Miércoles, 7 de diciembre de 2022 – Año XV – Edición 4108 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
Sedapal se declara sin almacenamiento
suficiente para abastecer de agua a Lima y Callao: es el registro más bajo en
seis años
La empresa estatal detalló que, al cierre de noviembre, tenía previsto almacenar 130 millones de metros cúbicos (MMC); sin embargo, solo se ha logrado acopiar 102.5 MMC, 21.5 % menos de lo habitual
La ausencia de lluvias en la sierra central del país ha despertado
la alerta del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal), que
este martes se declaró sin almacenamiento promedio para abastecer de agua a
Lima y Callao.
La empresa estatal detalló que, al cierre de noviembre,
tenía previsto almacenar 130 millones de metros cúbicos (MMC); sin embargo,
solo se ha logrado acopiar 102.5 MMC, 21.5 % menos de lo habitual.
El almacenamiento ha tenido una tasa promedio de descenso
mensual de 30 MMC y es la cifra más baja registrada en los últimos seis años,
según Andina.
Asimismo, los pronósticos estiman que, para la época de
caudal más bajo (entre mayo y noviembre de 2023), los niveles de almacenamiento
serían menores a 282 MMC (capacidad total), por lo que se deberán tomar medidas
preventivas para cuidar el recurso hídrico.
Frente a este panorama, Sedapal lanzó la campaña “Hora de
valorar el agua”, que busca concientizar a la población a cambiar hábitos y
evitar el abastecimiento de agua potable en los hogares de la capital, como ya
ocurre en Cusco y Cajamarca.
Asimismo, la empresa trabaja en coordinación con la
Autoridad Local del Agua (ALA) para el control y regulación de los caudales,
además del monitoreo constante a las bocatomas ubicadas en La Atarjea, a fin de
asegurar las reservas para Lima y el Callao.
Emergencia en el sur
La semana pasada, el Gobierno declaró estado de emergencia
por 60 días en 111 distritos de las sureñas regiones de Arequipa y Puno ante un
“peligro inminente de déficit hídrico” por la ausencia de lluvias que afecta la
sierra.
A través de un decreto supremo publicado en el diario
oficial El Peruano, el Ejecutivo decretó esta medida para ejecutar “acciones de
excepción, inmediatas y necesarias de reducción del muy alto riesgo existente,
así como de respuesta y rehabilitación que correspondan”.
La norma indica que la medida responde a las solicitudes de
las autoridades regionales de Puno y Arequipa debido al déficit hídrico que
afecta principalmente a sus agricultores.
“Los agricultores de varios distritos de algunas provincias
de los departamentos de Arequipa y Puno se encuentran expuestos ante el peligro
inminente de déficit hídrico, toda vez que los recursos hídricos disponibles no
alcanzarían para satisfacer la demanda para siembra o regadío de sus cultivos”,
se lee en el documento.
La norma sostiene que, según el Instituto Nacional de
Defensa Civil (Indeci), “la magnitud” de la situación y la fata de capacidad de
respuesta de las autoridades regionales demanda la adopción de medidas urgentes
y una intervención “técnica y operativa” por parte del gobierno nacional.
Los 111 distritos declarados en emergencia corresponden a
las 14 provincias de Caravelí, Azángaro, Carabaya, Chucuito, El Collao,
Huancané, Lampa, Melgar, Moho, Puno, San Antonio de Putina, San Román, Yunguyo
y Sandia. https://www.infobae.com/
HIDROREGIONES PERÚ
Protestan cerrando calles ante desabastecimiento de agua
Con sus baldes, timbos, ollas en media pista y cerrando la
calle, la mañana de ayer viernes, los vecinos de la cuadra 4 del jirón Ricardo
Palma, protestaron exigiendo el abastecimiento de agua, debido que hace 6 días
no cuentan con el servicio, hecho que indignó a algunos transeúntes y
conductores de vehículo que increparon a los moradores de la zona por
obstaculizar la calle, indicándoles que esta protesta lo debería realizar en
Emapa y no cerrando la vía pública.
