Martes, 10 de mayo de 2022 – Año XV – Edición 3964 – http://hidroboletinfentap.blogspot.pe
Gobierno emitirá Decreto de Urgencia para crear Fondo Nacional del Agua
El ministro de Desarrollo Agrario y Riego, Oscar Zea, puso
en marcha el canal Roma- Sector Toma Soldado, en el distrito de Ascope, obra
ejecutada a través del Programa Subsectorial de Irrigaciones (PSI) que
beneficiará a más de 1000 familias y atenderá 9000 hectáreas en La Libertad.
En su visita de trabajo, Zea, también anunció la próxima
ejecución del canal Cao con una inversión de 14.7 millones de soles y que
apoyará a 468 familias de agricultores y 12 151 hectáreas de cultivos de los
sectores Magdalena, Roma, Campo, Larco, entre otros.
El ministro Zea señaló que uno de los ejes centrales de la
Segunda Reforma Agraria es la seguridad hídrica a través de la ejecución de
infraestructura hidráulica, que permitirá gestionar e impulsar de forma
adecuada los recursos hídricos con fines poblacionales, agrarios, industriales,
entre otros. https://www.radionacional.com.pe/
HIDROREGIONES PERÚ
Implementan medición de caudales en ríos a nivel nacional
Como parte de las acciones de gestión del riesgo de
desastres, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi)
realizó la medición del caudal en los ríos Piura y Chancay Lambayeque, dando
inicio a la temporada de aforo a nivel nacional.
“Hemos desarrollado labores de aforo en los ríos Piura,
Bigote, Corral del Medio y Charanal en la cuenca Piura, además de los ríos
Chunchuca, Utcubamba, Marañón y Chinchipe en la Dirección Lambayeque con la
finalidad de fortalecer la vigilancia y pronóstico de caudal en la región.
Próximamente se tiene planificado realizar las mediciones en los departamentos
de Huánuco, Lima, Ica y San Martín”, dijo Luis Metzger, subdirector de
Predicción Hidrológica del Senamhi.
El funcionario refirió que estas mediciones se realizan
todos los años en coordinación con los hidrólogos de las Direcciones Zonales de
la institución y como parte de las acciones relacionadas a la prevención de
eventos hidrológicos extremos, informó el Senamhi. https://www.inforegion.pe/
LIMA PERÚ
Voluntarios recolectan más de 200 kilos de basura durante jornada de limpieza en playa San Pedro de Lurín
Con el retorno de los bañistas a
las playas después de dos años de acceso restringido, éstas se vieron afectadas
con un problema recurrente: la contaminación por plástico y desechos. Según el
Ministerio del Ambiente (Minam), solo en Perú, el 46% de los residuos sólidos
que se encuentran en las playas son de material plástico, los cuales tardan
cientos de años en descomponerse, generando graves daños ambientales que
atentan contra la fauna marina, ya que, al acumularse en el organismo de peces
y mariscos, se convierten en un peligro para la salud humana de llegar a
consumirse.
Ante ello, diversas
organizaciones y compañías han puesto en marcha campañas para contribuir con la
preservación del mar peruano, como es el caso de “Juntos por las playas”, una
iniciativa realizada por Belcorp, la multinacional con más de 50 años en el
sector belleza que agrupa a las marcas ésika, L’bel, y Cyzone, en conjunto con
Life Out Of Plastic (L.O.O.P.), con el objetivo de realizar la limpieza de más
de 200 kilos de basura del balneario de San Pedro ubicado en Lurín.
Para Verónica Melzi, Belcorp
Foundation Senior Manager, los residuos plásticos provocan la muerte de más de
un millón de aves marinas cada año y de 100 mil mamíferos acuáticos a escala
global. «De acuerdo con el Minam, las playas de Lima son las que generan la
mayor cantidad de residuos sólidos. En esa línea, a través de nuestro programa
de voluntariado contribuimos con la descontaminación de este balneario,
aportamos a la preservación del medio ambiente y, de esta manera, continuamos
construyendo un futuro lleno de posibilidades para todos”, señaló.
La jornada de limpieza se llevó
a cabo el sábado 30 de abril, en el marco del Día de la Tierra, que se
conmemora cada 22 de abril, y contó con la participación de más de 40
voluntarios de Belcorp, quienes estuvieron a cargo de la recolección de bolsas,
cañitas, botellas de plástico, utensilios descartables, entre otros.
