Lunes, 28 de marzo de 2022 – Año XV – Edición 3935 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
Obras de colectores de aguas residuales
del lago Titicaca tienen retraso de 71%
En riesgo la culminación de los trabajos en los plazos establecidos en Contrato de Concesión. Resultados de informe de control concurrente de Contraloría a concesión valorizada en S/ 863 millones
La Contraloría General de la República alertó al Ministerio
de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) que el concesionario del Sistema
de Tratamiento de las Aguas Residuales de la Cuenca del Lago Titicaca (PTAR
Titicaca), ubicada en la región Puno y cuya inversión referencial es de S/ 863
millones, presenta constantes retrasos en la ejecución de las obras del
Componente 1, donde se ha evidenciado un avance acumulado de 17.77%, cuando lo
programado para alcanzar en enero de 2022 era de 88.91%, lo cual representa un
retraso del 71.14%.
La concesión de la PTAR Titicaca comprende el diseño,
financiamiento, construcción, ampliación, rehabilitación y operación y
mantenimiento de los colectores principales, estaciones de bombeo, líneas de
impulsión, tratamiento y disposición final de las aguas residuales en las
localidades de Juliaca, Puno, Ilave, Juli, Ayaviri y Moho. Asimismo, comprende
la operación y mantenimiento de colectores principales, estaciones de bombeo,
líneas de impulsión, tratamiento y disposición final de las aguas residuales en
las localidades de Yunguyo, Lampa, Azángaro y Huancané.
La concesión tiene previsto beneficiar a más de un millón
de peruanos de las localidades vinculadas al proyecto, ya que contribuirá a la
reducción de las enfermedades causadas por aguas residuales, así como favorecer
a la reducción de la contaminación del Lago Titicaca, lo que redundará en
promover el aumento de las actividades económicas como el turismo. El proyecto
consiste en tres componentes.
El Componente 1 comprende las obras asociadas a los
colectores principales a gravedad en las localidades de Juliaca, Puno, Ilave,
Ayaviri, Juli y Moho, las cuales serán ejecutadas por el concesionario de
acuerdo con su propuesta técnica, siguiendo las especificaciones incluidas en el
Expediente Técnico 1, incluyendo la infraestructura existente asociada a dichas
localidades.
Mientras que el Componente 2 consiste en obras asociadas
estaciones de bombeo, líneas de impulsión, tratamiento y disposición final de
aguas residuales en las seis localidades antes mencionadas y cuyas
especificaciones están en el Expediente Técnico 2, e incluye las obras de
rehabilitación urbana que correspondan en los bienes de la concesión, así como
el cierre de la infraestructura existente en caso esta queda fuera de servicio.
El Componente 3 comprende la infraestructura existente
asociada a los colectores principales por gravedad, las estaciones de bombeo,
líneas de impulsión, tratamiento y disposición final de las aguas residuales en
las localidades de Yunguyo, Lampa, Azángaro y Huancané, que el concedente
entregará al concesionario cumpliendo los niveles de servicio para su operación
y mantenimiento.
Según el Informe de Control Concurrente N°
254-2022-CG/APP-SCC, emitido el 14 de marzo de 2022 y cuyo período de
evaluación va del 27 de enero al 11 de marzo de 2022, la ejecución de las obras
del Componente 1 se inicia con la suscripción del “Acta de Inicio de la
Construcción del 19 de abril de 2021”, y de acuerdo con el Cronograma de
Ejecución de Obras del Expediente Técnico 1 presentado por el Concesionario, y
aprobado por el MVCS, se estableció un plazo de 11 meses para su culminación.
Posterior a ello, debido de una suspensión de obligaciones
solicitada por el concesionario por la ocurrencia de eventos producidos por la
pandemia de la COVID-19, el MVCS suspendió por 14 días el plazo establecido,
con lo cual, el plazo final para la culminación de las obras del Componente 1
vence el 1 de abril de 2022.
Cabe mencionar que el plazo máximo contractual es de 17
meses, cuya demora está sujeta a penalidades por atraso en la culminación de
las obras del Componente 1.
Del análisis realizado por la comisión de control, se
advierte que las obras para las localidades de Juli, Ayaviri y Moho, presentan
un avance de 16.08%, 33.34% y 14.69%, respectivamente, aun cuando su plazo de
ejecución establecido en el Cronograma de Ejecución de Obras del Expediente
Técnico 1, se encuentra vencido.
Mientras que los trabajos en las otras tres localidades:
Ilave, Juliaca y Puno, presentan un avance de 33.48%, 19.67% y 31.39%,
respectivamente aun cuando sus plazos de ejecución se encuentran próximos a
vencer (el 1 de abril de 2022), lo cual evidencia retrasos del concesionario en
la ejecución de obras de todas las localidades, generando el incumplimiento de
los plazos establecidos en el cronograma de ejecución de obras.
Asimismo, el concesionario argumenta que los retrasos se
deben, entre otros, al desabastecimiento de materiales y equipos de campo, a la
aparición de controversias, contrariedades y dudas técnicas durante la
ejecución, situación que no garantiza la culminación de las obras en los plazos
previstos en el Expediente Técnico 1.