Martitha Isminio Upiachihua, vecina del lugar señaló que
son 6 días que se encuentra sin agua, el cual no les permite cocinar sus
alimentos, no tienen con qué bañarse y realizar la limpieza de sus servicios
higiénicos, esta situación hace incluso a las personas de la tercera edad y los
niños sufran más con la falta de agua.
Por su parte Victoria Espinoza, moradora del lugar, indicó
que es una pena que estando en plena ciudad este sufriendo el desabastecimiento
de agua y lo peor de todo es que Emapa San Martín, les cobra puntales y si se
olvidan de pagar dos meses inmediatamente les cortan exigiendo un pago adicional
de 60 soles para reconexión, sin embargo, para dar el servicio es pésimo, a
esto se suma la falta de presión con las que les brinda el agua en donde
incluso, ni juntar un balde agua pueden.
Finalmente, Armando Pérez Arévalo, vecino del lugar, manifestó
que desde que comenzaron a sufrir el desabastecimiento del servicio de agua,
han buscado diferentes formas de poner en conocimiento a los funcionarios de
Emapa San Martín, sin embargo, pese a las llamadas en los números de teléfono
que brinda para emergencia, nadie les contesta y lo peor de todo es que les
cortan la llamada al no saber a dónde acudir, determinaron tomar esta acción
esperando ser escuchados y les dé una pronta solución.
Jefe de operaciones de Emapa SM, asegura que fuga no
visible afectó a varios sectores, entre ellos Ricardo Palma, cuadra 4.
Ante el reclamo de los vecinos de la cuadra 4 del jirón
Ricardo Palma, que incluyó el cierre de la calle, el gerente de operaciones de
la Empresa Municipal de Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de San Martín
Sociedad Anónima, administrada por el Organismo Técnico de la Administración de
los Servicios de Saneamiento, Manuel Ramírez García, señaló que hace una de
días venían teniendo baja presión de agua, comenzando a realizar la verificación
de toda las líneas de servicio, logrando encontrar en la cuadra 4 del jirón
Alfonso Ugarte, una fuga no visible, por lo que procedieron a realizar el
trabajo debido a que es una tubería de más de 8 pulgadas que abastece al sector
1256, es decir abastece toda la ciudad y barrio Huayco , esperando que horas de
la noche se restablezca el servicio.
Asimismo, el funcionario, indicó que al tener conocimiento
sobre esta protesta y tener la infracción exacta de lo que ha pasado con el
abastecimiento de agua,
inmediatamente viene coordinando para mediante cisternas se
pueda brindar el servicio hasta que la reparación de la tubería de 8 pulgadas,
e incluso no es el único sector porque tienen información que algunas
instituciones educativas se encuentran en las mismas condiciones por lo que
priorizarán los sectores para que puedan contar con el líquido elemental.
Finalmente, Manuel Ramírez, manifestó que al respecto a los
problemas de las llamadas, dijo que, al parecer, al no ser el único sitio
afectado, la línea móvil aparentemente ha colapsado, por lo que pidió disculpas
a los moradores afectados, dejando en claro que después de mucho tiempo hubo
este problema. https://diariovoces.com.pe/
Buscan solucionar contaminación del río Moche
Ante la excesiva contaminación
de las aguas del rio Moche, los comuneros y representantes de los gobiernos
regional y nacional, participan en la mesa técnica que atiende la problemática
de la contaminación del emblemático río.
De acuerdo a información del
Ministerio de Energía y Minas (Minem), en su calidad de facilitador de la
citada mesa técnica, se realizó una reunión el último viernes 2 de diciembre en
Trujillo, donde los representantes del Ejecutivo presentaron los avances para
solucionar problemática de la contaminación del río Moche.