Por otro lado, Verónica resaltó
que este tipo de iniciativas son parte del compromiso que tiene la compañía con
la sostenibilidad, la cual está fundamentado en cinco ejes
estratégicos: Empoderamiento femenino, Talento extraordinario, Cuidado del
planeta, Integridad y transparencia y Productos responsables, y que el trabajo
sobre cada eje es transversal a su operación, lo que no solo aporta al
propósito de la compañía, sino también en la consecución de los Objetivos de
Desarrollo Sostenible (ODS), impulsados por la Organización de las Naciones
Unidas (ONU).
Finalmente, la vocera indicó
que, a través del voluntariado Belcorp, continuarán aportando con este tipo de
iniciativas durante todo el 2022; además, resaltó la necesidad de continuar
generando conciencia, a fin de alcanzar hábitos responsables sobre el cuidado
del medio ambiente. https://caretas.pe/
HIDROMUNDO
¿La presencia comercial de China en la Amazonia puede volverse más ecológica?
Las inversiones chinas en Brasil
reflejan "un matrimonio de intereses", según Tulio Cariello, director
de investigación del Consejo Empresarial China-Brasil (CECB).
"[Las empresas estatales
chinas] State Grid y China Three Gorges (CTG) vinieron a Brasil a comprar
empresas porque el país ha puesto mucho en venta desde el final del gobierno de
Dilma Roussef [en 2016]. Y también porque esas empresas chinas necesitaban
salir al exterior, pues ya habían invertido mucho a nivel interno", dijo a
Diálogo Chino.
Desde entonces, la relación
comercial y de inversión de China con Brasil ha sido objeto de críticas por su
huella medioambiental, siendo la Amazonia el ecosistema que más despierta la
preocupación internacional.
Sin embargo, la Amazonia Legal,
que consta de nueve estados en el norte y el medio oeste de la cuenca del
Amazonas, fue el destino de solo 11.000 millones de dólares del total de 66.000
millones de inversión extranjera directa china en Brasil entre 2009 y 2019,
según datos recopilados por CEBC para Diálogo Chino. Muchos proyectos se
extienden también a otros estados, por lo que las cifras podrían estar
sobreestimadas.
En combinación con otros datos,
es posible trazar una imagen más clara de los lugares y sectores de la Amazonia
que reciben inversiones chinas, que, como indica la evolución de las políticas
en China, están experimentando un proceso de "ecologización".
China: un socio nuevo e
inexperto para la Amazonia
Durante décadas, los países de
la cuenca amazónica han intentado llevar el desarrollo a la selva. Bajo la
dictadura militar de Brasil (1964-1985), esto tomó el mantra de integrar para no
entregar (integrar, no abdicar), una frase irónicamente parecida a "úsalo
o piérdelo".
Pero la idea de apoyar este
desarrollo mediante financiación externa fue cuestionada, especialmente por los
movimientos conservacionistas de finales de los 60 y principios de los 70,
según un estudio del académico brasileño Luiz Barbosa. Muchos gobiernos en
desarrollo fueron acusados, con razón, de ser irresponsables con el uso de sus
recursos naturales.
La historia de China en la
Amazonia comenzó cuando el país asiático entró en la Organización Mundial del
Comercio (OMC) en 2001. Ese año, Baosteel, una empresa estatal con sede en
Shanghai, realizó su primera gran inversión directa en la Amazonia brasileña,
destinando 650 millones de dólares a la recién privatizada Vale, la mayor
empresa minera de Sudamérica y titular de los derechos de exploración de un
complejo de minas situado en el estado de Pará.
"Es un momento en el que
los chinos empiezan a mirar al mundo", dijo Quelen Guedes, profesor de
relaciones internacionales de la Universidad de Vale dos Sinos de Brasil.
En 2006, Wu Bangguo, entonces
presidente de la Asamblea Popular Nacional de China, realizó una gira por
América Latina. Dirigiéndose al Congreso Nacional de Brasil, dijo: "Brasil
es un país muy conocido y estimado por el pueblo chino [...]. Su fascinante
selva amazónica y el magnífico proyecto hidroeléctrico de Itaipú forman parte
del orgullo nacional".
La combinación de la Amazonia y
la energía hidroeléctrica presagiaba la participación de China en el desarrollo
de proyectos energéticos en Brasil y en la cuenca fluvial en general.