En resumen, los plazos de ejecución de obras del Componente
1 es de 11 meses y 14 días, el cual vence el 1 de abril de 2022, sin embargo,
habiendo transcurrido 10 meses del inicio de ejecución de obras (19 de abril de
2021) y teniendo en cuenta el avance de las mismas, se advierte que el
concesionario no logrará culminar las obras del Componente 1 en el plazo antes
señalado.
Verificación in situ
Con la finalidad de verificar el estado de la ejecución de
las obras del Componente 1, la comisión de control realizó una visita de
inspección, de manera selectiva, a las localidades de Juli, Ilave, Ayaviri, Juliaca
y Puno, junto a representantes del MVCS, del supervisor especializado y del
concesionario.
En la localidad de Juli, en los tramos supervisados se
apreciaron zanjas pendientes de rellenar que, según el Concesionario, se debe a
la falta de material de relleno para culminar dichas partidas. En la localidad
de Ilave, se apreciaron hechos como el desprendimiento del talud y la falta de
entibados en zanjas, reflejando un avance de 33.48% pese a que debe culminarse
el 1 de abril de 2022.
Por su parte, en la inspección realizada en Ayaviri se pudo
verificar que el buzón BP-12, cuya ejecución comenzó en noviembre de 2021, aún
se encuentra en ejecución pese a que su plazo venció el 29 de enero de 2022.
Mientras que los buzones BP-22 y BP-23, así como el tramo entre los buzones
BP-37 y BP-38, se encuentran saturados de agua y en proceso de construcción,
pese a que su plazo venció el 29 de enero de 2022.
En el tramo entre los buzones BP-5 al BP-6 no se evidenció
personal del concesionario laborando en la zona de obras, pese a que aún falta
culminar trabajos de relleno y que dichas actividades debieron estar culminadas
el 29 de enero de 2022, y su avance es solo de 33.34%.
Por su parte, en la localidad de Juliaca, se advirtieron
zanjas excavadas y actividades de relleno pendiente de concluir en los tramos
supervisados, a lo que se suma que durante la visita de inspección no se
apreció personal del concesionario laborando, pese a que su plazo vence el 1 de
abril de 2022 y presenta un avance de 19.67%.
En el caso de la localidad de Puno, el Buzón BP-102 aún no
se encuentra ejecutado pese a que los trabajos iniciaron en diciembre de 2021,
a lo que se añade que está pendiente la reposición de pavimentos, pese a que su
plazo vence el 1 de abril de 2022 y su avance acumulado es solo del 31.39%.
En ese sentido, el informe de control alerta que esta
situación demandaría una extensión en el plazo para culminar con el Componente
1, lo que impactará en la postergación del inicio de la operación del proyecto
PTAR Titicaca, en desmedro del público usuario del servicio. Además, la
comisión de control tomó conocimiento de quejas y reclamos de los pobladores de
Juli, Juliaca y Puno, debido a los cierres prolongados de las calles, lo que
afecta el libre acceso a sus viviendas y comercios.
Recomendaciones
El informe recomienda hacer de conocimiento a la Dirección
General de Programas y Proyectos en Construcción y Saneamiento del MVCS, los
hallazgos obtenidos, con la finalidad de que se adopten las acciones de
supervisión correctivas, con el objetivo de asegurar la culminación de las
obras del Componente 1, establecidas en el Contrato de Concesión del Proyecto
PTAR Titicaca.
La entidad deberá comunicar al Órgano de Control Institucional (OCI) del MVCS, a través del plan de acción, las acciones correctivas que se implementen para subsanar los hechos detectados. https://caretas.pe/
HIDROREGIONES PERÚ
Reflexiones sobre el peor desastre de la historia de Piura ocurrido en el 2017
El 27 de marzo del 2017 se produjo una de las tragedias más
sentidas de la región Piura. El río se desbordó en su cauce, inundando a
mansalva a las poblaciones ribereñas y no ribereñas de Piura, Castilla,
Catacaos, Cura Mori, El Tallán, La Arena, La Unión y otros centros poblados
destruyendo no solo la infraestructura pública, sino igualmente la privada. El
Regional fue testigo de ese hecho y parte de ese recuerdo estará presente en el
presente informe.
Primero, diremos que lo sucedido fue culpa no solo de la
naturaleza, sino de sus autoridades. Dos años antes, el gobierno central y en
parte el Gobierno Regional gastaron cerca de 600 millones para la
descolmatación del río Piura ante un eventual fenómeno El Nino. El dinero se
gastó, pero lo realizado fue ejecutado por empresas y avalados por funcionarios
totalmente ignaros.
Nadie ha dado cuenta de esas responsabilidades y es lógico
deducir que no pasará nada, porque en el caso de Piura, lo que mal se invierte,
cada cierto tiempo se lo lleva el río y el desastre que ocasiona será culpa de
la creciente. Pero no es así, algunas voces tímidas pidieron que se investigue
que se hizo con esos 600 millones y solo quedó como respuesta que fue manejado
en su mayor parte por el PSI y un 10% por el Gobierno Regional de Piura.