Piden intervención
De acuerdo al acta firmada en el auditorio del Colegio de Biólogos de La Libertad, el 29 de noviembre 2022, la comunidad solicitó que la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental y el Gobierno Regional, informen sobre las acciones que realizan por la presencia de la actividad minera ilegal e informal en la zona de Quiruvilca, Samne y Salpo.
Como parte de la agenda,
diferentes representantes del ejecutivo informaron los avances de actividades
en los planes específicos, de acuerdo a los compromisos asumidos por cada
sector. Así, el Ministerio del Ambiente (Minam) reportó la implementación de
estaciones de monitoreo en lo largo de la cuenca y la OEFA sobre el reporte de
avances del plan de supervisión y fiscalización de la ex unidad minera
Quiruvilca.
En tanto, la Dirección General
de Minería del Minem explicó sobre el convenio de transferencia entre Activos
Mineros S.A.C. y dicho sector, para el cierre de la ex unidad Quiruvilca. Por
su parte, la ANA mostró los resultados del monitoreo de la calidad del agua,
identificación de fuentes contaminantes en la cuenca del río Moche, así como
indicadores de calidad ambiental de los recursos híbridos superficiales en la cuenca.
Minera se pronuncia
A su turno, la compañía Minera
Quiruvilca S.A. en liquidación y ATOM presentaron una propuesta sobre una nueva
tecnología que podría ser aplicada en el cierre de mina de la ex unidad
Quiruvilca. Por último, el MVCS indicó sobre las medidas para el tratamiento de
aguas residuales domésticas.
Las partes también acordaron que
la DGM del Minem enviará un proyecto de Decreto Supremo a la Oficina General de
Asesoría Jurídica del citado portafolio para el trámite de gestión del refrendo
del MEF y su aprobación en el Consejo de Ministros.
En la próxima reunión, la PCM se
compromete a presentar la Resolución Ministerial que amplía la vigencia de la
Mesa de Técnica por 180 días adicionales (hasta el 31 de mayo de 2023).
Asimismo, informará sobre las coordinaciones y acciones que se realizará la
Alta Dirección del Ejecutivo para evaluar y analizar los tiempos del estudio
que realizará la empresa Activos Mineros SAC (Amsac). La siguiente reunión ha
sido programada para la tercera semana de enero 2023.
Por último, el Minem expresó su
voluntad a los participantes de continuar monitoreando los acuerdos por parte
de la empresa y los diferentes sectores a través de la Oficina General de
Gestión Social (OGGS) con la finalidad de agilizar la solución a la
problemática del río Moche. https://exitosanoticias.pe/
HIDROMUNDO
México, inoperante ante creciente contaminación marítima
México tiene más de 11 000
kilómetros cuadrados de litoral continental y un intenso tráfico marítimo. Este
país latinoamericano acogió 12 045 embarcaciones durante julio, comparadas con
las 11 971 en el mismo mes de 2021.
En el puerto de la ciudad de
Veracruz, el segundo mayor de México por carga recibida, atracan al menos cinco
barcos diarios, según datos de la Coordinación General de Puertos y Marina
Mercantes de la Secretaría (ministerio) de la Marina (Semar) en 2022.
En este estado del sureste
mexicano, también llamado Veracruz, la circulación marítima se expandió 5% en
julio, al recibir 254 naves frente a las 1192 en el mismo mes de 2021.
Pero México carece de mediciones
de la polución atmosférica y del agua proveniente de la industria marítima.
A nivel mundial, este sector
representa cerca de 3 % de los gases de efecto invernadero (GEI), un porcentaje
similar al del sector de la aviación. Si fuera una nación, sería la sexta en el
mundo por su contribución a la crisis climática. La meta actual internacional
consiste en la reducción de GEI en al menos 50 % en 2050.
En 2020, la Organización
Marítima Internacional (OMI) dispuso que los barcos limiten el contenido de
azufre en los combustibles a 50 % m/m (la masa del soluto dividida entre la
masa de la solución, por 100), en una disminución significativa desde el límite
previo de 3,5 %.