En la actualidad, las empresas
con sede en China poseen acciones equivalentes a más proyectos hidroeléctricos
enteros en la Amazonia que las de cualquier otro país, según el grupo de
reflexión The Dialogue, con sede en Washington.
Impactos comerciales en la
Amazonia
Un comercio fuerte sirvió de
columna vertebral para una mayor cooperación financiera. Durante la crisis
financiera mundial que comenzó en 2008, la demanda de productos básicos de
Estados Unidos y Europa se hundió, justo cuando China necesitaba petróleo, cobre
y mineral de hierro de Brasil, Perú y Ecuador para impulsar su rápido
desarrollo económico.
En 2009, China se convirtió en
el principal socio comercial de Brasil, superando a EE.UU. por primera vez. En
el caso de Perú, ocupa el mismo puesto desde 2014, cuatro años después de que
ambos países firmaran un acuerdo de libre comercio.
Sin embargo, estos productos
potencialmente de alto impacto, junto con la soja, empezaron a constituir la
abrumadora mayoría del comercio. En Brasil, el mineral de hierro, el aceite y
la soja sin procesar pasaron de representar menos del 45% de la creciente cesta
de exportaciones de China en 2003, a casi el 80% en 2019, según el Observatorio
de la Complejidad Económica.
Cuando China se convirtió en uno
de los principales compradores de soja brasileña, el refuerzo de la legislación
y su aplicación provocaron una ralentización de la expansión del cultivo en la
Amazonia. Los campos en el bioma del Cerrado, donde la legislación era más
débil, se extendieron. La moratoria de soja de 2006, un compromiso de las
multinacionales del comercio de cereales para dejar de abastecerse de
proveedores vinculados a la deforestación ilegal, se considera en general la
causa
La llegada la Franja y la Ruta
En 2013, la colosal Iniciativa
de la Franja y la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés) del presidente chino, Xi
Jinping, para aumentar la conectividad mundial, empujó -y dio sólo un poco más
de coherencia- al impulso de China para que sus empresas y bancos busquen
oportunidades en todo el mundo, incluida la selva amazónica.
China comenzó a diversificar su
cartera, consiguiendo contratos en los sectores del transporte, la agricultura
y la manufactura, apoyando el auge del comercio de materias primas y, a la vez,
motivándolo. Los puertos, las carreteras e incluso la posibilidad de un
ambicioso ferrocarril bioceánico que atravesara el Amazonas, estaban en la
mira, aunque en gran medida se ha quedado ahí.
En el momento en el que este
momento fue redactado, seis de los ocho países de la cuenca amazónica han
entrado a la BRI (sin incluir a la Guayana Francesa, una región de ultramar de
Francia). Colombia y Brasil no están en la lista. A pesar de los informes de
que Brasil ya ha designado oficialmente proyectos de la BRI, ningún nivel de
gobierno ha firmado ningún memorando de entendimiento para cooperar en el marco
de la BRI, considerada la medida de la adhesión.
Independientemente de esto,
Brasil fue el primer receptor regional de inversiones chinas entre 2003 y 2020.
Una imagen más clara
Para David Cleary, actual
director de agricultura de la ONG The Nature Conservancy y antiguo director de
programas de conservación en la Amazonia y otras regiones, el principal interés
de China por Brasil está en otra parte. "El interés de las empresas chinas
está mucho más en las infraestructuras y, por tanto, se centra en el sur del
país, donde esas inversiones son más importantes", afirma.
A pesar de tener una presencia
directa "bastante limitada" en la Amazonia, China funciona como
"centro de demandas de exportación", según Cleary. El país es el
principal comprador de productos agrícolas brasileños, sobre todo de soja y
carne vacuna, que a menudo se producen de forma extensiva, invadiendo los
bosques tropicales. La ganadería impulsa el 80% de la deforestación amazónica,
según el instituto de investigación Imazon.
El año pasado, el 37% de las
importaciones chinas de carne vacuna brasileña y el 27% de sus 58,15 millones
de toneladas de soja procedían de la Amazonia Legal, la región que contiene el
bioma amazónico y su zona de amortiguación, según datos comerciales brasileños.
El volumen que compra China es
importante para la Amazonia porque, aunque la gran mayoría procede del sur de
Brasil, el cultivo en esa requiere una gran superficie y desplaza a los ganaderos
que abastecen el enorme mercado nacional de carne vacuna al norte, hacia la
selva tropical.