Piura es una región cuyas poblaciones han utilizado la
horizontalidad de su territorio para construir sus centros poblacionales; no
les ha interesado hacerlo a la vera del río, en una hondonada o en el cauce de
una quebrada seca. Tampoco les ha interesado respetar los mapas de riesgos que,
con coloridas hojas, se publican y se dispensan en los anaqueles de algunas
entidades públicas. Piura, como el resto del país, tiene ciudades desordenadas,
caóticas, expuestas y sin ningún tipo de planificación efectiva.
Sus vulnerabilidades fueron puestas en evidencia en los
Fenómenos El Niño de 1925, 1972, 1982-83; 1997-98 y el último en el 2017. Quizá
el último se recuerde más, por lo reciente del evento, pero más que eso, por el
nivel de destrucción. Nunca antes, con crecientes mayores había sucedido algo
tal desastroso. Aunque las modelaciones han demostrado que el caudal de 1997
fue menor, lo cierto que en aquella oportunidad se llevó varios puentes del río
Piura, pero las poblaciones fueron afectadas no por el desborde, sino por las
lluvias focalizadas.
Y en realidad, muchos insisten en encontrarle una solución
a la cuenca del río Piura; sin embargo, los desastres podrían ser tan igual de
lamentables si llueve de manera focalizada solo en el perímetro de las ciudades
de Piura, Sullana, Talara, Paita y otras. Este tipo de hechos se presentó en
1982-83; sin embargo, excepto algunas pequeñas obras de evacuación, el problema
sigue latente y se observó en el 2017. Los casos el Chilcal y urbanización
Ignacio Merino, son dos muestras de poblaciones expuestas.
El aciago 2017
El aciago 2017 estuvo lleno de sorpresas, un gobernador que
quería hacer en pocas semanas, lo que no entendió en sus años de gobierno,
intentaba acelerar obras ribereñas sobre todo en los diques. Evidentemente, no
tenía la información técnica que le pueda proveer la magnitud de la masa de
agua y tampoco la velocidad de evacuación. De aquel día, se recuerda que se
informó que la masa de agua pasaría por Piura a las 6 de la tarde del 26 de
marzo, pero no sucedió.
La devastadora masa de agua en su máxima expresión se
sintió entre “Rompan el dique” y fotografías de un gobernador ignaro, posado en
el puente Andrés Avelino Cáceres, a eso de las 12 horas, pero a las 6 de la
mañana ya el caudal se desbordó por las zonas más bajas y entró a la ciudad de
Piura, Castilla y demás mencionadas. Todo lo realizado como obra pública no
sirvió de nada, porque la previsión y prevención se trabaja en el día a día y
no ante la noticia de un evento natural.
En aquel día, recorrimos lo que pudimos en la ciudad.
Observamos la magnitud de agua extendida por calles adyacentes y vimos sucumbir
en su corriente muchos edificios públicos y viviendas familiares. En el trecho
de construcciones ribereñas, muchas viviendas fueron inundadas, porque al
construirlas, creyeron que el río era un remanso y que nunca bajaría con furia,
aunque la mayor parte conocían de los eventos naturales anteriores.
“Yo lo dije” manifestaba ufano un especialista en gestión
de riesgo y cuya vivienda quedó totalmente inundada, porque se aposentó en la
zona Los Cocos de Piura. Lo cierto que nunca dijo nada, solo que, para no
quedar mal, muchos intentan saber después lo que deberían haberlo previsto
antes. Pero quien, si dijo que Piura se inundaría, pero horas antes, fue una
ingeniera que luego se silenció y nunca más volvió a opinar. Lo cierto, que el
contenido de su WhatsApp fue duramente cuestionado horas antes.
“Estoy saliendo con mis padres en busca de un lugar seguro,
mi casa se ha inundado” nos relató una vecina del distrito de Castilla. Cuando
tomamos conocimiento de su versión, jamás imaginamos el daño habido. En calles
como la Ayacucho, Tacna y otras contiguas, las viviendas fueron sepultadas como
gran parte del distrito de Castilla, en una situación jamás antes vista.
Por el otro lado, el río copó la Plaza de Armas y llegó
hasta la calle Loreto, en tanto pequeñas ramificaciones del río avanzaban por
la calle Los Cocos.
Cuando visitamos la zona de Catacaos y sobre Pedregal los
rostros sentidos de la población, era más que elocuentes. Varias familias
habían salido del lugar, pero otras salvaron de milagro, quedándose en el mismo
lugar. Todos sus animales, que constituían sus medios de vida, fueron llevados
por el desborde del dique de Simbilá y por el que soportaron del puente
Independencia.
La Autoridad para la Reconstrucción con
Cambios
El desastre ocurrido en Piura y otras regiones, pudo ser
resuelto de una manera diferente y con mayor liderazgo; sin embargo, el
gobierno central a cargo de Pedro Pablo Kuczynski planteó la creación de un
ente que se le denominó Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, encargada
de la implementación y ejecución de un plan integral para la rehabilitación,
reposición, reconstrucción y construcción de la infraestructura de uso público
de calidad incluyendo salud, educación, programas de vivienda de interés social
y reactivación económica de los sectores productivos, con enfoque de gestión
del riesgo de desastres.