Sin embargo, México tampoco
tiene hoja de ruta para su contracción o planes concretos para producir
combustibles marítimos con menor contenido de azufre, elemento nocivo para la
salud humana y el ambiente.
Por ello, el país enfrenta
desafíos para alcanzar los objetivos de la estrategia de la OMI para disminuir
las emisiones en el área marítima.
En 2023, esta organización
revisará el plan mundial, para avalar uno nuevo, que examinará cada cinco años,
porque estimó que las emisiones procedentes del transporte marítimo crecieron
de 977 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) en 2012 a 1 076
millones en 2018 –un aumento de 9,6 %–, y podrían aumentar 90-130 % a 2050.
El peso global de sus emisiones
pasó de representar 2,76 % a 2,89 % del total en ese lapso.
Las emisiones de dióxido
sulfúrico (SO2) por la quema de combustibles con alto contenido de azufre
derivan en partículas sulfurosas en el aire, que pueden desatar asma y empeorar
males cardíacos y pulmonares, además de amenazar ecosistemas marinos y
terrestres, según la estadounidense Agencia de Protección Ambiental (EPA).
En el agua, los hidrocarburos
bloquean la entrada de luz y limitan la fotosíntesis de algas y otras plantas,
y en la fauna pueden ocasionar envenenamiento, alteraciones de ciclos
reproductivos e intoxicación, de acuerdo con la EPA.
El SO2, que no es uno de los GEI
pero sí altamente contaminante, permanece solo unos días en la atmósfera, pero
al disolverse en el agua genera ácidos que le confieren su peligrosidad para la
salud humana.
Mientras, las emanaciones de
dióxido nitroso (NOx), derivadas de la quema de hidrocarburos, mezcladas con
ozono a nivel de suelo, desembocan en smog. El NOx permanece 114 años en la
atmósfera, según varios estudios científicos.
Problema menospreciado
IPS constató la problemática que
ocasiona este tipo de contaminación, al analizar los datos obtenidos a través
de 30 solicitudes de información pública a varias dependencias gubernamentales
y la consulta de imágenes satelitales de derrames de hidrocarburos provenientes
de embarcaciones ocurridos en varias zonas del país entre 2019 y 2022.
Con colaboración exclusiva de la
empresa española Orbital EOS (Earth Observation Solutions) –especializada en el
hallazgo de este tipo de contaminación en alta mar–, IPS identificó mediante
imágenes satelitales cuatro vertidos en zonas marinas mexicanas ocurridos entre
2019 y 2021.
El 14 de diciembre de 2021, una
embarcación no identificada derramó 3,14 metros cúbicos de una sustancia que se
sospecha es un hidrocarburo, en un área de casi 79 kilómetros cuadrados, a 147
kilómetros de la costa mexicana, frente a Acapulco, en el sureño estado de
Guerrero, según consta en una toma realizada por el satélite Sentinel-1, de la
Agencia Espacial Europea.
Otro accidente petrolero
monitoreado por el Sentinel-2, sucedió el 14 de abril de 2019, cuando un ferry
lanzó entre 0,81 y 6,08 m3 de combustible ligero y entre 17,65 y 176,6 m3 de
combustible pesado, a 35 kilómetros de tierra, en el mar de Cortés, una zona de
gran biodiversidad y amenazada por el desarrollo inmobiliario, frente a la
costa del nororiental estado de Sinaloa.
El hidrocarburo ligero cubrió
20,26 km2 y el restante, 3,53 km2, según el análisis de Orbital EOS.
La embarcación, cuyo nombre IPS
mantiene en reserva por razones legales, se libró de sanciones de las
autoridades mexicanas, pues no aparece en los listados de incidentes de Semar
ni de naves sancionadas por la Procuraduría (fiscalía) Federal de Protección
Ambiental.