Sin embargo, proporcionalmente,
China se abastece menos de lugares asociados a riesgos de deforestación que la
UE, según Trase, una ONG que supervisa las cadenas de suministro.
De hecho, para 2020, Trase
descubrió que la exposición de China al riesgo de deforestación, es decir, la
probabilidad de abastecerse de proveedores vinculados a la deforestación
ilegal, se concentraba en sólo el 1% y el 2%, respectivamente, de los
municipios productores de soja y carne vacuna de Brasil.
Preocupada más por la seguridad
alimentaria que por el impacto climático o medioambiental del comercio de carne
vacuna, China ha estado exigiendo la certificación del origen de la carne.
Aunque el mecanismo aún debe reforzarse, es un indicio de que se está avanzando
hacia una mayor transparencia en las cadenas de suministro
"No creo que China vaya más
allá de la legalidad, y la legalidad ya es importante, especialmente en la
cadena de la carne en Brasil, donde todavía hay mucha ilegalidad", dice
Cleary. "China es un país que se toma en serio los planes, los compromisos
y la seguridad nacional".
Tras una década de tasas de
deforestación controladas en Brasil, el año pasado alcanzaron máximos
históricos, lo que estimuló el debate sobre los esfuerzos de los compradores
internacionales de productos agrícolas por desarrollar políticas sólidas y
respetuosas con los bosques.
COFCO, el principal comerciante
de soja de China, siguió a los principales comerciantes internacionales de
alimentos al comprometerse en 2020 a tener una cadena de suministro forestal
totalmente transparente para 2023, un objetivo que parece remoto dada la
interrupción por la pandemia. Aunque no abordó el tema de sus proveedores
indirectos, la medida fue bien recibida por los grupos conservacionistas.
Una ONG china también está
buscando formas de "ecologizar" el comercio. El Global Environmental
Institute (GEI), con sede en Beijing, la primera ONG china que "sale"
con las empresas para conocer mejor sus limitaciones medioambientales en el
extranjero, ha firmado recientemente un acuerdo de cooperación con el gobierno
de Mato Grosso, el mayor estado productor de soja de Brasil. La asociación
pretende establecer inventarios de emisiones y mecanismos de compensación y
certificación.
Una asociación científica de
larga duración proporciona datos importantes para entender dónde existen
presiones de deforestación impulsadas por la demanda. Desde el lanzamiento de
su primer satélite en 1999, el programa del Satélite de Recursos de la Tierra
China-Brasil (CBERS) ha proporcionado imágenes en tiempo real a organismos de
vigilancia de la deforestación como el Instituto Nacional de Investigaciones
Espaciales (INPE) de Brasil.
Además de los datos sobre las
cadenas alimentarias, una investigación reciente sobre las inversiones en
energía da una idea más clara del nivel de participación de las empresas chinas
en los proyectos amazónicos, en comparación con las de otros países. La
investigación del The Dialogue descubrió que las empresas canadienses controlan
el mayor número de yacimientos petrolíferos en la Amazonia, unos 24 sólo en
Colombia. China sólo representa el 10% de los proyectos mineros y energéticos
de la Amazonia.
Sin embargo, algunas empresas
extractivas chinas tienen intereses en zonas de biodiversidad de renombre,
siendo la más destacada el parque nacional Yasuní, en la Amazonia ecuatoriana.
En febrero, China National Petroleum Corp (CNPC) obtuvo el primer contrato para
la perforación de pozos en el campo petrolero Ishpingo, uno de los tres del
bloque conocido como ITT (Ishpingo, Tambococha y Tiputini) o bloque 43, que se
encuentra dentro del parque.
En 2020, la empresa china
Chuanqing Drilling Engineering Company Limited obtuvo un contrato de 148
millones de dólares para perforar en el bloque 43. Además de los riesgos de la
propia perforación, la infraestructura necesaria para transportar la
maquinaria, los productos petrolíferos y el personal podría infringir una
"zona de amortiguación" entre los yacimientos y el territorio
indígena waorani.
Históricamente, las empresas
privadas y estatales de China han demostrado estar dispuestas a operar en zonas
consideradas por otras empresas internacionales como de alto riesgo, en
términos de seguridad y accesibilidad, según Cleary. En la última década, 11 de
las 14 inversiones chinas en la región amazónica de Brasil fueron realizadas
por empresas estatales, según el BRICS Policy Center. Aunque muchos reconocen
que el beneficio económico es central en la toma de decisiones de inversión,
las necesidades nacionales de seguridad alimentaria y energética también ocupan
un lugar privilegiado.