Lo cierto, que como sucede en otras partes del mundo como Perú,
cada desastre es una apuesta a lo novedoso y una sepultura a lo existente. Para
la creación de esta Autoridad, no se contempló en absoluto, primero el sistema
Nacional de Gestión de Riesgos de Desastres que hubiera sido el competente y
también se obvió a los gobiernos regionales y locales, los cuales fueron
comparsa del Ejecutivo.
En el caso de Piura, el gobernador de aquel entonces nunca
entendió la magnitud del problema y los alcaldes, entendieron que, sin
liderazgo absoluto en lo regional, preferían aliarse al entre centralizado para
conseguir obras para sus jurisdicciones. Cuán importante es un liderazgo
efectivo, como lo asumió en su momento don Oscar Cantuarias Pastor. En el 2017
Piura y otras regiones no tuvieron voz para reclamar lo que por competencia les
correspondía.
La situación se agravó tras la designación del director
ejecutivo. Se designó a una persona con escaso conocimiento de la realidad y
con los atributos para enfrentar un desastre. Pablo de La Flor, tras sus
desatinadas medidas, no pudo interpretar los intereses de las regiones
afectadas por el desastre y confrontó innecesariamente con alcaldes
provinciales y distritales e incluso con algunos gobernadores.
Fue reemplazado por el Ing. Edgar Quispe quien resolvió
parte de los problemas dejados por Pablo de la Flor, y se socializó más las
acciones previstas en un Plan de Reconstrucción. Se podría decir, que se
encaminó el accionar de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios y se
inició de manera efectiva la reconstrucción de lo destruido. Sin embargo, el
criterio de Reconstrucción con Cambios” solo es una frase que adorna el nombre,
pero no una realidad.
Bastaría mencionar que en el caso de las avenidas Progreso
y la Andrés Avelino Cáceres, se han reconstruido y como dice un estudio del
Programa de las Naciones Unidades para el Desarrollo, se “repuso la vía al
estado anterior de la destrucción”. Quiere decir, que, en caso de nueva lluvia,
igual serán destruidas, porque no se ha resuelto en absoluto el problema que
genera su pérdida.
De acuerdo a información que recibió este Diario, el Plan
de Reconstrucción fue elaborado en un escritorio y sin nula participación de
las autoridades locales y regionales. Pese a ello, algo de importante se
integró y durante estos 5 años se han ejecutado para bien de las poblaciones
afectadas.
Actualmente, la directora ejecutiva es la Dra. Amalia
Moreno Vizcardo, quien ha mejorado el accionar de esta autoridad, coordinando
más con la sociedad civil como sucede con los estudios que se vienen realizando
para la gestión de la cuenca del río Piura. La mejor manera de resolver los
problemas de un territorio, comprende incorporar en todo el proceso los saberes
locales.
Lo cierto que, para desastres, el Estado no tiene una
estrategia definida y la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios podría
ser importante como modelo. Este deberá definirse tan pronto culmine su mandato
previsto para el mes de diciembre del presente año. En precisiones de
representantes de Corea del Sur, precisaron que una manera de resolver un
desastre con grandes impactos, es asumirlo desde el nivel central. Es una
alternativa que podría tomarse en cuenta.
Sin embargo, queda latente el funcionamiento del Estado. No
se puede gastar todos los años ingentes recursos públicos, que luego se desperdician,
no se puede obviar a gobiernos regionales y locales, para la solución de estos
problemas, cuando por Constitución Política del Perú tienen competencia en su
territorio. Son algunos aspectos que deberán plantearse para el futuro, cuyos
desastres casi están asegurados en el norte peruano, porque lo avanzado es nada
en relación a las reales necesidades.
Liderazgo regional y capacidad para
decidir
Consultado el especialista en Gestión Pública, Econ. Juan
Manuel Aguilar Hidalgo sobre la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios
nos precisó "A cinco años de la salida del Río Piura, dando una mirada a
los avances de la ARCC diremos, que por demás el saldo de su intervención es
insuficiente. Empezaremos diciendo que con la creación de esta autoridad se
“vendió” la idea que la reconstrucción de la infraestructura se haría “con
cambios” es decir con la incorporación de criterios y tecnología que mitigarían
los riesgos. ¿Esto ha sucedido? La respuesta es un rotundo No. Se he
reconstruido, sí, pero se han hecho restableciendo la infraestructura y sus
mismas vulnerabilidades. Otro punto a señalar es la falta de una visión de
mediano y largo plazo, se anuncia en la página web de la ARCC (yo diría q hasta
de manera rimbombante) que el Plan Integral considera más de 11 mil
intervenciones, pero si eso lo comparamos con el presupuesto inicial de 18 mil
millones, el promedio de intenciones es de 1.5 millones, es decir obras en su
mayoría pequeñas. Claro está que algunas intervenciones a nivel de estudios son
importantes".