El barco fue construido en 2001,
y cambió de nombre y de bandera en mayo de 2019, semanas después del vertido.
Su última ubicación se reportó en un puerto del centro de Italia.
El Sentinel-1 detectó otro
derrame el 8 de diciembre de 2021, cuando un barco no identificado botó 1,15 m3
de probable hidrocarburo sobre 28,6 km2, a 180 kilómetros de la costa, frente a
Veracruz.
Además, este satélite registró
el 27 de septiembre de 2021 otro vertido de 0,28 m3 de probable hidrocarburo en
7,1 km2, a 390 kilómetros de la costa, en el golfo de México, en las
occidentales costas del Atlántico.
El accidente más reciente
ocurrió el 21 de agosto, cuando un yate privado se hundió y soltó combustible
en Balandra, en el estado noroccidental de Baja California Sur, un área de
protección especial por su biodiversidad.
Asimismo, la no gubernamental
estadounidense SkyTruth, dedicada principalmente a rastrear derrames, registró
11 descargas de aguas residuales aceitosas en aguas mexicanas entre julio de
2020 y diciembre de 2021.
Ian McDonald, académico del
Departamento de Ciencias Terrestres, Oceánicas y Atmosféricas de la
estadounidense Universidad Estatal de Florida, resaltó la presencia persistente
de petróleo en el agua debido a la operación de plataformas y pozos; fugas
naturales del suelo submarino y movimiento marítimo en zonas marinas mexicanas.
“Ha faltado mantenimiento
preventivo (de las instalaciones). El problema es el impacto acumulativo sobre
una zona. Las actividades de los barcos, como el dragado y la generación de
residuos. El impacto potencial puede ser muy grande”, dijo a IPS desde la
ciudad de Miami.
La investigación “Derrames
petroleros crónicos en los océanos globales”, de la cual McDonald es coautor y divulgada
en junio, halló que 97 % de los rastros petroleros provienen de embarcaciones y
descargas terrestres y 3 % de escapes naturales del fondo marino en costas
aztecas.
Un portavoz de la OMI dijo a
IPS, desde su sede en Londres, que la organización no puede comentar sobre la
situación de un país e informó que realizará una revisión sobre México en 2024.
Mientras, la Cámara Mexicana de la Industria del Transporte Marítimo declinó
comentar para este reportaje y Semar no respondió a una consulta.
La polución por hidrocarburos en
alta mar depende del volumen y lugar, y la contaminación crónica tiene efectos
a largo plazo.
“Cualquier derrame va a tener un
impacto. Donde es menos directo es en aguas abiertas, porque hay más dilución,
pero tiende a acumularse en la profundidad del océano y afecta a algunos
organismos. El impacto es mayor cuando el derrame llega a las playas, porque
tiene menos movimiento allí», explicó a IPS el investigador Adolfo Gracia, del
Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la Universidad Nacional Autónoma
de México.
Desde Ciudad de México destacó
un factor importante: la importancia de analizar la contaminación crónica,
proveniente de la industria, la agricultura y el transporte marítimo, como una
amenaza creciente para la flora y la fauna marinas.
Incompletos
De 819 incidentes que Semar
rastrea desde 2017, solo 16 los cataloga de contaminación marina, de estos dos
consistieron en derrames de hidrocarburos y uno en “daños graves al ambiente”,
sin pormenorizar su causa, según datos obtenidos vía transparencia. Semar solo
sancionó en dos casos, pero no especificó las penas.
De esos 819 incidentes, un
vertido de hidrocarburos y un suceso de polución ocurrieron en Veracruz.
Semar también contabilizó 42
incendios a bordo y 13 hundimientos que tenían potencial contaminante.
“Existe la legislación (Ley de
Vertimientos en las Zonas Marinas Mexicanas), pero nadie la vigila. No hay
medición precisa. Petróleos Mexicanos (Pemex) no investiga el tema”, dijo a IPS
Rodolfo Navarro, director de la no gubernamental Comunicar para Conservar.