"Las empresas chinas no
tienen problemas para trabajar en geografías difíciles y remotas. Ya tienen
mucha experiencia buscando oportunidades de inversión en todo el mundo, como en
África, Asia y ahora en América Latina", afirma Cleary.
Políticas de protección del
medioambiente en el país y en el extranjero
Cuando Xi Jinping lanzó la BRI
en 2013, integró la idea de "civilización ecológica", anunciada en un
documento político del año anterior. Se centró firmemente en situar el
medioambiente en el centro del desarrollo dentro de las fronteras nacionales.
En 2018, una enmienda constitucional en China impuso obligaciones de cuidado
del medioambiente a las instituciones y autoridades públicas.
Sin embargo, no había
disposiciones claras sobre las inversiones chinas en el extranjero, más allá de
las directrices sobre el crédito verde que surgieron por primera vez en 2012,
las instrucciones específicas para el sector minero que salieron en 2015 y un
marco de gestión del riesgo medioambiental en el extranjero de 2017 que nunca
llevó a castigar la no alineación.
La llegada de la BRI ha subido
la apuesta. En el foro de la BRI de 2019, se creó la Coalición Internacional
para el Desarrollo Verde de la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRIGC) con el
objetivo de reforzar el compromiso de China de promover el desarrollo verde en
los países miembro. La guía desarrollada es significativa porque se aparta de
la política de larga data de dejarlo en manos de las normas del país anfitrión.
Los inversores chinos no ganaron
suficiente experiencia para tratar los problemas medioambientales, ya que
tenían una demanda muy alta de logros económicos por parte de los niveles
superiores del gobierno
Para Zhongzhou Cui, profesor
asociado del Centro de Estudios sobre América Latina de la Universidad de
Ciencia y Tecnología del Sudoeste, la elaboración de políticas medioambientales
es una novedad relativa en China, en comparación con los países occidentales.
"China no contaba con políticas y leyes bien establecidas para tratar las
cuestiones medioambientales hasta hace poco", declaró a Diálogo Chino y
añadió: "Occidente y los países latinoamericanos tienen expectativas
demasiado altas para los inversores chinos a la hora de tratar las cuestiones
medioambientales".
Durante 35 años, desde las
reformas económicas del país a finales de la década de 1970, China dio
prioridad al desarrollo económico sobre la protección del medioambiente, dijo
Cui. "Los inversores chinos no ganaron suficiente experiencia para tratar
los problemas medioambientales, ya que tenían una demanda muy alta de logros
económicos por parte de los niveles superiores del gobierno", afirma.
La búsqueda de oportunidades de
inversión rentables llevó a China a participar en proyectos controvertidos en
la selva amazónica. La represa de Belo Monte, para la que la empresa china
State Grid construyó gigantescas líneas de transmisión, es un ejemplo
destacado. Desde 2011, la central hidroeléctrica ha sido objeto de una
investigación por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos,
acusada de daños ambientales y violación de los derechos de los indígenas.
Otro ejemplo es la represa Coca-Codo
Sinclair de Ecuador, el mayor proyecto energético del país, respaldado con
2.240 millones de dólares del Banco de Exportación e Importación de China y
ejecutado por SinoHydro. Denuncias de corrupción, sobrecostos y un accidente en
2014 en el que murieron 14 trabajadores fueron solo algunos de los muchos
contratiempos del proyecto. Con toda probabilidad, también provocó que una
conocida cascada se secara por completo. Inaugurada en 2016, es una de las ocho
centrales hidroeléctricas construidas por un contratista chino en Ecuador en
los últimos 15 años.
Los gobiernos anfitriones han
tenido una gran cuota de responsabilidad en la gestión de los riesgos
ambientales asociados al comercio y la inversión por parte de China y han
debilitado las regulaciones para tratar de impulsar el comercio. Bolivia
cuadruplicó la cantidad de tierra que podía ser deforestada por incendios
forestales en 2019, poco después de firmar acuerdos para aumentar las
exportaciones agrícolas a China, y a raíz de la guerra comercial entre Estados
Unidos y China, explica Rebecca Ray, investigadora principal del Centro de
Políticas de Desarrollo Global de la Universidad de Boston.