Agregó que "Regresando al punto, la ARCC siendo una
unidad ejecutora de la PCM termina siendo una especie de autoridad local
(regional y municipal) con “superpoderes” tanto de ejecución de cómo se
recursos, para finalmente asumir competencias de los gobiernos regionales y
locales. ¿Era necesaria una autoridad de esta naturaleza? Yo creo que no, soy
un convencido que nunca autoridad designada a dedo puede tener mayor
competencia que las elegidas mediante voto popular. Estoy convencido que
necesitamos replantear y potenciar el proceso de descentralización,
desarrollando capacidades a los gobiernos regionales y locales, pero sobre todo
dándoles facultades para tomar decisiones en sus territorios si estar
pidiéndole permiso al MÉF. Los primeros meses del 2021 la ARCC anunciaba
intervenciones por 8 mil millones, para finalmente terminar con un PIM de cerca
de 4 mil mollea de los cuales solo ejecutaron el 78%. Para el presente 2022 el
PIM de la ARCC es mayor a 5 mil millones, algunas preguntas son: ¿con cuánto
presupuesto terminará el año? ¿cuánto del presupuesto lograrán ejecutar al
término del año? Y finalmente, al término del 2022, las regiones que hemos sido
“favorecidas” con la ARCC, hemos reducido en algo nuestras
vulnerabilidades"
Zonas vulnerables en la región
Muchos se preguntan para que sirven los mapas de peligros,
vulnerabilidad y riesgos que elaboran entidades competentes. De repente para
algo; sin embargo, observando la realidad vemos que no se aplica. En Paita,
muchas familias han tomado el acantilado, en Sullana, se han posicionado en una
hondonada y otros en la ribera del río, en Piura, existen zonas vulnerables y
todos los saben, en otras localidades, se han construido casas en el cauce de
las quebradas.
Allí en esos lugares están los damnificados del futuro; son
aquellos que, sin mediar previsión alguna, se han ubicado en zonas vulnerables
y que ninguna autoridad en el presente, será capaz de realizar la remediación
aplicando la norma. De acuerdo a lo reglamentado, si existen zonas vulnerables
y solucionar los problemas es mucho más costoso que reubicarlos, se debe hacer.
Son las municipalidades las que deberían realizar esta focalización, es
probable que algún día lo hagan.
Lo que si queda evidente es que los piuranos y sus
autoridades, mantendrán las condiciones del status quo y que mantendrán sus
principales puntos de vulnerabilidad. No existe actos correctivos y bastaría
ver el puente Andrés Avelino Cáceres o “Cuarto puente” para darse cuenta que
han sido incapaces de darle el ancho del cauce natural. Eso hubiera sido lo
lógico frente a lo ocurrido, pero se ha mantenido lo ilógico.
Pero no solamente es Piura, también lo es la populosa
Sullana, una ciudad caótica y sin autoridades que realicen su función con
responsabilidad. Pero no solo son las autoridades sino la población misma, la
cual se mantiene a la vera del Canal Vía, cuyas viviendas se encuentran
expuestas al peligro; poblando la zona de la selva cuando se tiene conocimiento
que es el cauce de la quebrada Cieneguillo y así por el estilo. Es decir, todo
sigue igual como cuando hubo lluvia.
Nadie quiere desgracias, pero por ser blandos, las
generamos.
¿Después de la Autoridad para la
Reconstrucción qué?
En el mes de diciembre culminará la responsabilidad de la
Autoridad para la Reconstrucción con Cambios y muchos proyectos seguirán siendo
ejecutados, bajo la modalidad de convenio Gobierno a Gobierno. Cumplirá función
ejecutora, indica Amalia Moreno Vizcardo a nuestra pregunta, pero igual muestra
su preocupación por lo que viene.
Si el estado funcionara, no habría necesidad de un ente
exógeno a los tres niveles de gobierno, sino que serían estos los que cumplan
sus funciones y competencias. Vale anotar, que la Autoridad para la
Reconstrucción con Cambios, solo es responsable de los proyectos contemplados
en el Plan de Reconstrucción; sin embargo, también las inversiones se
encuentran dispersas, porque los ministerios también actúan en el territorio.
Las viviendas del kilómetro 980 que son los damnificados
del Bajo Piura, hasta ahora esperan su vivienda; sin embargo, tienen problemas
para consolidar su nuevo hogar. Lo que quiere decir, que hasta en el desastre
se presentan dispersión de inversiones.
Por lo visto en todo el proceso de Reconstrucción y por el
nivel de autoridades que se tiene en el nivel regional y nacional, se evidencia
que por lo menos en el mediano plazo, no existirá solución diferente a la
gestión de este tipo de hechos. Las autoridades nacionales hablan de
descentralización, pero para ellos, la entienden como Gores Ejecutivos o Muni
Ejecutivos; pero eso no es.
Es decir, si el gobierno central concentra los recursos
para gestionarlos de acuerdo a discrecionalidad, debemos indicar que los
gobernadores y alcaldes, no tienen propuesta diferente a la de ser ejecutores
de proyectos, habiéndose creado un círculo vicioso entre ejecutivo y gobiernos
subnacionales para obtener recursos, que luego se convierten en corrupción en
diversos niveles. Por lo tanto, se espera que haya una verdadera
descentralización en el largo plazo.
Finalmente
La gestión del riesgo de desastres, compromete a todos,
pero fundamentalmente al Estado. Los documentos que se realizan técnicamente,
deben servir para algo y no para poblar anaqueles; si se determina una zona
como vulnerable y se mantiene esa condición, tarde o temprano será una dura
realidad.