Navarro trabaja en el municipio
de Cozumel, la mayor isla del Caribe mexicano, en el sudoriental estado de
Quintana Roo, y uno de los mayores receptores de cruceros del mundo, que ha
atestiguado el impacto del transporte marítimo sobre los ecosistemas.
Semar, responsable de la
administración de los puertos desde 2017–incluyendo el control de la
contaminación–, dijo que carece de registros de violaciones a la Ley de
Vertimientos.
Semar, la Secretaría de Medio
Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la estatal Petróleos Mexicanos
(Pemex) y las administraciones portuarias de las instalaciones situadas en el
golfo de México, adolecen de registros de contaminación en zonas portuarias.
Tampoco cuentan con hojas de
ruta para materializar los objetivos de la Estrategia Inicial que, en 2018,
adoptó la OMI para reducir las emisiones de CO2 en al menos 40 % a 2030, para
todo el transporte marítimo internacional, y aspirar a 70 % en 2050 comparado
con los niveles de 2008.
Un convenio determinante
El Convenio Internacional para
Prevenir la Contaminación por los Buques (Marpol, en inglés), vigente desde
1978, constituye una de las herramientas vitales para cumplir con los objetivos
de la OMI, el cual está integrado por el Anexo I sobre la prevención de la
polución por hidrocarburos, II sobre sustancias líquidas nocivas transportadas
a granel y III sobre las transportadas en bultos.
Consta también de los anexos IV
sobre residuos, V sobre basura y VI sobre la contaminación atmosférica de los
buques. México pertenece a los anexos I, II y IV, pero no al III, V y VI.
A partir de 2020, la OMI aplica
regulaciones que limitan el contenido de azufre utilizado en buques de carga a
0,5 %. El organismo busca su abatimiento en 77 %, equivalente a 8,5 millones de
toneladas de SO2.
La omisión sobre el manejo de la
polución por hidrocarburos supone una violación al Anexo I del Marpol. Al
pertenecer a OMI, cada país debe alcanzar sus metas.
Además, el capítulo 24 del
Tratado de México, Estados Unidos y Canadá (T-Mec) vigente desde 2020 y que
sustituyó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan), estipula
el control de la producción, consumo y comercio de sustancias que dañen la capa
de ozono, así como la disminución de la contaminación atmosférica.
Este apartado estipula
prioridades de calidad del aire, incluyendo la reducción de emisiones del
tráfico marítimo.
Pero México carece de
regulaciones para acotar las emisiones navieras y tampoco suscribió en
noviembre de 2021 durante la cumbre climática de Glasgow la “Declaración de
Clydebank para corredores marítimos verdes”, que aspira a la creación de al
menos seis rutas de bajas emisiones en 2025 y que solo firmaron 24 países.
La omisión en el control de la
contaminación implica la dificultad de lograr los Objetivos de Desarrollo
Sostenible (ODS) 13 y 14, adoptados por la comunidad internacional en 2015 y
que deben alcanzarse en 2030.
El 13 de los 17 ODS trata del
combate a la crisis climática y sus efectos, mientras que el 14 se centra en la
conservación y uso sostenible de los océanos, los mares y los recursos marinos
para el desarrollo sostenible.
Muelles ocupados
El sistema portuario mexicano
manejó 169,77 millones de toneladas de carga en julio, un crecimiento de 3 % en
comparación con el mismo periodo de 2021, según cifras de Semar.
La carga de exportación totalizó
66,4 millones de toneladas, 2,6 % menos que en julio de 2021 –68,19 millones–,
mientras que la importación creció 8,8 %, de 66,51 millones a 72,36.
En el Puerto de Veracruz, con 17
muelles, esta viene en alza desde 2008. Frente a la costa se observa la hilera
de embarcaciones en espera de entrar al puerto. Una línea de faros y boyas
rojas y verdes señala la ruta a los muelles.