"Estamos hablando de
sacrificar potencialmente un activo natural a largo plazo que es necesario en
muchos sentidos por beneficios financieros a corto plazo. Con el tiempo, estas
tarifas se reducirán y los precios bajarán", afirma.
El gobierno de Jair Bolsonaro en
Brasil se ha esforzado por flexibilizar las leyes medioambientales, lo que ha
provocado tasas de deforestación catastróficas. Más conscientes de los riesgos
que supone para su reputación hacer negocios en lugares donde la aplicación de
la legislación medioambiental es débil, los responsables políticos chinos
entienden que necesitan sus propias políticas más sólidas, basándose en las que
se lanzaron por primera vez hace una década.
¿Nuevo impulso a las
oportunidades verdes en la Amazonia?
Durante su discurso en la
Asamblea General de las Naciones Unidas de 2021, Xi Jinping también anunció que
China reducirá las inversiones en proyectos de energía de carbón en el
extranjero y apoyará las energías renovables y las iniciativas de baja emisión
de carbono.
Para Cariello, hay una gran
oportunidad para proyectos en la región amazónica que promuevan la
sostenibilidad. "Pasar a una economía verde es una prioridad en el Plan
Quinquenal de China, ya tienen proyectos para reducir las emisiones de gases de
efecto invernadero. El sector de las energías renovables es fundamental para
ellos, así que veo una gran sinergia entre Brasil y China en este sector".
Cui dijo que el gobierno de
Beijing ha estado animando a las empresas chinas a mitigar los riesgos de
impacto ambiental en sus inversiones en el extranjero: "Normalmente los
países anfitriones no dan importancia a las normas chinas y favorecen las
anticuadas copiadas de Occidente. Se esfuerzan por convencer a los gobiernos
locales, pero no suele funcionar".
La financiación también puede
ser una herramienta poderosa. Sin embargo, no se han dado detalles sobre el
tipo de iniciativas que se beneficiarán del Fondo de Kunming, anunciado en la
primera parte de las conversaciones sobre el Convenio de la Diversidad
Biológica de la ONU, organizadas por China, en octubre de 2021. La segunda
parte del evento se celebrará a finales de este año.
"Veremos si estos anuncios
abren una nueva era de financiación para las estrategias de energía sostenible
o si abren la disponibilidad de nuevos fondos para proyectos anticuados que son
bastante destructivos y traen consigo importantes conflictos sociales",
dijo Ray.
En el ámbito de la energía
solar, China ya está presente en la Amazonia, hasta ahora no a través de
inversiones en grandes proyectos, sino mediante el suministro de tecnología
rentable. Se instalan pequeñas unidades de energía solar en zonas remotas de la
región gracias a la fuerte caída de los precios de los paneles solares,
impulsada por la fabricación china a escala. En Brasil los costos han
disminuido un 80% en la última década.
La presencia china en el sector
de la energía en la Amazonia conlleva importantes beneficios potenciales si los
gobiernos locales quieren utilizarla así
"China tiene acceso a
ciertas tecnologías y a servicios y bienes de bajo costo para la energía
genuinamente renovable como la eólica y la solar. La presencia china en el
sector de la energía en la Amazonia conlleva importantes beneficios potenciales
si los gobiernos locales quieren utilizarla así", añade Ray.
Para fabricar elementos para la
energía solar y la energía eólica se necesita una gran cantidad de minerales
conocidos como tierras raras. Muchos se encuentran en la cuenca del Amazonas.
"Si China aumenta su apoyo a la energía eólica o solar, va a necesitar
tierras raras y litio. Así que no significa necesariamente que haya menos
demanda de minerales latinoamericanos por parte de China, sino que puede
significar un cambio hacia menos carbón de Colombia, por ejemplo, y quizás más
litio o cadmio", dice Ray.
Para que China sea un motor de
la transición sostenible, los gobiernos de la región amazónica también tienen
que estar interesados en fomentar las buenas prácticas medioambientales.
"La cuestión que se plantea es si los gobiernos nacionales quieren tener
una estrategia para utilizar este potencial", dice Ray.
"Si tuvieran una estrategia
de creación y generación de energía realmente sostenible, tener socios chinos
podría facilitarlo, lo que no exime a China de ninguna responsabilidad". https://dialogochino.net/
“Defender el Agua es Defender la Vida”