El 27 de marzo del presente, nos recuerda nuestras
fragilidades en la planificación, lo ideal es que no se vuelva a repetir, al
menos por el mismo motivo.
Vale reconocer, que al menos en la gestión de la cuenca del
río Piura, existen ya estudios que plantean una solución integral para gestión
de la Cuenca del río Piura y se vienen ejecutando os estudios de drenajes de
las principales ciudades de la costa. De hacerse realidad la ejecución de los
proyectos que se deriven de estos documentos, se podría decir y con justa
razón, que el desastre sirvió para las generaciones venideras. https://www.elregionalpiura.com.pe/
Áncash: Fiscalía investiga construcción de dique
La Fiscalía Especializada en
Materia Ambiental del Santa inició una investigación preliminar por el presunto
delito de alteración del paisaje contra quienes resulten responsables de la
construcción de un dique en medio del caudal del río Santa.
La magistrada a cargo de este
despacho, Evelyn Lamadrid Vences, tomó la decisión tras realizar una
constatación en el sector Santa Rosa – Suchiman, en donde evidenció la
edificación de un dique en medio de las aguas, situación que alteraría los
recursos hídricos.
La representante del Ministerio
Público optó por iniciar la investigación preliminar por el delito de
alteración al paisaje, contra quienes resulten responsables, debido a que dicha
obra (dique) se edificó con material no metálico en el cauce del río, lo cual
perjudicaría al ecosistema del lugar.
La fiscal Evelyn Lamadrid
dispuso, entre las primeras diligencias, que un especialista del Equipo Forense
en Materia Ambiental del Ministerio Público realice una constatación para
determinar el daño que dicha obra ocasiona al ecosistema.
DENUNCIA
La acción del Ministerio Público
ocurre dos días después de que los dirigentes de la Juntas de Usuarios de
Irchim denunciaron que la distribución de las aguas del río Santa no se está
efectuando de manera equitativa entre los proyectos Chinecas y Chavimochic.
Revelaron que en el lugar se
está construyendo un dique de concreto que origina que las aguas del río se
direccionen hacia la compuerta de Chavimochic, provocando la reducción
considerable del caudal del río Santa para irrigar las tierras del valle del
Santa y Chinecas.
La congresista por Alianza para
el Progreso, Lady Camones Soriano, junto a los dirigentes agrarios visitó la
estación de control hidrométrico en Cóndor Cerro, bocatoma Chavimochic;
frontera agrícola entre las regiones de La Libertad y Áncash.
Tras escuchar a los dirigentes,
la parlamentaria apepista consideró que urge conocer los detalles de dicha
construcción, que, en opinión de los agricultores, es perjudicial para nuestra
región. “Nos preguntamos, ¿quién autorizó la construcción de ese dique de
concreto? La población ancashina espera una explicación”, indicó. https://diariocorreo.pe/
HIDROMUNDO
Día mundial de la adaptación al cambio climático: cuatro ejemplos exitosos en América Latina que necesitan ser apoyados
Los científicos del mundo siguen repitiendo la misma frase: el cambio climático ya está aquí. Y no paran de aportar año a año nueva evidencia. Sin ir muy lejos, el último reporte del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), publicado a comienzos de marzo de este año, revela cómo la seguridad alimentaria de millones de personas está bajo amenaza producto de los fenómenos meteorológicos extremos y también de la elevación de la temperatura del planeta y la acidificación de los océanos que afecta actividades productivas clave como la acuicultura y la pesca.
A esto se suma que
aproximadamente la mitad de la población mundial experimenta actualmente una
grave escasez de agua durante al menos una parte del año, así como el aumento
de las temperaturas, las lluvias y las inundaciones que provocan la aparición
de enfermedades estomacales que ya iban de salida, como es el caso del cólera.
Lo peor de esta situación es que
los efectos continuarán incrementándose, aseguran los expertos. Es por eso que
hoy los esfuerzos no solo deben estar destinados a mitigar el cambio climático,
sino también a adaptarse a las nuevas condiciones.
Los científicos aseguran que una
de las medidas de adaptación más eficientes es conservar y restaurar los
ecosistemas, considerando que estos no solo son grandes sumideros de gases de
efecto invernadero —el CO2 y otros gases que están sobrecalentando la Tierra—
sino que también pueden protegernos de los eventos extremos, como la sequía o
las tormentas, que serán cada vez más frecuentes, más severos y prolongados.
En el Día mundial de la
adaptación al cambio climático, presentamos algunas experiencias innovadoras y
eficaces que se están implementando en cuatro países de América Latina y
analizamos los desafíos que enfrenta la región para adaptarse a las actuales y
futuras condiciones climáticas.
La siembra de agua en Bolivia
En el municipio de Vinto,
Cochabamba, cientos de familias han encontrado una fórmula para contar con
mayor cantidad de agua para el riego y el consumo en sus hogares.