Dentro del recinto portuario, el
ajetreo no para. Vehículos, camiones, trenes y grúas van y vienen para sacar y
meter la carga, de la que depende la actividad económica de la zona y también
en parte del país y segunda economía latinoamericana.
En sus entrañas, los barcos
trasladan combustibles, mercancías, vehículos o materias primas, y también
conllevan una amenaza ambiental, de la cual hay evidencias.
En 2020, la instalación gestionó
26,2 millones de toneladas, cantidad que aumentó 22 % al año siguiente –32
millones–. En julio último, movilizó 19,97 millones, 7,6 % más que en mismo mes
de 2021.
El rubro marítimo representa 5 %
del producto interno bruto (PIB) mexicano.
Para México, la urgencia radica
también en la proyectada expansión de las emisiones, como calcula el informe de
la Comisión para la Cooperación Ambiental de América del Norte (CCA)
“Reduciendo emisiones del movimiento de bienes vía transporte marítimo en
América del Norte”, centrado en 35 puertos mexicanos, entre 2011 y 2030 debido
al aumento del tránsito marítimo.
Por la borda
El Anexo VI del Marpol, vigente
desde 1997, encierra relevancia para México, pues, al dirigirse al control de
emisiones de SO2, NOx y material particulado (PM), implica la creación de un
área de control de emisiones (ECA, en inglés) en su zona marítima.
Las ECA determinan la adopción
de métodos especiales obligatorios para la prevención de polución marina de
barcos, por petróleo, residuos líquidos o basura, como combustible de bajo
azufre, incineradores de lodos y un sistema de limpieza del gas quemado, según
las condiciones oceanográficas y ecológicas de la zona y las particularidades
del tráfico marítimo.
Semarnat y la EPA de Estados
Unidos argumentan que el establecimiento de la ECA tendría efectos positivos
sobre la salud pública y el ambiente, sin costos exorbitantes para México.
Entre 2009 y 2018, Estados
Unidos y México, con el apoyo de la CCA –instituida por el Tlcan–, colaboraron
para que este país latinoamericano se adhiriese al Anexo VI y creara la ECA.
Pero el gobierno de Enrique Peña
Nieto (2012-2018) no envió esa petición al Senado ni la actual administración
de Andrés Manuel López Obrador parece interesada en hacerlo. Entre 2010 y 2019,
el Senado mexicano votó seis exhortos para que el Ejecutivo remita la solicitud
de incorporación al Anexo VI del Marpol.
En la Cumbre de Líderes de
América del Norte de junio de 2016, los entonces gobernantes de Estados Unidos,
Barack Obama; de México, Peña Nieto, y de Canadá, Justin Trudeau, acordaron el
trabajo conjunto para concluir el diseño de la ECA mexicana y enviarla a la
OMI, Pero ello nunca se concretó.
Navarro, el conservacionista de
Cozumel, enfatizó desde allí que México no está en camino de alcanzar las
metas. “Podría hacerlo, pero no hay la mínima voluntad. Y en aguas
internacionales nadie vigila nada”, denunció.
El académico McDonald urgió a la
atención del problema. “El gobierno debe abordarlo. México tiene enormes
recursos marinos y es una lástima que no los proteja. Hay beneficios económicos
en la conservación de los ecosistemas marinos. Los barcos son buenos para los
gobiernos porque representan ingresos, pero los daños ambientales pueden ser
cuantiosos”, estimó.
El investigador Gracia cuestionó
la eficacia de la vigilancia en alta mar. «Depende de la buena conciencia de
todos. Es un poco complicado. En México, el control exclusivo existe cuando un
barco entra en puerto. No hay un plan general de vigilancia”, dijo.
Ante un México inoperante, las
embarcaciones proseguirán con su arribo y su estela de contaminación. https://ipsnoticias.net/
“Defender el Agua es Defender la Vida”