de 6,34 metros cúbicos (m3) por
segundo; un canal de desvío y un acueducto para transportar 200 millones de m3
anuales provenientes del río Nazas.
Con un costo de 485 millones de
dólares, la obra es parte de un tejido de nuevas infraestructuras hídricas
promovidas por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el órgano rector del
sector en México, y que parte de ellas son objetadas por organizaciones
sociales y comunidades, en algunos casos por la vía judicial.
El proyecto consta también de
una presa derivadora del flujo fluvial, una planta de bombeo, tanques de
almacenamiento y ramales de distribución.
El proyecto entrará en
operaciones en 2023, aprovechará también los escurrimientos de los embalses
Francisco Zarco, conocido popularmente como Las Tórtolas, y Lázaro Cárdenas,
conocido como El Palmito.
Esos embalses podrían aminorar
su dotación de agua, debido a la sequía que ha afectado la zona en los últimos
años. La falta de lluvia azota a la mitad de Coahuila, situación que podría
agravarse en los próximos meses, con el arribo de la temporada seca.
Ambas presas prácticamente
rebalsan de agua en la actualidad, pero ese nivel podría cambiar conforme se
ausente la precipitación.
Para 2022, el presupuesto de la
gubernamental Conagua se ha recuperado en comparación con años previos, al
pasar de 1400 millones de dólares en 2017 a 1600 millones, concentrados
primordialmente en obras para evitar inundaciones, por sus altos efectos
humanos y económicos.
México, un país de unos 128
millones de personas, es altamente vulnerable a los efectos de la emergencia
climática, como sequías, tormentas intensas, inundaciones, aumento de la
temperatura y subida del nivel del mar. Mientras el sur y el sureste tienen
agua en exceso, los habitantes del centro al norte se enfrentan a su
insuficiencia.
Esta nación latinoamericana
exhibe un riesgo de estrés hídrico alto, de acuerdo al ranking de la plataforma
Aqueduct, elaborado por la Alianza Aqueduct, formada por gobiernos, empresas y
fundaciones. De hecho, México es el segundo país de América en estrés hídrico,
tan solo por detrás de Chile.
Enfoque convencional
Otra obra central es la Presa
Libertad, cuya edificación arrancó en 2020 y concluiría en 2023. Financiada con
132 millones de dólares y orientada a aprovechar los escurrimientos del río
Potosí, el embalse aportará 1,5 m3/s para cubrir la demanda en 24 de los 51
municipios del nororiental estado de Nuevo León y en beneficio de 4,8 millones
de personas.
Para Aldo Ramírez, investigador
del privado Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, la
gran infraestructura y las obras amigables con el ambiente deben convivir, pues
tienen aportes diferentes, con una visión de desarrollo urbano con enfoques
hidrológicos.
“Ambos enfoques tienen sus
ventajas en ciertos nichos. Cuando pensamos en manejo del agua en ciudades,
hace muchos años el enfoque era desalojar el agua lo más rápido posible para
que no cause problemas. La infraestructura verde puede ayudar mucho, tiene un
gran valor ambiental, en manejo de agua, recarga de acuíferos”, explicó para
IPS desde Monterrey, capital del estado.
Como otras zonas del país,
Monterrey y su área metropolitana, integrada por 13 municipios y habitada por
más de cinco millones de personas, depende de la provisión de las presas El
Cuchillo, Rodrigo Gómez o La Boca y Cerro Prieto. La primera guarda la mitad de
capacidad, mientras las dos restantes apenas almacenan líquido, según datos de
Conagua.
Mediante un decreto presidencial
publicado en noviembre, el mandatario Andrés Manuel López Obrador clasificó de
interés público y de seguridad nacional los proyectos que considere
prioritarios y/o estratégicos para el desarrollo nacional.
Entre ellos están aquellos
hidráulicos e hídricos, por lo cual recibirán permisos provisionales exprés, en
una medida cuestionada por organizaciones ambientalistas por la violación a
procesos de evaluación de impacto.
ASL, por ejemplo, aún enfrenta
un recurso de amparo interpuesto por Encuentro Ciudadano Lagunero, mientras que
otros cinco fueron retirados luego de acordar con el gobierno la revisión del
proyecto. Pero si ese arreglo no se respeta, persiste la amenaza de la vía
legal.
Más y más agua
El noroeste mexicano enfrenta
una situación similar a las otras regiones en crisis y ahí el gobierno
construye dos embalses y un canal, y moderniza un acueducto.
En el estado de Sinaloa, avanza
la construcción de la presa Santa María, sobre el río Baluarte y que también
debe estar terminado en 2023, destinado a regar 24 250 hectáreas en dos
municipios. Además, generará 30 megavatios (Mw), con una inversión por casi
1000 millones de dólares.
Además, moderniza la presa
Picachos, donde también se pondrán turbinas para generar 15 Mw e irrigar 22 500
hectáreas. Con capacidad de almacenamiento de 580 millones de m3, alberga 322
millones y cuesta unos 136 millones de dólares.
Hacia el sur, en el estado de
Nayarit, se edifica el Canal Centenario, de 58 kilómetros de longitud y
capacidad de 60 m3/s para el riego de 43 105 hectáreas en cuatro municipios.
Con una inversión de unos 437 millones de dólares, beneficiará a unos 7500
productores agrícolas, con agua de los embalses El Jileño y Aguamilpa, surtida
por el río Santiago.
Además, el gobierno acordó con
los opositores a la presa El Zapotillo, en el occidental estado de Jalisco,
dejar la cortina en 80 metros de altura y operar a 50% de capacidad, para no
inundar tres poblados, de modo que la obra, de unos 340 millones de dólares y
capacidad de 411 millones de m3, pueda entrar en funcionamiento.
Pero la construcción de los
nuevos embalses tiene connotaciones ecológicas, como la alteración del paisaje,
la generación de metano y el desplazamiento de personas, como lo evidencian
varios estudios científicos recientes.
En la norteña ciudad de Tijuana,
fronteriza con Estados Unidos, el gobierno moderniza el acueducto Río
Colorado-Tijuana, que traslada el recurso del río homónimo, compartido por
ambos países, para satisfacer la demanda urbana y agrícola de la zona, a un
costo de unos 47 millones de dólares.
Jiménez, del Encuentro Ciudadano
Lagunero, propone la regulación de la extracción de la presa Lázaro Cárdenas
sobre el río Nazas, así como de los pozos, un sistema de medición de extracción
más preciso, el combate al tráfico ilegal de concesiones y el mantenimiento de
la red de distribución urbana.
“Se tiene que tomar una medida
urgente, para que en el mediano plazo las extracciones equivalgan al nivel
concesionado y a largo plazo la extracción iguale a la recarga. Hablamos de
modificar las condiciones de producción agrícola y ser más eficientes en el uso
del agua”, planteó.
A su juicio, “esta situación nos
anticipa crisis recurrentes. Si no se atiende, se va a agravar, y no es
necesario llegar a esa crisis”.
Pero, en medio del escenario
complejo, alertó de la falta de decisión política para cambiar la política
hídrica del país. “Acá no se cumple el derecho humano al agua”, sentenció.
El investigador Ramírez resaltó
medidas en marcha, como la gestión de la presión, para reducir fugas; la revisión
de pozos asignados a la industria, la reutilización de aguas residuales
tratadas y la gestión de la demanda.
“Se tiene que hacer un uso más eficiente del agua. Tenemos todavía un margen de consumo, pero necesitamos pensar en soluciones más amables con el ambiente. Transitamos hacia una crisis hídrica”, sostuvo. https://ipsnoticias.net/
“Defender el Agua es Defender la Vida”