Todo empezó hace cuatro años,
cuando la Fundación Agrecol Andes, a través del proyecto Cosecha Azul, llegó
con la idea de restaurar zonas de recarga hídrica en las cabeceras de cuenca
del municipio. Las comunidades se convirtieron rápidamente en aliadas de este
proyecto que hoy deja ver sus primeros resultados.
Según German Jarro, director
ejecutivo de Agrecol, “las zonas de recarga hídrica están deterioradas por la
tala indiscriminada de bosques nativos”. Esto, a su vez, ha provocado que los
suelos se erosionen y cuando llueve, el agua en lugar de infiltrarse en el
terreno se pierde por la escorrentía superficial, explica Jarro. Esto, sumado a
los períodos de sequía cada vez más largos producto del cambio climático, ha
provocado que la seguridad hídrica de miles de personas se vea amenazada.
Para contribuir a recuperar la
capacidad de recarga hídrica, se reforestaron las cabeceras de dos cuencas, la
de Collpa y de Keraya, para que las raíces de árboles, arbustos y pastos
faciliten la infiltración del agua al subsuelo. Se implementaron también
sistemas agroforestales familiares, prácticas agroecológicas y sistemas de
riego tecnificado.
En conjunto, todas esas
iniciativas permitieron que entre marzo 2018 y marzo 2019 se recuperara un
volumen de 187,67 millones de litros de agua, según el informe final de los
resultados del proyecto, lo que equivale a llenar 74 piscinas olímpicas.
Protegiendo a los animales del
frío en Perú
En la región de Puno, en Perú,
entre los 3800 y 4050 metros sobre el nivel del mar, la temperatura mínima
oscila entre los -6°C y -18°C, mientras que la máxima se mueve entre los 14°C y
30°C. Sin embargo, producto del cambio climático, esas temperaturas se están
volviendo cada vez más extremas y, según las proyecciones del Servicio Nacional
de Meteorología e Hidrología del Perú (SENAMHI), en 2030 la mínima variará
entre -14°C y -18°C, afectando así la salud y economía de una de las regiones con
mayores índices de pobreza en el país.
Una de las primeras
consecuencias de las bajas temperaturas es el incremento de las enfermedades
respiratorias, asegura Alejandro Vargas, coordinador de programas y proyectos
de la Fundación Acción Contra el Hambre (ACH). Para enfrentar el problema, la
fundación implementó un proyecto para aislar las viviendas del frío y para que
las familias reconozcan tempranamente los síntomas de neumonía y puedan
dirigirse a tiempo a un centro de salud.
“Se puso piso a las habitaciones, se selló los diferentes puntos de
entrada, como agujeros en las paredes y se mejoró el techo combinando
materiales de construcción con productos locales como guano y paja para que el
calor permanezca dentro de las viviendas”, cuenta Vargas.
Y a este panorama se suma,
producto de las heladas, las muertes de camélidos, alpacas y llamas,
principalmente, pero también de bovinos, que son cada vez más frecuentes. Las
crías y los animales viejos son los más propensos a morir y también hay un
incremento en los abortos, asegura el coordinador de ACH. “Cuando ocurren las
nevadas estamos hablando más o menos de una mortandad del 40% del ganado que
tienen las familias y cuando hablamos de una helada hay una mortandad del 15%”,
precisa el experto. En otras palabras, una familia con 100 animales podría
perder hasta 40 cabezas de ganado. Considerando que cada una de ellas tiene un
precio aproximado de 250 soles, la pérdida podría corresponder a unos 100 000
soles.
Para prevenir este problema se
han construido en 20 comunidades altoandinas cobertizos para proteger a los
animales del frío y evitar que mueran o enfermen. Vargas precisa que la
construcción se realiza junto con las familias y que, de hecho, son ellas las
que los construyen con asesoría de un técnico. “Esto es sumamente importante
porque un cobertizo puede durar unos 15 años, pero requiere mantenimiento. A
diferencia de otras iniciativas donde van y les construyen el cobertizo, este
proyecto desarrolló las capacidades de las personas para que en el caso de que
se destruya o haya que hacerle mantenimiento puedan las familias hacerlo
solas”, dice Vargas.
Silvopastoreo para proteger la
Amazonía de Colombia
En la Amazonía, donde la mayor
parte de la deforestación está asociada a la apertura de tierras para la ganadería,
existen algunas alternativas para frenar la tala de bosque al mismo tiempo que
aumenta la productividad de carne y leche. Se trata de la técnica de ganadería
silvopastoril, donde se plantan árboles y arbustos leñosos dentro de las
pasturas para ganado, favoreciendo tanto la diversidad biológica como la
producción.
En Colombia, luego de un exitoso
proyecto piloto en el que se transformaron al sistema silvopastoril unas 150
mil hectáreas, quedó demostrado que la técnica favorece los ecosistemas en la
medida en que se diversifican las especies vegetales en el territorio, pero
también la producción de carne y leche porque aumenta el número de cabezas por
hectárea. Esto, a su vez, permite que la presión sobre el bosque disminuya.
De hecho, el ex ministro de
ambiente Manuel Rodríguez Becerra le dijo a Mongabay Latam que los expertos
sostienen que si se hiciera una transformación muy profunda de la ganadería con
estos sistemas silvopastoriles se podrían liberar alrededor de 12 millones de
hectáreas para otras actividades, incluyendo la reforestación y la restauración
de bosques. “Se estaría frente a un programa gigantesco de adaptación y
mitigación del cambio climático que resuelve también problemas de pobreza
porque los campesinos ganaderos que tienen tres vacas y que de pronto pueden
tener 10 mejorarían sus ingresos”, dice Rodríguez.
México: recuperar los manglares
para proteger a la población
Un grupo de conservacionistas
indígenas comcaac colecta semillas de manglar, las reproduce y siembra para
proteger y ampliar los manglares y pastos marinos en el Canal del Infiernillo,
ubicado en la Isla Tiburón. El área de restauración elegida forma parte del
territorio ancestral de la Nación Comcaac, situada al noroeste de México.
Proyectos como este son clave en
la lucha contra el cambio climático, considerando que investigaciones recientes
demuestran que los manglares y pastos marinos almacenan más carbono que
cualquier otro ecosistema terrestre, por lo que su conservación y restauración
son consideradas importantes estrategias para mitigar el cambio climático, pero
también para adaptarse a él.
En la zona donde se desarrolla
esta estrategia los efectos del cambio climático ya se han hecho visibles con
la modificación de la línea de costa, las sequías y los huracanes más intensos.
Para aminorar los impactos de esos eventos, la conservación de los manglares es
crucial puesto que estos ecosistemas “reducen la intensidad de los oleajes
durante las tormentas y la intensidad de los vientos”, explicó a Mongabay Latam
Alberto Mellado, ingeniero en acuicultura y conservacionista originario de la
Nación Comcaac. «Es así como los pueblos que viven cerca de los manglares están
más protegidos”, añade Mellado.
Conscientes de la importancia de
los manglares, el equipo liderado por Mellado fue más allá y construyó con
recursos propios y un financiamiento extranjero un vivero donde lograron, en
plena pandemia, la producción de 4200 plantas de mangle que sembraron en cuatro
esteros de su territorio ancestral.
¿Cómo expandir estas buenas
prácticas en la región?
Existen numerosas experiencias
en el mundo que apuestan por la adaptación para mejorar la cantidad y calidad
del suministro de agua, diversificar los cultivos, crear sistemas de alerta
temprana, restaurar ecosistemas, entre otros. Sin embargo, aunque muchos de
estos proyectos son buenos, no tienen la escala suficiente para generar un
impacto significativo, concluye un análisis realizado por los expertos en
cambio climático del IPCC. “Existen brechas entre los niveles actuales de adaptación
y los niveles necesarios para responder a los impactos y reducir los riesgos
climáticos”, dice el informe realizado por el panel de expertos, quienes
señalan como uno de los principales obstáculos para reducir esta brecha a la
falta de financiamiento.
Por ejemplo, en el caso del
silvopastoreo en Colombia, después del plan piloto que terminó hace cuatro años
se han transformado solo 100 mil hectáreas ganaderas hacia este sistema,
aseguró Rodríguez. “A ese ritmo nos vamos a demorar 100 años en modificar dos
millones y medio de hectáreas. Eso no puede ser”, sostuvo el ex ministro.
En Bolivia, “la preocupación que
tenemos es el presupuesto. Lamentablemente no hemos podido captar otros fondos,
de lo contrario podríamos retomar el trabajo y seguir replicando el proyecto
(de siembra de agua) en otras microcuencas”, dice el director de Agrecol.
En México, “la Comisión Nacional
Forestal (Conafor) no considera los mangles como especies forestales
susceptibles de apoyo para trabajo comunitario”, asegura Mellado, por lo mismo,
el equipo de conservación no ha podido acceder a financiamiento público. “Se
necesita que volteen a ver proyectos como este y otros más que deben existir
por ahí y que les ocurre lo mismo que a nosotros, que no pueden acceder a la
ayuda necesaria para llevarlo a la escala que de veras provoque una
transformación en el ambiente, que de veras valga la pena. La escala de
nosotros es muy marginal: 4000 mangles al año”, dice Mellado.
Hasta ahora, la mayor parte del
esfuerzo económico ha estado puesto en las medidas de mitigación para impedir
que la temperatura del planeta sobrepase los 1,5° grados en comparación a la
era preindustrial. Reforzar el financiamiento de la adaptación, sin embargo, es
una prioridad que ya está planteada y que, según sostiene Manuel Pulgar-Vidal,
exministro de Ambiente de Perú y hoy líder de Clima y Energía para WWF, será
uno de los puntos fuertes a tratar durante la próxima COP 27 donde “se esperan
muchos avances” en ese sentido.
Avanzar en la adaptación al
cambio climático es urgente y sobre todo en América Latina, donde los países
enfrentan mayores vulnerabilidades que los desarrollados debido a que los
efectos del cambio climático “se ven profundizados por la pobreza e inequidad”,
asegura Thelma Krug, vicepresidenta del IPCC. Si el panorama no cambia, añade
Krug, los impactos del cambio climático podrían afectar el rol de la región
como productor de alimentos y alterar dramáticamente la seguridad alimentaria. https://es.mongabay.com/
“Defender el Agua es Defender la Vida”